?No cabemos todos!
Se multiplican los indicios de que en Europa se cuece un modelo alternativo al seguido hasta ahora en el tratamiento de la inmigraci¨®n. Y ello coincide con la peor de las coyunturas: una desaceleraci¨®n econ¨®mica de la que no se conoce a¨²n ni su profundidad, ni su duraci¨®n. La manifestaci¨®n m¨¢s brutal de ese cambio que se intuye la expres¨® Silvio Berlusconi -el representante de la nueva derecha europea- pocas horas despu¨¦s de ganar las elecciones: "Cerraremos las fronteras del pa¨ªs y estableceremos m¨¢s campos de detenci¨®n para identificar a los extranjeros sin empleo. Comenzaremos a devolver a sus pa¨ªses a los inmigrantes extracomunitarios de los pa¨ªses del Adri¨¢tico y el Mediterr¨¢neo".
Es imposible cerrar a la vez las puertas a los inmigrantes africanos y a los productos que el continente exporta
Con menos estridencias, el debate electoral espa?ol de hace mes y medio trajo tambi¨¦n consigo muestras de ese cambio de tendencia, cuando Mariano Rajoy pronunci¨® la frase clave: "?No cabemos todos!". El tono del PP tuvo escasos matices: se present¨® a la inmigraci¨®n como una amenaza, cuyo principal impacto estaba siendo la saturaci¨®n de algunos servicios p¨²blicos -educaci¨®n y sanidad-, la competencia por recursos sociales escasos y los perjuicios que de todo ello derivan para los ciudadanos espa?oles. El nombramiento como ministro de Trabajo e Inmigraci¨®n de Celestino Corbacho ha sido interpretado por algunos como una rectificaci¨®n de la pol¨ªtica del Gobierno socialista, aunque hasta ahora lo declarado por el ex alcalde de Hospitalet (una poblaci¨®n con casi un 25% de inmigrantes) hace dif¨ªcil avalar esa interpretaci¨®n.
Las pol¨ªticas restrictivas a la llegada de inmigrantes se van a confrontar con otro vector que tira en la direcci¨®n opuesta: la llegada de ciudadanos procedentes del sur (?frica) se va a multiplicar ante las mayores dificultades para sobrevivir, motivadas por la crisis alimentaria que con tanta fuerza ha emergido en los ¨²ltimos meses. ?sa es una de las conclusiones que han aparecido en el Foro ?frica, que est¨¢ desarroll¨¢ndose en Santa Cruz de Tenerife, organizado por CajaCanarias. En los ¨²ltimos a?os se han producido algunos cambios positivos en el continente africano: han emergido democracias que se contraponen a antiguas dictaduras (democracias fr¨¢giles, como aquellas en las que muchos de sus ciudadanos viven con algunos c¨¦ntimos de d¨®lar al d¨ªa), se ha reducido el n¨²mero de conflictos armados, y el PIB medio de la regi¨®n ha crecido alrededor del 6% en los ¨²ltimos a?os.
En este entorno se produce la crisis alimentaria, que se manifiesta en escasez y carest¨ªa y que afecta de modo central a muchos pa¨ªses de la regi¨®n. Es imposible dificultar al mismo tiempo la entrada libre, sin aranceles, de los productos que exportan los pa¨ªses africanos y la de los ciudadanos que huyen de la miseria. La culminaci¨®n de la Ronda de Doha, de la Organizaci¨®n Mundial de Comercio (OMC), a finales de mayo, dar¨¢ una medida de la sensibilidad a este problema.
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