Violencia de g¨¦nero

S¨ª, hay hombres maltratados por sus esposas, hay conductores/as maltratados por otros/as conductores (que el tr¨¢fico pone de los nervios); hay ancianos/as maltratados por sus hijos e hijas, padres y madres maltratados por sus hijos/as adolescentes, hay vecinas que maltratan a sus vecinos y no digamos ya jefes que maltratan a sus empleados. ?sta es una sociedad violenta que no educa para resolver los conflictos pac¨ªficamente. Y todas esas agresiones est¨¢n castigadas por el C¨®digo Penal.

Y se podr¨¢ discutir si est¨¢n bastante penadas o hay que aumentar las penas, pero ¨¦sa es otra discusi¨®n. Pero toda violencia, por terrible que sea, no es violencia de g¨¦nero. Violencia de g¨¦nero es aquella violencia sist¨¦mica del patriarcado que permite que los hombres se sientan legitimados para ejercerla contra las mujeres. Los hombres que agreden a las mujeres con las que tienen una relaci¨®n tienen la convicci¨®n, una convicci¨®n basada en mecanismos materiales, pero tambi¨¦n simb¨®licos, de que el sistema les legitima para hacerlo. Y, al mismo tiempo, ese mismo sistema les hace creer a ellas que son culpables de atraer sobre s¨ª el castigo.

Es una violencia estructural reforzada por mecanismos dif¨ªciles de desmontar, que llevan siglos con nosotras/os y que est¨¢n ah¨ª para sostener la dominaci¨®n de los hombres sobre las mujeres. Si una mujer no entiende la diferencia entre la violencia de g¨¦nero y cualquier otro tipo de violencia, desde luego no puede llamarse feminista porque no entiende lo b¨¢sico. No entiende nada.