El abrazo de Innsbruck
La celebraci¨®n de los jugadores tras el gol de Villa a Suecia pone de relieve la sensaci¨®n de unidad que transmite el grupo de Luis
El 19 de mayo de 2006, en el estadio Gottlieb-Daimler, de Stuttgart, Espa?a y T¨²nez se enfrentaron en el segundo partido del Mundial. Espa?a, que hab¨ªa goleado en el primero a Ucrania (4-1), perd¨ªa en el minuto 70 por 0-1. En el 71 empat¨® Ra¨²l, que, por inercia, lleg¨® hasta el bander¨ªn de una esquina, bes¨® su anillo, mir¨® al banquillo y sali¨® como una bala. Le recibi¨® Ca?izares y se abraz¨® a M¨ªchel Salgado. Los restantes suplentes lanzaron un par de palmaditas sobre el 7 que luc¨ªa a la espalda y alguna mano en la cabeza.
El s¨¢bado, Villa le dio la clasificaci¨®n a Espa?a en Innsbruck en el minuto 92, ante Suecia, y sali¨® como una flecha hacia el banquillo. Quien le recibi¨® fue Reina, que le estruj¨® fuerte con esos brazos que parece que no tienen fin. Desapareci¨® el 7 envuelto en un amasijo de cuerpos y hasta Luis se sorprendi¨® a s¨ª mismo festejando como no acostumbra: "Me emocion¨¦ al ver la reacci¨®n del banquillo. Reconozco que ha sido una reacci¨®n impropia de m¨ª". Se emocion¨® al comprobar que todo lo que se hablaba del grupo se convirti¨® en foto.
Ra¨²l, en Alemania, recibi¨® palmaditas. Villa fue sepultado por un amasijo de cuerpos
Palop: "?ste no es un grupo que pierda el tiempo en tonter¨ªas. No hay figuritas"
"S¨®lo he tratado de decirles que es b¨¢sico que se respeten unos y otros", afirma Luis
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Entre una y otra escena median dos a?os y un vestuario nuevo por mucho que hasta 13 jugadores repitan. Dice Luis que ser seleccionador no tiene nada que ver con ser entrenador de club y hasta reconoce que la experiencia de Alemania, en 2006, le ha hecho recapacitar en muchas cosas al plantearse la cita de la Eurocopa. Al respecto, Luis habla del plan de trabajo en p¨²blico: "La planificaci¨®n est¨¢ basada en microciclos de cuatro d¨ªas: recuperaci¨®n, descanso, trabajo y partido. De lo contrario, ser¨ªa insoportable".
Hace dos a?os se le hizo insoportable por otras razones que remiten al mal funcionamiento del colectivo. Luis tom¨® nota y obr¨® en consecuencia, aunque no detalla c¨®mo ha conseguido que sus jugadores piensen como grupo. "Lo que hay es buena gente", resume uno de los colaboradores de Luis, que bromea: "Futbolistas, pero buena gente".
Seg¨²n Casillas, capit¨¢n en su primera gran cita, "es m¨¦rito de Luis". "?l ha marcado el camino y ha conseguido un equipo que juega para ganar, que vive en un ambiente sensacional, que comparte... No lo dudes, lo que se ve en el campo es el reflejo del trabajo que se hace dentro", explica. "Luis me encanta. Es un hombre de c¨®digos que contagia. En este equipo nadie es m¨¢s que nadie. No hay nadie que sobresalga. Vamos todos a lo mismo", argumenta Xavi, uno de los veteranos, que detalla: "La mayor¨ªa del equipo llevamos mucho tiempo juntos, tenemos una edad parecida... Pero el primer culpable es el m¨ªster porque es justo y ha conseguido que todos nos sintamos importantes. Eso, en un equipo, es fundamental". "Somos un grupo de gente con muchas cosas en com¨²n y eso ayuda a la convivencia", asegura Torres, involuntario protagonista de una pol¨¦mica menor. "Que un jugador se enfade porque le cambian es normal. No afect¨® para nada el grupo", asume Navarro, uno de los nuevos. "Es un buen grupo. La sensaci¨®n que tienes cuando llegas es que hay buen rollo y que eres uno m¨¢s. Y eso es de agradecer", reconoce el lateral.
"?ste no es un grupo que pierda el tiempo en tonter¨ªas. Sabemos por qu¨¦ estamos aqu¨ª, sabemos qu¨¦ queremos y sabemos que s¨®lo hay un camino", alega Palop, uno de los ¨²ltimos en llegar, que destaca "la naturalidad" con la que se est¨¢ viviendo el campeonato. "No hay figuritas ni jugadores que se crean m¨¢s importantes. Los chavales empujan fuerte. Hay muy buen rollo", dice.
Con el equipo clasificado primero de grupo, Luis reiter¨® ayer su intenci¨®n de dar entrada contra Grecia a los jugadores que menos minutos han actuado o que no se han estrenado: "Hay algunos, como Silva, que han corrido todo y se merecen un descanso".
"Los resultados son otra raz¨®n del buen ambiente", esgrimen desde el cuerpo t¨¦cnico. Casi se pierde en la memoria la ¨²ltima derrota de la selecci¨®n, contra Rumania el 15 de noviembre de 2006. Desde entonces, 15 victorias y dos empates mantienen invicto a un equipo que ha crecido alrededor del entrenador en momentos complicados, como sucedi¨® con Javier Clemente en 1994 y 1996, pero que, a diferencia de aquel grupo, mantiene una relaci¨®n mucho m¨¢s distendida con el entorno. "Yo s¨®lo he tratado de influirles en algunos conceptos que considero b¨¢sicos, como el respeto que se deben tener unos a otros; que sepan, porque lo considero fundamental, que el compa?ero est¨¢ siempre a tu lado; que pueden contar los unos con los otros porque eso, entiendo, hace fuerte a un equipo", sostiene Luis, convencido de que los jugadores "lo han entendido y funcionan solos".
La ausencia de un l¨ªder -"el l¨ªder somos todos, el l¨ªder es el grupo", repite Puyol- puede influir en esa sensaci¨®n de que el equipo vive relajado. Los colaboradores de Luis destacan que el grupo tiene muchos recursos a la hora de lanzar mensajes, dentro y fuera, o activar mecanismos de defensa cuando suena una alarma de alerta. Uno de los veteranos en la selecci¨®n lo resumi¨® ayer con sencillez: "Hay muy buen ambiente porque se ha juntado muy buena gente".
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