Oda al vinilo a cuatro manos
Dos de los mejores 'disc jockeys' encandilaron ayer al p¨²blico de Madrid
"?Qu¨¦ van a pinchar con ocho platos? ?Pero, qu¨¦ es eso? Yo lo m¨¢ximo que he visto ha sido con cuatro. Dios m¨ªo, va a ser apote¨®sico". A Karen, venezolana de 22 a?os, un escalofr¨ªo le recorre el cuerpo al enterarse de la artiller¨ªa de los disc jockeys una hora antes de que la m¨²sica empiece a sonar.
Como ella, pocas de las 1.400 personas que casi llenaron anoche la Sala Riviera conoc¨ªan a ciencia cierta lo que se iban a encontrar. Pagaron 30 euros por la entrada y sab¨ªan que era un concierto especial de DJ Shadow y Cut Chemist, dos de los DJs m¨¢s aclamados del momento. Los jefes del llamado hip hop experimental. Sab¨ªan que el espect¨¢culo se llamaba The Hard Sell (algo as¨ª como la liquidaci¨®n de existencias). Y tambi¨¦n que todo esto empez¨® el d¨ªa que se suspendi¨® un concierto en el Hollywood Bowl de Los ?ngeles. Para sobreponerse a la cancelaci¨®n, la due?a del local, con capacidad para 16.000 personas, mand¨® un sms a DJ Shadow. "?Quieres pinchar t¨²?". Shadow, alias Josh Davis, llam¨® a su amigote de toda la vida y compa?ero de sello Cut Chemist e inventaron el espect¨¢culo que se vio anoche y con el que est¨¢n recorriendo el mundo: una alabanza a la verdad del vinilo. Muerte al iPod. Larga vida a los discos.
Dos neveras tipo 'pic-nic' decoraban la mesa de ocho tocadiscos
Dos peque?as neveras tipo pic-nic decoraban a las 10 de la noche la mesa de ocho tocadiscos. Sobre el escenario estaba la parafernalia habitual: mesas de mezclas, platos, peque?as c¨¢maras de v¨ªdeo que recogen los movimientos de manos... Pero de esa neverita no salieron refrescos, sino singles de 45 revoluciones. "?Todav¨ªa se fabrican?", se preguntaba una chica.
S¨ª, y con ellos se pueden hacer maravillas. A saber. Que suene el Stairway to Heaven, de Led Zeppelin al mismo tiempo que una base de hip hop, sobre la que se mezcla un anuncio televisivo de los a?os 50 que a su vez se funde con una dulce voz femenina... As¨ª hasta ocho.
DJ Shadow y Cut Chemist hicieron una demostraci¨®n de ingenio. La cosa pintaba bien, pero el invento no aguant¨® las dos horas y media del concierto. El d¨²o no incit¨® al baile, quiz¨¢ porque no pretend¨ªan eso, sino m¨¢s bien dar una lecci¨®n de poder¨ªo. Los alumnos/p¨²blico escuchaban mientras los profesores mostraban sus habilidades. En este caso fueron vinilos, pero, por el efecto entre el p¨²blico, bien podr¨ªan haber sido jarrones de cer¨¢mica. Por eso lo de ayer result¨® una clase interesante pero poco excitante.
DJ SHADOW. El Supremo s¨®lo escucha vinilos
Hay gente que cree en Dios. Otros, sin embargo, creen en DJ Shadow.
Este estadounidense, nacido hace 36 a?os en un suburbio de California, est¨¢ considerado como uno de los pioneros del hip-hop experimental e instrumental -s¨ª, el hip-hop tambi¨¦n se puede hacer sin cantar-. Aunque DJ Shadow, o lo que es lo mismo, Josh David, se considera s¨®lo un enfermo. Eso s¨ª, de esos que son capaces de pasarse horas y horas en una tienda de discos rebuscando joyas perdidas en vinilo para reciclarlas en himnos de culto.
En 1996, cuando todos daban ya por muerto al vinilo, Josh, entonces con 23 a?os, debut¨® con el soberbio Endtroducing, que se convirti¨® r¨¢pidamente en uno de los discos de referencia dentro del g¨¦nero.
Anoche pinch¨® todos esos discos que encuentra en tiendas llenas de polvo
CUT CHEMIST. El maltratador de discos
Cut Chemist tiene que agradecerle mucho a Theodore Livingston. Con 13 a?os Theodore par¨® un vinilo en su habitaci¨®n cuando su madre, desde el piso de debajo de su casa, le grit¨® para que bajase la m¨²sica de una maldita vez. El joven Theodore no pod¨ªa ni imaginar que el sonido que hizo sin querer se llamar¨ªa a?os m¨¢s tarde Scratch.
Cut Chemist, nacido como Lucas MacFadden, es ahora uno de los mejores activos de esa t¨¦cnica. Todo un arte que consiste en raspar, desgarrar o maltratar -siempre con clase- un disco.
A finales de los a?os noventa, Cut Chemist fue el ¨²nico chico blanco en el grupo de rap neoyorquino Jurassic 5. All¨ª, se curti¨® en la t¨¦cnica que le ha dado fama. Cuatro discos despu¨¦s, Lucas es tan capaz de girar por el mundo con DJ Shadow como de ser telonero de la ¨²ltima gira de la colombiana Shakira.
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