La investigaci¨®n del Guggenheim coincide con lo que confes¨® Cearsolo

Las investigaciones internas abiertas por el Guggenheim tras detectar irregularidades en las cuentas coinciden hasta ahora con los datos facilitados en la carta de autoinculpaci¨®n del ex director financiero del museo, Roberto Cearsolo.

La revisi¨®n de las cuentas ha llegado ya hasta el ejercicio de 2002 y est¨¢ previsto que finalice en el plazo de un mes.

La revisi¨®n de las cuentas ha llegado hasta el ejercicio de 2002

Cearsolo utiliz¨® una clave distinta a la autorizada para operar por Internet

En su comparecencia del pasado 23 de abril, la diputada vizca¨ªna de Cultura, Josune Ariztondo, ya inform¨® de la emisi¨®n fraudulenta en 2004 de cinco cheques contra la cuenta de la Tenedora por 25.585 euros y una transferencia por importe de m¨¢s de 28.477 euros, que se sumaron a las transferencias por m¨¢s de 193.000 euros ordenadas en 2005. La Inmobiliaria est¨¢ limpia en 2002, 2003 y 2004, a falta de recibirse informaci¨®n complementaria de los bancos, y tambi¨¦n la Tenedora en 2002 y 2003. El director general del Guggenheim, Juan Ignacio Vidarte, indic¨® que las disposiciones de fondos fraudulentas no fueron contabilizadas o se registraron como gastos ficticios.

Vidarte explic¨® ayer que las transferencias telem¨¢ticas realizadas por Cearsolo fueron realizadas con una clave distinta a la del director general, la ¨²nica que deb¨ªa tener acceso a las cuentas en su condici¨®n de apoderado ¨²nico. Vidarte explic¨® que est¨¢n investigando la utilizaci¨®n de la clave.

El director general y Josune Aristondo se enfrentaron a una larga sesi¨®n en las Juntas Generales de Vizcaya, en la que se esforzaron por convencer a los grupos de la oposici¨®n de que no ha habido en las cuentas del Guggenheim mayor agujero que el confesado por Cearsolo y disipar su temor de que tras su confesi¨®n se escondan irregularidades m¨¢s graves. "Las sombras de sospecha sobre todo el museo me parecen injustas e irresponsables", se?al¨® Vidarte.

Respecto a la auditoria de 2007 de la Sociedad Tenedora, la primera que se realiza desde 1998, Vidarte explic¨® que se procedi¨® a registrar como p¨¦rdidas de ejercicios anteriores las diferencias negativas (3,6 millones) acumuladas por la operaci¨®n de compra de d¨®lares a un precio pactado de antemano. El criterio mantenido hasta entonces por el Guggenheim, contabilizar las p¨¦rdidas por el tipo de cambio como mayor valor del inmovilizado (las obras de arte), fue corregido por el auditor. Finalmente, s¨®lo acept¨® que fueran a?adido como mayor valor de las obras las p¨¦rdidas por devaluaci¨®n del d¨®lar registradas desde que se firm¨® el contrato para la compra. Sin embargo, Vidarte defendi¨® que la auditoria apoya el criterio del Guggenheim y aminor¨® el impacto de las p¨¦rdidas sumando los ingresos financieros.

Respecto a la provisi¨®n de 1,6 millones de euros que recoge la auditor¨ªa "por la evoluci¨®n del tipo de cambio", Vidarte se?al¨® que se deben a que tres obras -una instalaci¨®n de Beuys y dos pinturas de Saura- no se han revalorizado lo suficiente desde su compra como para compensar la devaluaci¨®n del d¨®lar frente al euro que se ha registrado desde entonces. A?adi¨® que el pago del ¨²ltimo plazo pendiente de la adquisici¨®n de Nueve discursos sobre C¨®modo, de Cy Twombly, 5,4 millones de euros, fue abonado el 1 de abril tras recibirse las aportaciones de las instituciones correspondientes a 2008. El director general no hizo referencia al car¨¢cter finalista de esas cantidades, que deben ser destinadas a la adquisici¨®n de nuevas obras, no a cubrir deudas pendientes.