El bloqueo pol¨ªtico paraliza D¨¦nia

El Ayuntamiento de D¨¦nia se encuentra al borde del abismo justo cuando la ciudad encara uno de los momentos m¨¢s delicados de su historia, con la redacci¨®n de un Plan General pendiente y una crisis urban¨ªstica que amenaza su famosa prosperidad. La fuga protagonizada por el concejal socialista Juan Collado al Grupo Mixto hace unos meses ha dejado al gobierno local, integrado por PSOE y BNV, en minor¨ªa y a merced de una oposici¨®n cada vez m¨¢s crecida. No es para menos. El PP, los tres grupos independientes y el propio Collado se han acostumbrado a ganar en los ¨²ltimos plenos una votaci¨®n tras otra.

Esta ¨²ltima semana, la oposici¨®n ha hecho valer su mayor¨ªa para lograr dos nuevos triunfos: retirarle una serie de competencias a la junta de gobierno para devolv¨¦rselas al pleno y bloquear el plan especial para proteger el casco antiguo de la ciudad. Ambas cuestiones demuestran muy bien lo que est¨¢ sucediendo: PSOE y BNV ya no controlan su propia gesti¨®n y una intensa batalla urban¨ªstica sigue condicionando todos los pasos del Consistorio.

Aun queda suelo sin edificar al norte de Las Marinas y en el Montg¨® En esta situaci¨®n de crisis solo interesa el suelo m¨¢s caro y mejor situado

En los ¨²ltimos a?os, D¨¦nia ha experimentado un crecimiento notable que la ha llevado a alcanzar una poblaci¨®n cercana a los 50.000 habitantes. Sin embargo, a¨²n quedan amplias zonas sin edificar tanto en el litoral norte de Les Marines como en el Montg¨®. El destino de esos terrenos es el que debe decidirse ahora, en un momento de regresi¨®n en el sector de la construcci¨®n y cuando s¨®lo interesa el suelo m¨¢s caro y mejor situado.

Los protagonistas reconocen ese trasfondo urban¨ªstico. El primer teniente de alcalde, Pau Reig, asegura que el gobierno que comparte con la socialista Paqui Viciano "ha intentado restringir el crecimiento y ordenar la ciudad con criterios de sostenibilidad, pero hay algunos que s¨®lo aspiran a repartirse la tarta del pastel que queda y a aumentar el suelo urbanizable obedeciendo a intereses privados".

Collado lo ve justo al rev¨¦s. El concejal del grupo no integrado, que antes de marcharse del PSOE ya mantuvo una guerra larvada contra el sector de la alcaldesa Paqui Viciano, se muestra muy cr¨ªtico con el gerente de Urbanismo, a quien tilda de "in¨²til", y cree que la pol¨ªtica urban¨ªstica actual ha traicionado el antiguo programa del PSOE: "S¨®lo se beneficia a las grandes empresas, que arrasan con todo el suelo en Les Marines y en otras zonas de la poblaci¨®n". Denuncia incluso tratos de favor a grandes promotoras y habla de "irregularidades sobre las que debe pronunciarse la justicia".

Por su parte, la portavoz del PP, Ana Kringe, niega que su grupo tenga intereses pero coincide con Collado en criticar la labor de la gerencia de urbanismo y advierte del "malestar" de los constructores de la ciudad.

Mientras tanto, los asuntos cotidianos se ven amenazados por esta crisis. Los presupuestos para 2008 siguen sin aprobarse. Consciente de su precaria situaci¨®n, el gobierno local ha intentado consensuar las cuentas con la oposici¨®n incluyendo algunas de sus demandas, pero el PP y el resto de los grupos creen que no es suficiente. "Pedimos dos millones para el pol¨ªgono industrial y solo nos han dado 150.000 euros. As¨ª es imposible", se?al¨® Kringe.

En cambio, Reig considera que su ejecutivo s¨ª que ha dado sobradas muestras de buscar un entendimiento. El jueves, PSOE y Bloc votaron a favor de la retirada de las competencias de la junta de gobierno para entreg¨¢rselas al pleno, como quer¨ªa la oposici¨®n: "Porque no tenemos nada que ocultar".

Si el di¨¢logo no fluye y Collado no firma la paz con sus antiguos compa?eros socialistas, la otra alternativa es una moci¨®n de censura. Pero tambi¨¦n es dif¨ªcil porque deben ponerse de acuerdo hasta cinco grupos pol¨ªticos de intereses muy variopintos. "Yo nunca propiciar¨ªa una moci¨®n de censura que le diera la alcald¨ªa al PP", asegura Collado, "no har¨ªa ese viaje con esas alforjas. Si al final fuera necesaria una moci¨®n, el alcalde deber¨ªa ser de otro partido".

Los populares -que con cinco ediles son el partido mayoritario de la oposici¨®n frente a los dos ediles de Gent de D¨¦nia, otros dos de Centre Unificat y uno del PSD, aparte de Collado- tambi¨¦n son conscientes de las dificultades de una moci¨®n: "Ahora mismo no nos la planteamos", dijo Kringe, quien apost¨® por intentar una y otra vez el di¨¢logo. El problema es que, por el momento, ese di¨¢logo parece una quimera.