El mejor retrato del retrato
Aunque existieron precedentes hist¨®ricos, es evidente que el g¨¦nero del retrato es de creaci¨®n moderna y tiene como fechas determinantes los siglos XV y XVI, algo que subraya la exposici¨®n del Museo del Prado, cuyo t¨ªtulo, excesivamente vago, no hace justicia -o s¨®lo desde el punto de vista publicitario- al talento y la importancia de la iniciativa. La primera gran aportaci¨®n de esta formidable muestra es, por tanto, no defender la tesis de que el retrato individualizado se gener¨® en el siglo XV, sino demostrar sus formas de individualizaci¨®n y, sobre todo, que el cat¨¢logo creado al respecto no consigui¨® ampliarse tras el XVI. Por supuesto, ya que afronta la compleja tipolog¨ªa fraguada en un relativamente escaso, pero intenso, lapso temporal, tambi¨¦n nos proporciona una extraordinaria casu¨ªstica jam¨¢s abordada por ninguna otra exposici¨®n del retrato.
En este sentido, se puede afirmar que nos encontramos con una exposici¨®n ¨²nica y, por consiguiente, la mejor, o, si se quiere, la m¨¢s interesante de las hasta ahora ensayadas. Es tan relevante el enriquecimiento conceptual que, por una vez, cabe, si eso fuera posible, postergar la n¨®mina abrumadora de las obras maestras acopiadas. El inteligente acuerdo con la National Gallery de Londres, cuyos fondos son muy complementarios con los del Prado, redondea el resultado. Sea como sea, no hay duda de que, con esta nueva iniciativa, el Museo del Prado, esta vez siguiendo el certero criterio de Miguel Falomir, conservador jefe de pintura italiana y comisario de la exposici¨®n, ha vuelto a situarse a la cabeza de los museos hist¨®ricos del mundo.
Algo hay que decir sobre los grandes maestros que se exhiben en esta exposici¨®n, entre los cuales la presencia de Piero della Francesca, Sandro Botticelli, Tiziano, Lotto, Durero, Holbein, Jan van Eyck, Moroni, el maravilloso despliegue de esculturas de los Leoni, Rafael, etc¨¦tera, m¨¢s algunas aportaciones que enlazan la proyecci¨®n de estos artistas con el siglo XVII, es s¨®lo un mero ¨ªndice resumido de las 130 obras que est¨¢n reunidas en esta muestra inolvidable. Por lo dem¨¢s, hay sugerencias de una gran novedad formal e iconogr¨¢fica, como, por poner un ejemplo, la notabil¨ªsima revelaci¨®n de la fuente del autorretrato de Tiziano inspirado en lo que se consideraba legendariamente la imagen conservada del fil¨®sofo Arist¨®teles. Ha sido muy certero, por otra parte, explicar los modelos de retrato a trav¨¦s de su muy variada funci¨®n social, lo cual permite introducirnos en los mecanismos de lo que constitu¨ªa la vida cotidiana, algunos de cuyos rasgos perviven en la actualidad.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.