A la gresca desde el primer d¨ªa
Chaves, investido presidente con los votos del PSOE tras un duro debate
De pactar, por ahora, ni hablamos. ?sa es la conclusi¨®n que se deriv¨® del duro, tenso y vivo cara a cara que mantuvieron ayer el socialista Manuel Chaves y el popular Javier Arenas. Desde el primer momento qued¨® claro que el PP no va a conceder ni 100 d¨ªas de cortes¨ªa al nuevo Gobierno andaluz, ni el PSOE conf¨ªa en tres meses de tregua de la derecha. "Si usted no me va dejar pasar ni una me parece bien, pero yo a usted, tampoco", dej¨® dicho en el diario de sesiones Chaves antes de resultar elegido por sexta vez con mayor¨ªa absoluta presidente de la Junta. El cara a cara mantenido ayer por ambos pol¨ªticos, en un tono de rivalidad personal, aleja la posibilidad de pactos a corto y medio plazo, pese a que ambos dijeron tener la mano tendida. El papel de una escuchimizada Izquierda Unida, con seis diputados, frente a los 56 del PSOE y los 47 del PP est¨¢ por ver. Para empezar, el discurso de su portavoz, Diego Valderas, qued¨® eclipsado por el combate dial¨¦ctico entre Chaves y Arenas.
Chaves: "Reconozco su desparpajo para vender una moto averiada"
Arenas: "Si sus compromisos fueran contratos, colapsar¨ªa los juzgados"
Con el choque de ayer, m¨¢s propio de un debate del estado de la comunidad, qued¨® claro que el Parlamento de la octava legislatura tendr¨¢ menos muermo y eso es debido a la presencia de Javier Arenas. A los suyos les estimula, pero a los socialistas, tambi¨¦n y adem¨¢s los espabila. Hac¨ªa mucho tiempo que no se ve¨ªa a diputados de una y otra bancada formar corrillo despu¨¦s del pleno para comentar la jugada. Y ayer ocurri¨®.
Hace 12 a?os Chaves y Arenas ocupaban los mismos asientos que ahora en el Parlamento andaluz. El primero sigue en el Gobierno, pero con mayor¨ªa absoluta, y el segundo, con m¨¢s diputados, pero en la oposici¨®n.
Arenas, que se mostr¨® "satisfecho" y "optimista" por los resultados conseguidos, hil¨® su primera intervenci¨®n desconfiando de la voluntad del socialista en llegar a acuerdos, aunque a rengl¨®n seguido asegur¨® que le concede "el m¨ªnimo de credibilidad" por sus incumplimientos. El planteamiento del dirigente del PP fue el de resaltar la ristra de asuntos pendientes de otra legislatura, sin caer en la cuenta, como dijo el portavoz socialista Manuel Gracia, que tras las elecciones todos los partidos ponen a cero su contador. "Existe el h¨¢bito de conceder 100 d¨ªas a los nuevos gobiernos. Este no es el caso. Habr¨¢n pasado 30 a?os de un proyecto agotado cuando termine esta legislatura", se?al¨®. A esta altura de su intervenci¨®n, Chaves no hab¨ªa tomado ni una sola anotaci¨®n, dando a entender que se sab¨ªa de memoria lo que iba a decir su viejo adversario. "Si sus compromisos fueran contratos, los juzgados estar¨ªan colapsados" o "la calidad democr¨¢tica ha empeorado", dijo Arenas.
La r¨¦plica de Chaves fue demoledora. El socialista hil¨® una tras otra frase recordando lo obvio: acaba de ganar por sexta vez las elecciones. "Yo no sab¨ªa que despu¨¦s de ganar por mayor¨ªa absoluta, era el reflejo de un proyecto agotado"; "ha perdido tres veces, ?no resulta agotador?"; "ha perdido despu¨¦s de 26 a?os de gobiernos socialistas, ning¨²n dirigente democr¨¢tico europeo se hubiera atrevido a hablar de resultados hist¨®ricos habiendo perdido por mayor¨ªa absoluta"; "en t¨¦rminos democr¨¢ticos su visi¨®n de los incumplimientos no es compartida por la mayor¨ªa de los ciudadanos"; "reconozco su desparpajo para vender una moto averiada". Estas frases del presidente sacaron de sus casillas a Arenas, quien reconoci¨® que subi¨® a responderle cabreado. Entr¨® en un terreno de juego que no ten¨ªa previsto. Acus¨® al socialista de tener "tics-autoritarios", de "soberbia", "propotencia", de carecer de grandeza en su victoria electoral, de hacer un discurso de la "clausura" y de querer "jubilarlo" porque, seg¨²n dijo, Chaves se pone "un poquito de los nervios" con ¨¦l.
Y Chaves volvi¨® a sacar el cuchillo. "Queremos que siga present¨¢ndose muchos a?os. Son los ciudadanos los que nos jubilan y a usted ya lo han prejubilado". El tono del debate eclips¨® el contraste de las propuestas, que el d¨ªa anterior desgran¨® con minuciosidad el socialista.
Con Valderas, Chaves estuvo m¨¢s conciliador, aunque le record¨® la pinza con el PP hace 14 a?os. "Hay espacio de acuerdo en el desarrollo del Estatuto y de los derechos sociales. Ustedes tienen la palabra", dijo ante un Valderas que ve m¨¢s diferencias que coincidencias con el PSOE.
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