De chinos, chilenos y marcianos
Al leer una novela siempre te cuelas dentro de los personajes, esto es, haces una incursi¨®n en las vidas ajenas, cosa que es uno de los mayores viajes que uno puede emprender. Pero hay libros en los que este viaje es m¨¢s evidente o resulta m¨¢s ex¨®tico. Tan ex¨®tico como si visitaras el espacio exterior. Leyendo a veces vas a Marte.
Un poco marciana, un tanto alien¨ªgena parece, en efecto, la China retratada en El ojo de jade, una interesante novela de Diane Wei Liang. Diane naci¨® en 1966 en Pek¨ªn y pas¨® parte de su ni?ez junto con sus padres en los terribles campos de trabajo de la Revoluci¨®n Cultural; despu¨¦s, en los ochenta, particip¨® en las revueltas estudiantiles de la plaza de Tiananmen; a continuaci¨®n tuvo que exiliarse y lleva viviendo en Londres muchos a?os. Una biograf¨ªa ciertamente coherente. Aunque El ojo de jade sali¨® al mercado ingl¨¦s el a?o pasado y acaba de ser publicada en Espa?a, la acci¨®n transcurre en 1995, en un Pek¨ªn a comienzos de la explosi¨®n econ¨®mica, de la ambigua apertura capitalista y de los fulminantes cambios sociales. El libro est¨¢ protagonizado por Mei, una detective treinta?era y novata, pero, dentro de la sutil distinci¨®n entre las novelas de g¨¦nero negro y las obras puramente policiacas, se encuadrar¨ªa en el primer grupo, lo cual quiere decir que la intriga importa muy poco y el ¨¦nfasis reside en el retrato social.
Y as¨ª, de la mano de Mei recorremos un Pek¨ªn contradictorio y estramb¨®tico que est¨¢ a medio camino del sistema socialista y de no se sabe bien qu¨¦. Es una vasta ciudad repentinamente llena de cochazos de lujo, de nuevos ricos y tambi¨¦n nuevos pobres, de viejos caciques en pleno reciclaje e infinidad de ciudadanos at¨®nitos, todo ello bien adobado de guanxi, que es la red de contactos, el sistema de enchufes y amiguismo, la palabra m¨¢gica que abre y cierra puertas, que arregla y rompe vidas, que engrasa eficazmente la colosal corrupci¨®n.
Es un mundo muy raro. Los restos de las antiguas tradiciones chinas se mezclan en confuso revoltijo con los m¨¦todos mao¨ªstas y con los nuevos usos occidentales, como capas geol¨®gicas fracturadas por un terremoto. Por ejemplo, aunque el Pek¨ªn de 1995 es todav¨ªa oficialmente ateo y socialista, los personajes de la novela creen en la buena suerte que da el n¨²mero ocho, el m¨¢s providencial para los chinos. Por cierto que esa fe en las fechas propicias parece seguir estando muy arraigada: recordemos que los pr¨®ximos Juegos Ol¨ªmpicos de Pek¨ªn se inaugurar¨¢n el 8 del mes 8 a las 8 de la tarde, cosa evidentemente no casual.
Mei , en fin, nos lleva a bodas y banquetes, a fiestas de amigos, a los estrechos hutong o callejones populares, a restaurantes caros y garitos infames, a modernas pistas de patinaje, a centros comerciales. Como muchos otros detectives (?de d¨®nde vendr¨¢ esa obsesi¨®n alimenticia de los autores de novela policiaca?), Mei est¨¢ rodeada de comida por todas partes: en El ojo de jade se comen medusas y caballitos de mar en adobo, se devoran fabulosos bollitos Drag¨®n que recuerdan a Harry Potter y se mastican engarfiadas patas de pollo, escupiendo despu¨¦s elegantemente los ro¨ªdos huesecillos de los deditos. Todo bastante singular. Es una novela que proporciona cierto placer voyeur, porque te permite atisbar la vida cotidiana de la China de hoy, poco conocida en Occidente.
Pero adem¨¢s este libro sencillo e inteligente hace un v¨ªvido retrato de una sociedad llena de sombras en donde nada parece ser del todo legal ni del todo verdadero. Un mundo resbaladizo e incierto cuya negrura moral proviene de antes, de un pasado reciente tan atroz que la gente tuvo que denunciar a su propia familia para poder sobrevivir. De aquellos horrores totalitarios, viene a decir la autora, s¨®lo puede nacer una sociedad herida y enferma.
?se es el mismo diagn¨®stico y el mismo desconsuelo que encontramos en la nueva, potente y original novela del chileno Carlos Franz, Almuerzo de vampiros, que tambi¨¦n utiliza una estructura como de g¨¦nero negro para hablar de otra cosa. Y as¨ª, a trav¨¦s de una historia de intriga y bajos fondos fechada en la ¨¦poca pinochetista y localizada en un Santiago de Chile tan ominoso y atmosf¨¦rico que parece engullirte en su noche perpetua, Franz consigue hacer un retrato hipn¨®tico del veneno que destilan las dictaduras, y de c¨®mo esa ro?a moral quiebra irreversiblemente el espinazo de las personas y gotea sobre quienes vienen despu¨¦s, contaminando tambi¨¦n el futuro.
Me parece que yo no soy tan pesimista como Wei Liang y Franz, posiblemente porque, a diferencia de ellos, no viv¨ª los a?os primeros y peores de la dictadura que me toc¨® en suerte. Pero creo que conviene no olvidar la incre¨ªble devastaci¨®n que pueden causar las tiran¨ªas. El maravilloso libro Cisnes salvajes, un cl¨¢sico de la autobiograf¨ªa escrito por la china Jung Chang, relata el testimonio m¨¢s espeluznante sobre la represi¨®n pol¨ªtica que jam¨¢s he le¨ªdo. La madre de Chang, que siempre hab¨ªa sido una ferviente y fiel mao¨ªsta, cay¨® en desgracia, como tantos otros, en los tiempos de la Revoluci¨®n Cultural, y fue torturada y encarcelada durante largos a?os. Pero lo m¨¢s atroz es que, mientras dur¨® su cautiverio, jam¨¢s la dejaron sola. Siempre estaba acompa?ada por alguna carcelera, que incluso dorm¨ªa con ella en la misma cama. Por consiguiente, la madre de Chang ni siquiera pod¨ªa llorar por las noches, porque el llanto era considerado peque?oburgu¨¦s y una prueba clara de su culpabilidad. No creo que haya nada m¨¢s perverso que este m¨¦todo para destruir a una persona arrebat¨¢ndole hasta su libertad m¨¢s peque?a y rec¨®ndita, la libertad del dolor y la tristeza. Es una medida tan inhumana que resulta chocante, algo alien¨ªgena: ya digo que leer es como viajar a Marte. S¨®lo que, por desgracia, Marte est¨¢ en la Tierra.
El ojo de jade. Diane Wei Liang. Traducci¨®n de Lola D¨ªez Pastor. Siruela, 2007. 228 p¨¢ginas. 18 euros. Almuerzo de vampiros. Carlos Franz. Alfaguara, 2008. 232 p¨¢ginas. 15,50 euros. Cisnes salvajes. Jung Chang. Traducci¨®n de Gian Castelli Gair. Circe, 2004. 554 p¨¢ginas. 25 euros.
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