Calder¨®n de la Barca une La Habana y Miami

Que el teatro de Calder¨®n de la Barca sirva para unir a Espa?a y Cuba es algo curioso, aunque hasta cierto punto 'normal'. Pero que la obra-puente sea el auto sacramental La Divina Filotea, escrito por Calder¨®n el a?o de su muerte (1681), y que de La Habana el espect¨¢culo viaje a Miami, contribuyendo tambi¨¦n a tejer v¨ªnculos entre cubanos donde quiera est¨¦n, ya es algo m¨¢s especial. La Compa?¨ªa Espa?ola de Teatro de Pedro Mar¨ªa S¨¢nchez consigui¨® lo que parec¨ªa un sue?o demasiado arriesgado: las tres funciones que ofreci¨® en La Habana, con la Camerata Romeu interpretando m¨²sica compuesta por Jos¨¦ de Nebra (1702-1768), fue un ¨¦xito rotundo de p¨²blico y cr¨ªticas.

Nadie recuerda cuanto tiempo hace que en Cuba fue interpretado el ¨²ltimo auto sacramental, ni siquiera Eusebio Leal, director de la Oficina del Historiador de la Ciudad, que junto con la Sociedad Estatal para la Acci¨®n Cultural Exterior de Espa?a (SEACEX) y la embajada espa?ola en Cuba posibilitaron las presentaciones, en el marco del festival La Huella de Espa?a. El Festival, que este a?o lleg¨® a su vig¨¦sima edici¨®n, convoc¨® a artistas espa?oles como Amancio Prada, que ofreci¨® un bell¨ªsimo concierto m¨¢s de una d¨¦cada despu¨¦s de su ¨²ltima presentaci¨®n en la isla, pero fue La Divina Filotea la perla del encuentro cultural hispano-cubano.

En la Bas¨ªlica Menor del Convento de San Francisco, el s¨¢bado, domingo y lunes pasados subieron a escena los 19 actores de la compa?¨ªa de Pedro Mar¨ªa S¨¢nchez, incluido ¨¦l mismo, en el papel del Demonio, y el actor cubano Vladimir Cruz, en el de la Lascivia. Los versos de Calder¨®n, en esta obra planteada como un combate dil¨¦ctico y filos¨®fico entre el alma y sus enemigos, que tratan de asaltar el castillo que la guarda, cobraron brillo cubano gracias al trabajo excepcional de la Camerata Romeu. Su directora, Zenaida Romeu, convirti¨® las partituras originales de Jos¨¦ de Nebra en uno de los grandes alicientes de esta puesta, y los aplausos a ella y a la compa?¨ªa teatral retumbaron en la bas¨ªlica, en la ciudad y hasta en Miami.

Para Miami va la obra en julio, donde se presentar¨¢ en el Festival Internacional de Teatro Hisp¨¢nico, y tambi¨¦n la exposici¨®n Cien a?os vistiendo a Calder¨®n, exhibida estos d¨ªas en La Habana, con un total de 40 trajes y diez figurines utilizados en el siglo pasado para la representaci¨®n de piezas teatrales de Calder¨®n de la Barca. El director del Museo Nacional del Teatro de Espa?a y comisario de la exposici¨®n, Andr¨¦s Pel¨¢ez, indic¨® que la muestra incluye dise?os de La cena del rey Baltasar realizados por V¨ªctor Mar¨ªa Cortezo (1940), la primera producci¨®n teatral espa?ola que viaj¨® a La Habana despu¨¦s de la guerra civil espa?ola, y que debut¨® en la isla dentro una gira por Iberoam¨¦rica. Entre los trajes de esa obra figuran los que utilizaron los actores Francisco Rabal y Mar¨ªa Asunci¨®n Balaguer para representar los personajes de Baltasar y La Idolatr¨ªa en 1953.

Dise?os para los personajes de el Rey Felipe y la Reina Mar¨ªa de Austria en la escenificaci¨®n de El laurel de Apolo realizados por Emilio Burgos, los de Bego?a del Valle para personaje de Estrella en La vida es sue?o, y los utilizados por la actriz Ana Bel¨¦n para el personaje de Semiramis en La hija del aire, en un montaje de 1981, integran la exposici¨®n. En un hecho cargado de simbolismo, gracias al divino Calder¨®n cubanos de adentro y de afuera podr¨¢n disfrutarla y tambi¨¦n asistir al tremendo combate del alma que describe La Divina Filotea. La pretensi¨®n, explica Pedro Mar¨ªa S¨¢nchez, es que la obra viaje despu¨¦s a diversos escenarios de Europa, Asia y Am¨¦rica. En cada lugar la m¨²sica de Jos¨¦ de Nebra ser¨¢ interpretada por m¨²sicos del pa¨ªs, como ocurri¨® en La Habana con la Camerata Romeu.