"Muri¨® como su admirado Boukreev"
Simone Moro ha perdido ya a dos grandes amigos en la cima m¨¢s peligrosa del mundo
Curiosamente, el Annapurna, la monta?a m¨¢s temida del Himalaya, la llamada Monta?a Maldita, fue la primera en ser hollada, en 1950 por una expedici¨®n francesa. Desde entonces, sin embargo, el Annapurna provoca un respeto asombroso y se ha convertido en la cima con mayor porcentaje de peligrosidad de todo el himalayismo. Seg¨²n datos de 2004, el Annapurna ten¨ªa un coeficiente de peligrosidad del 40,2% con 55 muertes en 137 ascensiones. Los datos se han incrementado, pero el coeficiente se mantiene. El Annapurna, el Nanga Parbat y el K2 son los tres gigantes m¨¢s temidos, por distintas razones, entre los alpinistas. No es extra?o que de los 14 ochomiles del planeta, el Annapurna sea el menos escalado. Casi todos los ochomilistas lo dejan para el final. Reservan fuerzas para lo que saben que ser¨¢ una aventura compleja.
Un alpinista suizo, de 45 a?os, falleci¨® tambi¨¦n ayer al descender del Everest
El italiano Simone Moro, uno de los referentes mundiales del alpinismo, vivi¨® ayer por segunda vez una tragedia en el Annapurna. "Ha sido una p¨¦rdida enorme", dice refiri¨¦ndose al fallecimiento de I?aki Ochoa de Olza, su buen amigo; "Una p¨¦rdida enorme en lo personal y en cuanto al himalayismo". "I?aki", recordaba ayer, "admiraba a Anatoly Boukreev, un alpinista ruso que muri¨® en una expedici¨®n conmigo en esta monta?a. Ahora ha muerto como ¨¦l". Fue su segundo golpe. Moro y Ochoa de Olza compartieron expedici¨®n en Pakist¨¢n y ayer a¨²n no se explicaba el fatal desenlace que ha dejado al monta?ero navarro para siempre en el Annapurna.
Los hermanos Eneko e Iker Pou se enteraron del fatal desenlace en el Yosemite estadounidense. "Estamos hundidos y lo ¨²nico que podemos decir es que hay que agradecer a todas las personas que han colaborado en el intento de rescate de I?aki. Ciertamente, era muy complicado, pero han hecho un esfuerzo sobrehumano", afirma Eneko Pou.
Para Juanjo San Sebasti¨¢n, que ya sufri¨® la congelaci¨®n (y posterior amputaci¨®n) de varias falanges de las manos en el K2 en 1986, "el rescate era muy complicado en esas circunstancias": "Aun as¨ª, confiaba en que I?aki resistiera y se pudiera consumar con ¨¦xito tal esfuerzo humano por todas las partes".
Koldo Aldaz, amigo y compa?ero en dos expediciones (Everest y Kangchenjunga) de Ochoa de Olza, destac¨® su pasi¨®n por la monta?a: "Viv¨ªa en la monta?a y su vida era esa". Aldaz ha a?adido que "fuera de la monta?a viv¨ªa poco" y cuando se encontraban "casi siempre" hablaban de la monta?a. "Como monta?ero era magn¨ªfico; como persona, muy bueno, y como amigo, entra?able y cercano", ha comentado Aldaz, quien recuerda que cuando recibi¨® la noticia del fallecimiento de Ochoa de Olza se qued¨® "hecho polvo".
No pudo ser. La Monta?a Maldita se cobr¨® una nueva v¨ªctima. Y no fue la ¨²nica. Ayer, un alpinista suizo de 45 a?os muri¨® durante el descenso desde la cima del Everest y se convirti¨® en la primera v¨ªctima mortal de esta temporada en el pico m¨¢s alto del mundo.
"Muri¨® mientras regresaba despu¨¦s de alcanzar la cumbre de la monta?a el jueves, pero todav¨ªa desconocemos los detalles", dijo Pralahd Chapagain, de la agencia Iceland Trekking, organizadora de la expedici¨®n. El equipo estaba compuesto por otros seis monta?eros suizos que tambi¨¦n lograron coronar el m¨ªtico ochomil del Himalaya nepal¨ª. La v¨ªctima, que ha sido identificada como Goltz Uwe Micha Johannes, alcanz¨® la cima el jueves junto a otras 70 personas, seg¨²n las cifras gubernamentales. Otras fuentes aseguran que hasta 77 personas coronaron el Everest ese mismo d¨ªa, lo que podr¨ªa significar el r¨¦cord de ascensos en un solo d¨ªa.
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