Derecho a saber(lo)

Ante el silencio de Ibarretxe frente a los sucesos de Mondrag¨®n, Patxi L¨®pez dijo que el lehendakari estaba "apagado y fuera de cobertura". Andoni Ortuzar respondi¨® acusando a los socialistas de usar un estilo "falt¨®n y barriobajero". Convengamos en que la expresi¨®n utilizada por Patxi L¨®pez es una frase hecha y que pueden imaginarse arranques m¨¢s originales y f¨¦rtiles para centrar el asunto. Pero la respuesta de Ortuzar no es precisamente el colmo de la sofisticaci¨®n intelectual ni de la delicadeza social (se incluye en lo pol¨ªticamente incorrecto la desconsiderada referencia a los residentes en los barrios m¨¢s desfavorecidos). En cualquier caso, existe entre las dos intervenciones una diferencia sustancial. Lo dicho por Patxi L¨®pez, independientemente de su forma, es m¨¢s que pertinente en el fondo: cuestiona la legitimidad del silencio de Ibarretxe y suscita una interrogaci¨®n fundamental, y entiendo que compartida por gran parte de la sociedad vasca: ?Qu¨¦ tiene que decir el lehendakari sobre lo sucedido en Mondrag¨®n? ?C¨®mo responde Ibarretxe ante la ciudadan¨ªa de o sobre la actuaci¨®n de su partido? Las palabras de Ortuzar, en cambio, carecen de fondo, no responden ni aproximadamente al cuestionamiento o a la interrogaci¨®n. Y la ciudadan¨ªa vasca se queda, como tan a menudo, sin saber(lo).

?C¨®mo responde Ibarretxe a la ciudadan¨ªa sobre la actuaci¨®n de su partido?

Y recuerdo lo sucedido en sede parlamentaria cuando Mar¨ªa San Gil critic¨® los viajes al extranjero del lehendakari por el gasto que representan, la finalidad divulgativa de su plan que persiguen y el hecho de que, desde 2003, no han viajado con ¨¦l representantes de Confebask. Tambi¨¦n entonces la dirigente popular fue acusada por Ibarretxe de ser una "faltona" y de usar un estilo "barriobajero" (la coincidencia de calificativos evidencia que el PNV no pasa tampoco por momentos de bonanza l¨¦xica). Como el asunto qued¨® sin respuesta de fondo, y a riesgo de resultar faltona y dem¨¢s, yo tambi¨¦n pregunto: ?Por qu¨¦ no viajan empresarios con el lehendakari? ?C¨®mo o con qu¨¦ beneficios concretos para Euskadi se justifican los cientos de miles de euros que cuestan esos desplazamientos al exterior?

Es muy larga la lista de lo que aqu¨ª se queda sin respuesta suficiente. Por ejemplo: ?Por qu¨¦ tenemos que pagar en la A-8 un peaje, es decir, por prestaciones de autopista que en gran parte del trayecto no recibimos? O ?por qu¨¦ se ha tardado 13 a?os en auditar a la Sociedad Yenedora del Guggenheim? ?Por qu¨¦ no se control¨® ni asegur¨® la operaci¨®n que supuso all¨ª una p¨¦rdida de seis millones de euros? Y ?por qu¨¦ recibiendo tanto dinero p¨²blico es el museo de arte m¨¢s caro de Espa?a? O ?por qu¨¦, con el horizonte de una reforma de los modelos ling¨¹¨ªsticos educativos, no se nos explica (con claridad) la decisi¨®n del Gobierno vasco de que la mayor¨ªa de los alumnos escolarizados en modelo D realizaran los ex¨¢menes del informe Pisa en castellano? ?No es ello un alarmante signo de auto-desconfianza del propio sistema?

Creo que en el mejor de los mundos democr¨¢ticos los ciudadanos se sienten tambi¨¦n en el deber de saber todas esas cosas. En ¨¦ste, tenemos al menos el derecho a saberlas, a no ser descalificados por preguntarlas directa o representadamente, el derecho a conocer con puntualidad y detalle las razones y los efectos de los dichos, de los hechos y, naturalmente, de los silencios p¨²blicos.