'Agur Jaunak' para un guardia civil asesinado

La viuda de Juan Manuel Pi?uel viajaba ya hacia el aeropuerto de Vitoria llev¨¢ndose consigo el f¨¦retro de su marido. La ciudad que dejaba a sus espaldas acog¨ªa a esa misma hora un gesto hist¨®rico, cargado de un significado muy profundo en Euskadi: el Parlamento vasco le rend¨ªa un homenaje nunca antes ofrecido a ninguno de los otros 88 agentes de la Guardia Civil asesinados en Euskadi por ETA desde que el 30 de abril de 1980 se constituyese la C¨¢mara.

La Guardia Civil y la Ertzaintza hicieron una ofrenda floral conjunta

Los socialistas prepararon con Bilbao todos los detalles del acto

Tampoco los dem¨¢s 119 agentes del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa y la Ertzaintza y militares a los que la banda terrorista ha matado en el Pa¨ªs Vasco en los 29 a?os de autonom¨ªa han recibido ese reconocimiento que ayer se expres¨® por primera vez. Ocurri¨® ante la escultura de Crsitina Iglesias instalada en recuerdo de todas las v¨ªctimas del terrorismo hace un mes en la entrada principal de la C¨¢mara. Sobre ella se coloc¨® ayer la fotograf¨ªa de Manuel Pi?uel, vestido de uniforme.

S¨®lo la solemnidad del Agur Jaunak, la melod¨ªa tradicional con la que se rinden en Euskadi honores de saludo y despedida, rompi¨® el silencio. Antes, en otro gesto cargado de significado, este para subrayar la solidaridad y la unidad policial frente a ETA, un guardia civil y un ertzaina hab¨ªan depositado juntos una corona de flores a los pies de la fotograf¨ªa del guardia asesinado el mi¨¦rcoles en Legutiano. Los agentes de ambos cuerpos no formaron frente a frente, sino intercalados, del mismo modo en que hab¨ªan velado hasta la hora del funeral, celebrado en la Catedral Nueva de Vitoria, el f¨¦retro en la Subdelegaci¨®n del Gobierno, en este caso junto a miembros del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa y la Guardia Urbana.

Del hist¨®rico acto fueron testigos la vicepresidenta Mar¨ªa Teresa Fern¨¢ndez de la Vega, el presidente del Senado, Javier Rojo; los ministros de Defensa, Carmen Chac¨®n, e Interior, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, el lehendakari Ibarretxe y la presidenta del Parlamento, Izaskun Bilbao, junto a otras autoridades y el conjunto de los grupos parlamentarios, salvo EHAK. A ellos se sumaron los m¨¢ximos responsables operativos de la Guardia Civil, el teniente general Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa Varela, y la polic¨ªa, Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Chico.

El acto se prolong¨® dentro de la sede parlamentaria, con la lectura solemne de la declaraci¨®n en la que la C¨¢mara compromete su "voluntad firme de mantener la unidad de todas las fuerzas democr¨¢ticas hasta poner fin al terrorismo" y de "hacer frente sin ceder a quienes quieren imponer a este pueblo un proyecto totalitario".

La presidenta gui¨® despu¨¦s a las autoridades, salvo el lehendakari, quien se despidi¨® antes, en su recorrido por la exposici¨®n dedicada a las v¨ªctimas que la C¨¢mara tiene abierta al p¨²blico hasta el 20 de junio en su vest¨ªbulo y en los pasillos que rodean el hemiciclo. Todav¨ªa formaban corrillos cuando la parlamentaria de EHAK Itziar Basterrika cruz¨® el lugar sin detenerse, camino de las oficinas de su grupo.

"Este acto hubiera sido impensable hace unos a?os", reflexionaba en voz alta la vicepresidenta de la Mesa, la socialista Isabel Cela¨¢, de cuyo grupo parti¨® la iniciativa. Cela¨¢ prepar¨® con Bilbao todos esos medidos detalles en la reuni¨®n que el ¨®rgano de gobierno de la C¨¢mara celebr¨® pocas horas despu¨¦s del asesinato de Pi?uel para redactar su declaraci¨®n de condena.

La presidenta de la C¨¢mara realiz¨® durante la tarde del mi¨¦rcoles y hasta primera hora de la ma?ana de ayer las gestiones precisar para lograr que los representante del Gobierno central que ten¨ªan previsto asistir al funeral se sumasen al acto preparado por la C¨¢mara.

Cuando la Mesa del Parlamento, formada en la puerta, desped¨ªa a los ¨²ltimos rezagados, el nombre de Pi?uel discurr¨ªa desde hac¨ªa rato por las bandas electr¨®nicas luminosas que, como parte de la exposici¨®n V¨ªctimas, presiden el vest¨ªbulo del Legislativo. Hasta ayer conten¨ªan los de las otras 823 v¨ªctimas de ETA. Hoy y ma?ana, ser¨¢ el suyo el ¨²nico que proyecten. Su viuda volaba ya en el avi¨®n que les devolv¨ªa a su casa.