Tata pone una pica en Londres

Esta semana se ha registrado el ¨²ltimo cap¨ªtulo, por ahora, de la larga lista de fusiones, adquisiciones, acuerdos concretos... que han caracterizado a la industria automovil¨ªstica en los ¨²ltimos lustros. La aparici¨®n de nuevas potencias como China o India han dado un vuelco a la situaci¨®n con un magn¨ªfico exponente como el que supone que una marca india, Tata Motors, haya comprado dos emblemas brit¨¢nicos como Jaguar y Land Rover. En medio otro imperio, el norteamericano, en este caso Ford, que adquiri¨® la primera en 1989 y la segunda en 2000.

La operaci¨®n se ha cerrado pocas semanas despu¨¦s de que Tata presentara su propuesta de coche del pueblo, el Nano, con el que espera motorizar a miles de familias de la India y de todos aquellos pa¨ªses que est¨¦n dispuestos a incorporar a su parque automovil¨ªstico un coche que esperan vender por 1.700 euros.

A corto plazo, la operaci¨®n no afectar¨¢ a la importaci¨®n y distribuci¨®n de las tres marcas -Jaguar, Land Rover y Tata- en Espa?a

Para Ford supone un importante paso en el proceso de reestructuraci¨®n iniciado hace trees a?os. En 2007 vendi¨® la tambi¨¦n marca de prestigio Aston Martin que con Jaguar y Volvo formaban el denominado Premier Automotive Group (PAG), una de las experiencias m¨¢s negativas del fabricante norteamericano en los ¨²ltimos a?os. La ¨²nica marca extranjera que permanece en su ¨®rbita es Volvo, y aunque de momento han negado cualquier conversaci¨®n para su venta, a nadie le extra?ar¨ªa que a medio plazo se iniciara un proceso semejante al que ahora se cierra con Jaguar y Land Rover y en el que, seg¨²n algunos participantes, han tenido que hacer gala de una extraordinaria paciencia.

Ahora podr¨¢ concentrarse en su mercado natural, EE UU, en el que junto a sus dos acompa?antes de los tres grandes, General Motors y Chrysler, han visto reducida su cuota a menos de la mitad y en el que desde 2005 han perdido m¨¢s de 25.000 millones de d¨®lares entre los tres.

La venta de las dos marcas brit¨¢nicas se ha hecho por 2.300 millones de d¨®lares, -unos 1.485 millones de euros- con el compromiso de Ford de aportar 600 millones de d¨®lares -387 millones de euros- para los planes de pensiones de los fabricantes de ambas marcas, uno de los principales problemas a los que tendr¨¢ que hacer frente el fabricante indio a partir de ahora. La plantilla actual de las dos marcas brit¨¢nicas es de 16.000 empleados.

Para Tata se trata de una operaci¨®n con dos frentes atractivos: desde un punto de vista cualitativo, mejora el prestigio de su producci¨®n con dos marcas de lujo y con la absorci¨®n de importantes tecnolog¨ªas en segmentos de alto valor a?adido. Desde un punto de vista cuantitativo, aunque no se trata de grandes producciones , s¨ª que le permitir¨¢ estar presente en muchos pa¨ªses en los que les hubiera resultado dif¨ªcil aterrizar en solitario.

Espa?a es uno de los pocos pa¨ªses europeos en los que est¨¢n presentes. El grupo Berg¨¦ es el encargado de la importaci¨®n, distribuci¨®n y venta de los autom¨®viles Tata desde su llegada, pero todo parece indicar que al menos de momento no van a cambiar las cosas. Los 44 concesionarios de Jaguar y los 66 de Land Rover seguir¨¢n dependiendo de sus proveedores brit¨¢nicos. La filosof¨ªa demostrada por Tata en aterrizajes anteriores demuestra un claro respeto por los profesionales y los activos de las firmas adquiridas.