El problema no es la toxicidad aguda
Al valorar si la reacci¨®n inicial del Ministerio de Sanidad y Consumo en la crisis provocada por la pasta de aceite de girasol procedente de Ucrania ha sido ¨¢gil, valiente y acertada o precipitada, temeraria y exagerada, diversos sectores han comentado: es una contradicci¨®n recomendar que no se consuma aceite de girasol y al tiempo descartar que exista amenaza de intoxicaci¨®n aguda. La cr¨ªtica tiene su l¨®gica, pero, ?tiene raz¨®n? El problema de esa cr¨ªtica es que soslaya la ¨²ltima palabra, "aguda".
En efecto, tras haber escuchado tantas otras veces el poco cre¨ªble "no hay ning¨²n riesgo para la salud", la principal e importante novedad que existe en la reacci¨®n del ministerio es la palabra "aguda". El ministro Bernat Soria declar¨® el 26 de abril: "Sabemos que la concentraci¨®n de hidrocarburos alif¨¢ticos detectados en el aceite es tan baja que no hay riesgo de toxicidad aguda". Una l¨®gica muy sencilla dice que si se descarta la intoxicaci¨®n aguda o inmediata no se descarta la otra gran forma de intoxicaci¨®n, la cr¨®nica. En esta l¨ªnea, el presidente de la Agencia Espa?ola de Seguridad Alimentaria y Nutrici¨®n (Aesan), F¨¦lix Lobo, afirm¨® que lo que pretend¨ªa "esa medida de protecci¨®n es cortar cualquier convivencia con una toxicidad cr¨®nica". La cuesti¨®n es si el prop¨®sito se llevar¨¢ a la pr¨¢ctica.
Lo que m¨¢s nos preocupa a los especialistas en estos casos son los efectos nocivos a largo plazo de la exposici¨®n constante a t¨®xicos, a dosis o concentraciones generalmente bajas. Disueltos en bastantes de los alimentos grasos que consumimos suele haber contaminantes (hidrocarburos, compuestos organoclorados y organobromados, metales pesados y otros). La mayor¨ªa de sus efectos perjudiciales se manifiestan a largo plazo y s¨®lo si nos vamos contaminando por otros productos nocivos (por ejemplo, los del tabaco o la poluci¨®n urbana). Es probable que algunas de tales mezclas que acumulamos a lo largo de la vida contribuyan a causar una parte importante de las enfermedades cr¨®nicas y degenerativas que m¨¢s afligen a nuestras sociedades. El marco general que explicar¨ªa estos hechos es: los agentes qu¨ªmicos ambientales presentes en los alimentos y en otros medios favorecen, mediante diversos mecanismos genot¨®xicos (da?inos para el ADN), la acumulaci¨®n de alteraciones gen¨¦ticas y epigen¨¦ticas. Por tanto, lo primero que un ciudadano har¨¢ al valorar la respuesta a una crisis como ¨¦sta ser¨¢ pensar en los efectos a largo plazo de lo que ahora hagamos o dejemos de hacer con la pasta de aceite de girasol importada de Ucrania. ?Puede tener efectos a corto plazo? Las autoridades afirman que no; esperemos que pronto puedan aportar datos que lo demuestren de forma cre¨ªble. ?Puede un episodio aislado y ¨²nico tener efectos a largo plazo? Claro que no. ?Es la actitud y la respuesta ante un episodio como el actual importante? Lo es s¨®lo si estos hechos pueden ocurrir con cierta frecuencia ?Es esa una posibilidad real? Sin duda, con cierta frecuencia ocurren episodios de contaminaci¨®n alimentaria por t¨®xicos que s¨®lo dejan rastro en sofisticadas m¨¢quinas de an¨¢lisis qu¨ªmico.
Es l¨ªcito pensar que "ojos que no ven, coraz¨®n que no siente", o ser de los que "prefiere no saberlo"; no son actitudes completamente irracionales, aunque me parecen retr¨®gradas y poco constructivas. Favorecen que las empresas y las autoridades "miren hacia otro lado", escondan la cabeza bajo el ala, o consideren que crisis como lo que se est¨¢ viviendo no merecen mayor firmeza. Minusvalorar las consecuencias de una respuesta m¨¢s firme o m¨¢s tibia favorece tambi¨¦n que los ciudadanos seamos menos responsables en nuestros h¨¢bitos.
En resumen, que no haya riesgo de intoxicaci¨®n aguda no justifica en absoluto la tibieza ante crisis como la actual. Y finalmente, la cuesti¨®n clave es: ?la respuesta del Ministerio es el resultado de un compromiso pol¨ªtico a largo plazo en seguridad alimentaria? S¨®lo esa coherencia justificar¨ªa la reacci¨®n que ha tenido.
Miquel Porta es investigador del Instituto Municipal de Investigaci¨®n M¨¦dica de Barcelona y catedr¨¢tico de Salud P¨²blica en la Facultad de Medicina de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona.
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