"Nos dejamos llevar por la ansiedad"
Tanto si el Zaragoza se clasifica para la Copa de la UEFA en el ¨²ltimo resuello del curso pasado como si la pierde de vista en la primera ronda del actual y se relevan cuatro t¨¦cnicos porque se pelea con denuedo contra el descenso hay algo que no cambia en La Romareda. Diego Milito (Buenos Aires, Argentina; 1979) enchufa todo lo que toca -suma 15 goles en la Liga y es el pichichi del equipo- y los aficionados le responden al grito de "?Diegol, Diegol!". El delantero, agradecido, sonr¨ªe. Pero le falta ganar, luchar por algo grande. El Zaragoza, que vive ahogado y con la amenaza del descenso a sus espaldas, se bate hoy con el Madrid, ya campe¨®n. Diegol tiene la palabra.
Pregunta. ?C¨®mo se ha alcanzado esta situaci¨®n?
"El vestuario est¨¢ sensible, con ganas de que no ocurra nada m¨¢s y acabar a salvo"
Respuesta. No lo s¨¦. Era inimaginable dada la calidad de la plantilla y la buena temporada pasada. Pero, a la que nos dimos cuenta, ya est¨¢bamos ah¨ª abajo, peleando por mantener la categor¨ªa. Ahora no nos queda otra que ganar y ser un equipo. El problema es que delante estar¨¢ el Madrid, el campe¨®n. Pero as¨ª es el calendario y no hay otro remedio.
P. ?C¨®mo soporta el vestuario la transici¨®n de cuatro t¨¦cnicos en un solo curso?
R. Es algo que afecta. A uno le destituyeron; otro
se fue por problemas personales, y el tercero [Jabo Irureta] perdi¨® la fuerza. Y nosotros seguimos. Creo que el vestuario est¨¢ sensible, con ganas de que no ocurra nada m¨¢s y con el objetivo de concluir el curso a salvo.
P. ?Qu¨¦ les aporta Manolo Villanova?
R. Solidez. Hemos perdido la confianza porque nos dejamos llevar un poco por la ansiedad. Y, aunque no estamos muy acostumbrados porque nuestro juego se define por lo combinativo, tambi¨¦n nos ha insistido en el juego directo. Mis funciones, en cualquier caso, son las mismas de siempre.
P. ?Marcar goles?
R. Claro. Pero no s¨®lo eso. Mi estilo pasa por ser un delantero que no vive en el ¨¢rea, que se mueve y que con ello genera espacios y oportunidades. Soy muy autoexigente y no me conformo s¨®lo con marcar.
P. Pero eso se le da muy bien, ?no?
R. No me quejo. El problema es que este curso no me sirven de nada los goles.
P. En ocasiones se le ha visto criticar a Oliveira porque no le pasaba la pelota. ?No se entienden?
R. No hay ning¨²n problema entre nosotros. Al contrario, tenemos muy buena sinton¨ªa. Pero, al principio, nos cost¨® acoplarnos porque somos de caracter¨ªsticas distintas. Nos agarramos alg¨²n enfado que otro. Pero es un delantero extraordinario y espero que nuestra presencia genere algo de miedo en las defensas rivales porque nos complementamos muy bien. El problema es que nos faltan jugadores de banda. Es una de las carencias que tenemos. Echo de menos un jugador espec¨ªfico de banda, unos centros para rematar. Pero eso s¨®lo es un recurso y tambi¨¦n hemos hecho goles de otra forma.
P. Precisamente, los cuatro t¨¦cnicos defienden que el equipo marca tantos goles como recibe.
R. El plantel es muy ofensivo y es complicado atacar con tanta gente y no desprotegerte. Hay que encontrar una solidez defensiva. Pero eso es tarea de todos porque cuando marcamos un gol es gracias a los pases que vienen desde atr¨¢s. Pues cuando lo recibimos, el bal¨®n sale del ¨¢rea contraria.
P. Les queda poco tiempo y toca el Madrid...
R. Para ganarle tendremos que hacer un partido perfecto. Correr mucho y no fallar las ocasiones. M¨¢s que nada, porque ha sido el mejor de la Liga. Mejor que el Bar?a. Creo que la diferencia entre ambos conjuntos fue la contundencia. Mientras el Madrid gan¨® f¨¢cil y defini¨® arriba, el Bar?a sufri¨® para cerrar los partidos. Y en el f¨²tbol hay que ser efectivo. Cuando no concretas, lo pagas. El mejor ejemplo es el nuestro en el Bernab¨¦u, donde dominamos, pero no supimos remachar el encuentro. Ahora tenemos otra oportunidad. La pen¨²ltima.
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