Montmel¨® no enga?a

Tal como est¨¢n las cosas en el campeonato y tras la carrera que vimos ayer en Bahrein, el Gran Premio de Espa?a, que se disputar¨¢ en Montmel¨® dentro de tres semanas, se adivina important¨ªsimo con vistas a establecer el orden que marcar¨¢ la primera mitad del Mundial y puede que tambi¨¦n el final.

Tras las tres primeras carreras (Australia, Malaisia y Bahrein), la mayor¨ªa de los equipos desplazar¨¢n a Barcelona la primera evoluci¨®n que incorporar¨¢n sus coches este a?o. Los cambios, b¨¢sicamente para todos, se reducen al paquete aerodin¨¢mico. El dise?o de la pista es una maravilla porque incorpora tramos para todos los gustos. Tiene curvas lentas y tambi¨¦n r¨¢pidas, fuertes puntos de aceleraci¨®n y frenadas muy potentes, y eso obliga a tener un coche muy equilibrado. Montmel¨® no enga?a, y el monoplaza que consiga rodar r¨¢pido all¨ª tambi¨¦n lo har¨¢ en adelante. Y, por el momento, los Ferrari siguen mostr¨¢ndose como los m¨¢s r¨¢pidos. Si ganan en Barcelona, no creo que nadie les pueda igualar. Aunque parec¨ªa que McLaren se hab¨ªa colocado a la misma altura, a¨²n est¨¢ unas d¨¦cimas por detr¨¢s, y lo mismo ocurre con BMW, que es la escuder¨ªa que m¨¢s ha evolucionado ¨²ltimamente. Su forma de trabajar es muy particular. Avanzan muy r¨¢pido y as¨ª impiden que los dem¨¢s equipos puedan copiarles. Para prueba, basta echar un ojo al revolucionario frontal del coche de esta temporada, que es el fruto del trabajo y de los estudios realizados en el t¨²nel de viento, que es una joya.

Robert Kubica est¨¢ realizando un trabajo excepcional y creo que pronto se posicionar¨¢ como primer piloto del equipo, por delante de Nick Heidfeld, que, adem¨¢s de ser alem¨¢n (como el equipo), tiene mucha m¨¢s experiencia en la F-1 que ¨¦l. A pesar de eso, creo que los coches de Heidfeld y Kubica a¨²n est¨¢n un pelda?o por debajo de los McLaren. Eso s¨ª, en funci¨®n de lo que BMW presente en la pr¨®xima carrera, la escuder¨ªa de Ron Dennis puede ver c¨®mo otro equipo se coloca entre ellos y Ferrari. El quid de la cuesti¨®n radica en saber qui¨¦n presentar¨¢ una evoluci¨®n de mayor magnitud. Si McLaren y BMW necesitan dar un paso adelante para atrapar a Ferrari, hay quien necesita dos o tres.

?ste es el caso de Renault. A pesar de que hay mucha gente que conf¨ªa a ciegas en la evoluci¨®n que el monoplaza de Alonso incorporar¨¢ en Montmel¨®, me cuesta mucho creer que les permita ganar tanto tiempo como apuntan algunos. Si los Renault s¨®lo estuvieran tres o cuatro d¨¦cimas por detr¨¢s de los primeros, la evoluci¨®n que presentaran en Barcelona ser¨ªa vital para tratar de engancharse a los rivales que tienen delante. Pero el principal problema que tiene el equipo de Alonso es que est¨¢ mucho m¨¢s lejos que eso. Ayer qued¨® muy claro, y las declaraciones que hizo Fernando tras la carrera fueron demoledoras. A pesar de que el accidente con Hamilton le rompi¨® parte del aler¨®n trasero, ¨¦l dijo que el coche no habr¨ªa ido mucho mejor, que durante la prueba se comport¨® m¨¢s o menos igual que en los entrenamientos, o sea, muy justito. Dudo de que el problema del R28 se limite ¨²nicamente al aspecto aerodin¨¢mico, sino que m¨¢s bien parece ser algo m¨¢s profundo, global. Para tratar de deshacerse del grupo de coches con los que ahora se pelea Alonso (Red Bull, Williams, Toyota...), la escuder¨ªa francesa debe realizar dos evoluciones en una, algo que hoy en d¨ªa es pr¨¢cticamente imposible. Es muy inusual ver c¨®mo un coche de F-1 da un salto cualitativo de un segundo, de golpe y porrazo. M¨¢s a¨²n cuando los dem¨¢s tampoco est¨¢n dormidos y siguen incorporando novedades para tratar de ara?ar d¨¦cimas al reloj.

La cita de Barcelona llega en el mejor momento porque, por distintas circunstancias, marcar¨¢ el futuro de unos y otros.