Morente cuelga 'Omega' en la Red
El cantaor y Lagartija Nick recuperan el controvertido disco en cuatro escenarios
Enrique Morente sonr¨ªe cuando recuerda los quebraderos de cabeza que provoc¨® en su d¨ªa Omega, uno de los trabajos m¨¢s arriesgados de su carrera, en el que fusionaba lo jondo con el rock alternativo. El disco, editado en 1996 por El Europeo, es la visi¨®n del cantaor sobre Poeta en Nueva York, de Garc¨ªa Lorca, y re¨²ne 13 adaptaciones del poeta granadino y versiones de Leonard Cohen. En el ¨¢lbum, adem¨¢s de Lagartija Nick, le acompa?an m¨²sicos como Vicente Amigo, Ca?izares, El Paquete o Tomatito. Y en los coros y las palmas su hija Estrella Morente y Aurora Carbonell.
Ortodoxos y puristas se rasgaron las vestiduras ante lo que consideraban una falta de respeto. Ahora, 11 a?os despu¨¦s, escuchar el sonido de la bater¨ªa y las guitarras el¨¦ctricas de fondo con la voz rota de Morente no rompe ning¨²n esquema, pero Omega... eso s¨ª sigue sonando moderno. "Tiene la frescura de un disco de hoy", argumenta el cantaor. El inter¨¦s de Morente por recuperar un ¨¢lbum, que marc¨® un antes y un despu¨¦s en su carrera, le ha llevado a comprar el master original y los derechos de edici¨®n a la empresa editora y colgarlo ahora en la Red, en una p¨¢gina web www.morenteomega.com, que se estrena hoy y en la que se pueden descargar las canciones del ¨¢lbum por 0,99 euros. Omega en versi¨®n online incluye un tema in¨¦dito, Oriente y Occidente, grabado con Sonic Youth en 2005 durante la celebraci¨®n de la primera edici¨®n de Heineken-Greespace.
"Siempre me ha gustado experimentar y mezclar los sonidos"
Coincidir con Cohen en Benic¨¤ssim le hace especial ilusi¨®n a Morente
Morente (Granada, 1942) suele decir con su retranca habitual que uno de sus sue?os ser¨ªa convertirse en cantante de rock. La reedici¨®n de Omega, que ha sido remasterizado en Nueva York para su nueva vida, le permitir¨¢, en cierto modo, ver cumplido ese deseo ¨ªntimo. La vuelta a la actualidad de Omega se completa con una gira estelar por cuatro ciudades. Morente y Lagartija Nick ya han empezado a ensayar la puesta en directo del ¨¢lbum que les llevar¨¢ por escenarios tan emblem¨¢ticos como la plaza del Z¨®calo en M¨¦xico (26 de abril), Primavera Sound (31 de mayo) -al que Morente ha acudido en alguna ocasi¨®n "como paseante y como bebedor"-, La Riviera en Madrid (21 de junio, D¨ªa de la M¨²sica) y el FIB Heineken (20 de julio). Esc¨¦ptico por naturaleza, el cantaor se niega a entrar en comparaciones. "En cada disco soy una persona diferente, tambi¨¦n ahora soy otro cantaor, no voy a cantar siempre igual. Deber¨ªa hacer un cursillo de igualdad o de disciplina para corregirme. Hay cantaores muy buenos que est¨¢n siempre en la misma expresi¨®n, pero no es mi caso".
Ahora que todo avanza a velocidad digital y que las fusiones andan a la orden del d¨ªa, Morente esquiva la pol¨¦mica con los sectores m¨¢s inmovilistas del g¨¦nero -"si a m¨ª lo que m¨¢s me gusta es la m¨²sica cl¨¢sica religiosa"-. Su inter¨¦s por Omega es puramente profesional: "Antes de publicarlo ya hab¨ªa metido la pata con una misa laica", dice. "Siempre me ha gustado experimentar y mezclar los sonidos del pasado con los del futuro, pero para crear es necesario partir de un origen. Nunca he pretendido renovar, sino crear y expresarme". De hecho, la m¨²sica de Omega, adem¨¢s de la fusi¨®n con el rock, es tambi¨¦n el resultado de la mezcla de elementos extra¨ªdos de las voces de Antonio Chac¨®n, Manuel Torres o Pastora Pav¨®n.
Para hacerse una idea de la revoluci¨®n que supuso la salida del disco, Morente recuerda que, antes de su publicaci¨®n, el cantaor se present¨® en el madrile?o teatro Alb¨¦niz con Tomatito, en un concierto "muy flamenco y muy cl¨¢sico" que hab¨ªa levantado a los aficionados de los asientos. "La equivocaci¨®n estuvo en el bis. Lo ten¨ªamos todo preparado, se levant¨® el tel¨®n y all¨ª estaba Lagartija Nick con su banda e interpretamos Omega. El tema dur¨® 10,40 minutos, pero los insultos en el hall duraron m¨¢s de una hora".
Borja Casani, director de la colecci¨®n que public¨® el ¨¢lbum, reconoce que mucha de la gente que acud¨ªa a las salas donde se present¨® el disco se levantaba en cuanto empezaba a sonar la bater¨ªa, "como si aquello fuera una blasfemia". Claro que, en cierto modo, las discusiones apasionadas no le vinieron mal a la promoci¨®n del ¨¢lbum. En su momento Omega lleg¨® a vender 50.000 copias y nunca ha llegado a estar descatalogado.
Casani recuerda que en el origen se lleg¨® incluso a negociar con Leonard Cohen para ejecutar un disco-libro conjunto. "Cohen se mostr¨® de acuerdo, le encantaba la idea, pero su conversi¨®n al budismo lo interrumpi¨® todo. Su maestro hab¨ªa enfermado y ¨¦l se marchaba a cuidarlo".
La vida da tantas vueltas que ahora cantaor y cantante volver¨¢n a encontrarse el pr¨®ximo mes de julio, en uno de los escenarios del Festival de Benic¨¤ssim. Coincidir con Leonard Cohen le hace especial ilusi¨®n. Digamos que Morente esperaba un momento as¨ª durante a?os. Coincidi¨® con el cantante canadiense -un apasionado del poeta granadino que incluso puso el nombre de Lorca a una de sus hijas- durante una actuaci¨®n de Cohen en Madrid y le cont¨® personalmente su intenci¨®n de recrear Poeta en Nueva York y transcribir al flamenco algunas de sus canciones, pero luego no volvieron a coincidir.
Morente, un apasionado de la poes¨ªa popular, ya hab¨ªa adaptado al cante versos de san Juan de la Cruz, Miguel Hern¨¢ndez y Antonio Machado. De Poeta en Nueva York le enganch¨® especialmente el estado de ¨¢nimo del poeta y la manera en que reflej¨® el estilo de vida americano el a?o del derrumbamiento de las Bolsas. "Todav¨ªa me atrapa la sorpresa que desprenden los versos de Lorca, ante un mundo que todav¨ªa nos invade hoy, que es el mundo del progreso".
La idea de Morente es recuperar en unos meses la nueva versi¨®n de Omega en formato f¨ªsico. El nuevo CD incluir¨ªa una canci¨®n nueva de Leonard Cohen que en su momento se qued¨® fuera. El arte debe de morir suena como un juicio a un m¨²sico, borracho y trasnochador, pero en su momento no se incluy¨® en el disco porque "todo el que la escuchaba se re¨ªa. Ignoro si pensaban en m¨ª al o¨ªrla, pero ahora ya no bebo...".
En cierto modo, Morente se obliga a cambiar de registro para no aburrirse. Ha fusionado su m¨²sica con los sonidos de la guitarra de Pat Metheny, Amaral, Los Planetas y Sonic Youth, entre otros. Tiene pendiente una actuaci¨®n con Metheny en el Palau de Barcelona. "Todo es distinto con Morente, pero todo es hermoso", escribi¨® en su momento ?lvarez Caballero.
Babelia
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