"Trabajar aqu¨ª ahora da verg¨¹enza"

"Antes, trabajar en esta empresa era un orgullo. Ahora me da verg¨¹enza". As¨ª explicaba Tirso Nohales, un trabajador de Telemadrid y miembro del comit¨¦ de empresa, su malestar con los derroteros que est¨¢ tomando la cadena. Otros empleados, tambi¨¦n del comit¨¦, hablaban ayer en torno a una mesa sobre lo que significa trabajar en Radio Televisi¨®n Madrid desde hace cinco a?os. "Cuando salimos a la calle llevamos una cazadora de la cadena. Algunos han tapado el logotipo por el desprestigio que tiene la auton¨®mica", asegur¨® el t¨¦cnico de una unidad m¨®vil.

Seg¨²n los trabajadores, la ca¨ªda en picado de ese prestigio se debe al hooliganismo de sus contenidos, fundamentalmente en los informativos. "Es una tele para el sector radical del PP. Hasta los marianistas son criticados", coment¨® otro de los sindicalistas, ?ngel Garc¨ªa. Ninguno de ellos ten¨ªa problema en dar su nombre. Aseguran que ya est¨¢n en la lista negra de la empresa y que no pierden nada. Esa lista negra de gente que se ha quedado fuera de juego ha dividido a la redacci¨®n de informativos en dos. Unas 80 personas que no cuentan y a las que se les encarga poco trabajo y otras 60 contratadas en los ¨²ltimos a?os y que, seg¨²n algunos trabajadores, "escriben al dictado de la empresa".

Pero el asunto de la manipulaci¨®n en los informativos de Telemadrid no estaba ayer sobre la mesa, sino en los juzgados. El comit¨¦ ha denunciado que la empresa no haya puesto en marcha un consejo de redacci¨®n pactado en 2004 para controlar la objetividad de la informaci¨®n y la libertad de expresi¨®n de los periodistas.

Los tiros no iban por ah¨ª ayer, sino por la infrautilizaci¨®n que la empresa hace de los trabajadores. Lo que se cuestiona es el modelo de televisi¨®n p¨²blica de la direcci¨®n. "No hay programas propios, los estudios est¨¢n parados", explic¨® ayer otro de los sindicalistas. "Todo se hace fuera y eso no nos permite trabajar. Walker Texas Ranger, la serie de Chuck Norris. ?se es el modelo de Telemadrid".