Rice apoya en Irak la ofensiva contra el radical Al S¨¢der

La visita ayer a Bagdad de la secretaria de Estado estadounidense, Condoleezza Rice, es un claro apoyo al Gobierno pronorteamericano de Nuri al Maliki en su batalla pol¨ªtica y militar contra el Ej¨¦rcito del Mahdi del cl¨¦rigo chi¨ª radical M¨²qtada al S¨¢der. "El Gobierno ha tomado la decisi¨®n de perseguir a las milicias y est¨¢ dispuesto a soportar las consecuencias. Tenemos una tremenda oportunidad pol¨ªtica y hay que aprovecharla", dijo Rice tras reunirse con el primer ministro Maliki y el presidente iraqu¨ª, Jalal Talabani.

El Ej¨¦rcito de EE UU mata a 12 milicianos en una incursi¨®n en Ciudad S¨¢der

Lo que est¨¢ en juego es algo m¨¢s que una batalla; lo que est¨¢ en juego es demostrar a la opini¨®n p¨²blica estadounidense en un a?o electoral que el nuevo Ej¨¦rcito de Irak empieza a estar capacitado para defender su pa¨ªs (y por lo tanto permitir una futura reducci¨®n de tropas estadounidenses). Pero la batalla real no va del todo bien. El Ej¨¦rcito iraqu¨ª fue incapaz de vencer la resistencia de los milicianos de Al S¨¢der tras cinco d¨ªas de lucha en Basora a principios de mes. Tras el alto el fuego negociado por Ir¨¢n, empez¨® una segunda ofensiva, menos frontal, que ha tenido m¨¢s ¨¦xito: el Gobierno ha recuperado el control de partes de Basora.

Las tropas estadounidenses apoyan este esfuerzo de manera visible. Ayer hicieron una incursi¨®n en Ciudad S¨¢der, un vasto arrabal de Bagdad donde viven m¨¢s de un mill¨®n de personas y es fuerte del cl¨¦rigo radical. Cerca de 40 milicianos murieron. La incursi¨®n se produce horas despu¨¦s de que Al S¨¢der amenazara con declarar la guerra total al Gobierno de Maliki.

En el norte, tropas estadounidenses e iraqu¨ªes han lanzado operaciones conjuntas en Mosul, considerado un reducto urbano de Al Qaeda en Irak. Maliki asegur¨® a Rice que la batalla entraba en su fase final. El presidente Talabani fue m¨¢s optimista a¨²n: "Vivimos una primavera iraqu¨ª".

Mejora en cambio el frente pol¨ªtico. El vice presidente sun¨ª Tariq al Hashemi, enemigo de Maliki, firm¨® ayer una declaraci¨®n conjunta con Talabani (kurdo) y el otro vicepresidente, el chi¨ª Abdil Abdul-Mahdi, de apoyo a la ofensiva gubernamental sobre Basora, rica en petr¨®leo y clave para la exportaci¨®n.

La breve visita de Rice a la ultraprotegida Zona Verde de Bagdad no fue anunciada, como de costumbre, por motivos de seguridad. Despu¨¦s de cinco a?os de la invasi¨®n estadounidense para derrocar a Sadam Husein, la Casa Blanca sigue empantanada en una guerra que no tiene fin. Esa guerra, sus elevados costes en vidas y dinero, es y ha sido parte del debate pol¨ªtico en EE UU. La batalla en la retaguardia tambi¨¦n ha sido dura.

El diario The New York Times inform¨® ayer de que el Pent¨¢gono infiltr¨® desde 2003 a decenas de analistas militares en los medios de comunicaci¨®n "para moldear la cobertura medi¨¢tica de la lucha antiterrorista".

El diario sostiene que el Pent¨¢gono coloc¨® en radios y televisiones a militares jubilados que por su experiencia ten¨ªan autoridad para opinar sobre asuntos de defensa y seguridad nacional.

El peri¨®dico asegura que "la mayor¨ªa de los analistas tienen v¨ªnculos con contratistas militares con intereses en las mismas pol¨ªticas de guerra que deb¨ªan evaluar. (...) Estas relaciones de negocios casi nunca se divulgan a los televidentes", contin¨²a el diario. Muchos de esos analistas est¨¢n relacionados con las m¨¢s influyentes empresas de defensa del pa¨ªs y representan a m¨¢s de 150 contratistas, sea en calidad de consultores o de miembros de sus juntas directivas.

En declaraciones al Times, un portavoz del Pent¨¢gono, Bryan Whitman, defendi¨® a los analistas al decir que ellos s¨®lo han dado informaci¨®n sobre la guerra.