Marlaska pasa al Supremo la decisi¨®n de imputar a Trillo por el Yak-42

El juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska pas¨® ayer al Tribunal Supremo la "patata caliente" de decidir si imputa al ex ministro de Defensa Federico Trillo-Figueroa por el caso Yak-42. Y lo hizo no s¨®lo en t¨¦rminos heterodoxos, sino tambi¨¦n perentorios, con la advertencia de que el pr¨®ximo d¨ªa 26 se cumplen cinco a?os del accidente en el que perdieron la vida 62 militares espa?oles y podr¨ªan prescribir los posibles delitos.

Lo normal es que el juez hubiera elevado una "exposici¨®n razonada", en la que detallara los indicios contra el actual diputado del PP. En lugar de eso, se limit¨® a trasladar al presidente de la Sala de lo Penal del Supremo, Juan Saavedra, el escrito de las familias de las v¨ªctimas en el que se ped¨ªa la imputaci¨®n del ex ministro. Marlaska no se pronuncia sobre la responsabilidad de Trillo, con el argumento de que corresponde al Supremo "analizar la razonabilidad de la imputaci¨®n".

Cinco imputados

En otro auto dictado el martes, el juez imput¨® por un presunto delito de homicidio imprudente al jefe del Estado Mayor de la Defensa cuando se produjo el siniestro, el almirante general Antonio Moreno Barber¨¢, y a otros cuatro mandos militares.

Impl¨ªcitamente, el juez deneg¨® todas las dem¨¢s imputaciones solicitadas, incluida la de Trillo. La asociaci¨®n de familiares anunci¨® incluso que recurrir¨ªa ante la Sala de lo Penal de la Audiencia la negativa a imputar a Trillo.

Por eso sorprendi¨® m¨¢s el nuevo auto de ayer. Fuentes jur¨ªdicas explicaron que el prop¨®sito del juez no puede ser otro que el de salvar su responsabilidad si alg¨²n tribunal llegara a determinar que Trillo delinqui¨®, pero no es posible condenarle por haber prescrito ya el delito.

El hecho de que las primeras imputaciones se hayan producido casi cinco a?os despu¨¦s del suceso se ha debido a que tanto Marlaska como su antecesora en el juzgado, Teresa Palacios, archivaron la investigaci¨®n y fueron obligados a reabrirla por la Sala de lo Penal. El archivo de Marlaska supuso paralizar el caso durante ocho meses.

Trillo reaccion¨® ayer con nerviosismo y calific¨® de "indeseable" al presidente del Congreso, Jos¨¦ Bono, aunque no lleg¨® a citarlo. En los pasillos del Congreso, dijo tener "toda la tranquilidad de conciencia jur¨ªdica".