"La banca nos ha ahogado"

El cacareado "aterrizaje suave" del mercado inmobiliario se ha convertido en pesadilla. Las compraventas de pisos en el arranque del a?o se han desplomado m¨¢s del 40% y numerosas promotoras notan el aliento de los bancos en el cogote. El presidente de la Asociaci¨®n de Promotores y Constructores de Barcelona (APCE), Enric Reyna, admite que la desaceleraci¨®n no ha sido como la prevista. Y llama a la responsabilidad de la banca.

Pregunta. ?Por qu¨¦ el aterrizaje ha sido brusco?

Respuesta. El sector necesitaba un aterrizaje suave. Pero est¨¢bamos arriba y de golpe hemos tocado suelo. No es una crisis por falta de demanda de vivienda ni porque se haya construido demasiado, salvo en alguna zona de segunda residencia. Lo que hay es una crisis financiera.

"La construcci¨®n en Catalu?a perder¨¢ 80.000 empleos este a?o"

"Hay demanda de vivienda, pero entre todos la hemos hecho insolvente"

P. ?Sin la contracci¨®n del cr¨¦dito habr¨ªa aterrizaje suave?

R. S¨ª, hubi¨¦ramos ido construyendo menos. Tambi¨¦n hay una crisis de confianza. La gente est¨¢ convencida de que las viviendas bajar¨¢n mucho de precio. No va a ser as¨ª. La obra nueva no tiene m¨¢rgenes importantes para caer, lo que no significa que haya alguna empresa que pueda hacer rebajas.

P. Los promotores de Madrid prev¨¦n una bajada del 14%...

R. No se explic¨® bien. Puede haber empresas que por su situaci¨®n se vean forzadas a rebajar ese 14%, pero no significa que el sector pueda asumirlo. ?Si habr¨¢ ajuste? Ya se ha producido. Los precios no est¨¢n subiendo, que ya es una forma de que bajen.

P. ?Se podr¨ªa haber evitado de alg¨²n modo la crisis?

R. S¨ª, pero desde fuera del sector. Esto empez¨® por el sistema financiero, con la crisis de las suprime. Tambi¨¦n hubo elecciones, y a unos les interesaba decir que la econom¨ªa iba muy mal y a los otros lo contrario. No era cierta ni una cosa ni la otra. A todo esto se le suma el aumento de los intereses. Todo se mezcla y estalla. Si la banca siguiera dando pr¨¦stamos, la crisis se paliar¨ªa.

P. Hay bancos y cajas que dicen no haber cerrado el grifo.

R. Hay compradores que vienen y dicen que el banco les ha dicho rotundamente que no. Algunos bancos afirman que est¨¢n abiertos, pero piden m¨¢s garant¨ªas, bajan las valoraciones y dan mucho menos porcentaje sobre el precio de venta.

P. ?A ustedes se los dan?

R. Hasta hace unos meses se daban cr¨¦ditos al promotor para comprar suelo a medio y largo plazo. Ahora la banca de esto ya no quiere ni o¨ªr a hablar. Ha ahogado la financiaci¨®n de las empresas, que ten¨ªan en vigor cr¨¦ditos e hipotecas, y aprieta para cambiar condiciones. Unas entidades, por miedo; otras, porque no tienen liquidez. El pa¨ªs necesita recobrar la confianza en el sector, que es solvente.

P. Durante varios a?os las empresas han hecho mucho dinero con la vivienda y ahora lloran a la Administraci¨®n y piden ayuda.

R. Ha sido una etapa buena, pero para todos: el propietario del suelo, el promotor, las administraciones, los arquitectos, los aparejadores, las compa?¨ªas el¨¦ctricas... La construcci¨®n es una de las locomotoras del pa¨ªs. Por cada empleado del sector hay 2,3 de industrias de alrededor. Si paramos, ir¨¢ gente al paro. Pedimos soluciones para el sector, la econom¨ªa y el comprador.

P. En 2006 se visaron m¨¢s de 120.000 pisos en Catalu?a. ?Qu¨¦ prev¨¦n para este a?o?

R. No se iniciar¨¢n ni 50.000.

P. ?Traducido en empleo?

R. Habr¨¢ entre 70.000 y 80.000 empleados menos. Se espera que la obra p¨²blica absorba parte de esta mano de obra. Nos tememos que no bastar¨¢.

P. ?Ayudan medidas como el fomento de la rehabilitaci¨®n?

R. S¨ª, pero la rehabilitaci¨®n dar¨¢ trabajo dentro de un a?o y medio o dos.

P. ?Y qu¨¦ hacer a corto plazo?

R. La clave es que exista una financiaci¨®n y unos precios adecuados para el comprador ante el stock de viviendas sin vender. Los promotores podr¨¢n empezar otras obras porque se quitar¨¢n de encima ese stock. Si no arrancan obras, pinchar¨¢ la econom¨ªa.

P. ?Est¨¢ ya pactado el precio concertado catal¨¢n?

R. La Generalitat ha hecho una oferta y presentaremos alegaciones. Quiero un acuerdo para quitarnos de encima el stock. Pero no podemos quedarnos cortos en los precios. Si no, las medidas no servir¨ªan de nada.

P. ?Son demasiado bajos?

R. No contemplan los costes reales de suelo y construcci¨®n.

P. ?Qu¨¦ proponen?

R. Estamos negociando. En todo caso, son bajos. Pero aunque los promotores ajusten al m¨¢ximo el precio de venta, si la banca no da financiaci¨®n para esos pisos, estaremos igual.

P. De sus palabras se desprende que la banca tiene en su mano la salida a la crisis.

R. Entiendo que la banca piense que tiempo atr¨¢s obr¨® en ligereza y que ahora tiene que pedir m¨¢s garant¨ªas. Pero tenemos que fijar reglas de juego realistas.

P. ?Cu¨¢nto durar¨¢ la crisis?

R. Me defino como un pesimista optimista. No puede durar m¨¢s de entre 18 y 24 meses, pero depender¨¢ de que se adopten medidas con rapidez y sobre todo de que la gente sepa que la vivienda nueva no podr¨¢ sufrir grandes bajadas. Es imposible, y me refiero a m¨¢s del 20%, el 30% o el 40%. Es inviable.

P. ?Pero hay que hacer m¨¢s pisos?

R. S¨ª, por la inmigraci¨®n.

P. ?Y los inmigrantes llegan a los precios de mercado?

R. No todo tiene que ser compra. Hay que potenciar el alquiler. Hay j¨®venes que se quieren emancipar, mayores, separados... Hay demanda, pero entre todos la hemos hecho insolvente.

P. ?Veremos m¨¢s procesos concursales?

R. Todo reajuste supone que el no profesional tiende a desaparecer. Se sanear¨¢ el mercado y quedar¨¢n los solventes.

P. Algunos con mucha experiencia tambi¨¦n han sufrido.

R. Eso depende del riesgo que cada uno haya querido correr con su empresa. Hay empresas que cre¨ªan poderse expandirse m¨¢s r¨¢pido o correr m¨¢s.

P. ?Se pueden dar fusiones?

R. Ser¨ªa l¨®gico. Nos ha costado mucho, porque aqu¨ª todo el mundo ha querido ser cabeza de rat¨®n y no cola de le¨®n. Quiz¨¢ ha llegado el momento de fusiones y de hacer empresas importantes. Ser¨ªa una soluci¨®n.

P. Asistimos a procesos concursales de inmobiliarias en cadena. ?La base del peligro es real o los constructores y bancos acreedores pierden la paciencia?

R. Todo el mundo est¨¢ muy nervioso. Cualquiera que tenga responsabilidades con el pa¨ªs tiene que explicar c¨®mo est¨¢ la econom¨ªa. Y atajar la rumorolog¨ªa, que genera intranquilidad. Las cosas no est¨¢n ni tan bien ni tan mal. Seamos realistas.