Ensayo, poes¨ªa y activismo
Margaret Atwood, candidata al Premio Nobel de Literatura desde hace varios a?os, no es s¨®lo la personalidad literaria m¨¢s representativa de la literatura canadiense actual, sino una de los escritores m¨¢s sobresalientes de las narrativas occidentales de hoy d¨ªa. Sin embargo, pese a ser la novela el g¨¦nero literario que le ha otorgado reconocimiento y fama internacionales, no hay que olvidar que Margaret Atwood es tambi¨¦n ensayista y, sobre todo, poeta. De hecho, se inici¨® en la escritura en el campo de la poes¨ªa y desde la publicaci¨®n de Dou-ble Persephone (1961) hasta The door (2007), ha editado casi una veintena de poemarios por los que ha recibido varios y presti-giosos premios, y la consideraci¨®n de ser una de las mejores poetas actuales en lengua inglesa.
El lector aprecia sus estructuras narrativas de perfecci¨®n casi matem¨¢tica
Desde Double Persephone (1961) a The door (2007). Miembro de Amnist¨ªa Internacional, desde donde ha combatido activamente a favor de los derechos humanos y de la libertad de expresi¨®n (ideario muy presente en su libro de poemas True stories), luchadora incansable contra los atentados ecol¨®gicos que devastan el planeta (su novela Oryx y Crake es una denuncia de la impiedad de la ciencia y la tecnolog¨ªa contra la naturaleza y la especie humana), defensora de los derechos de la mujer (su Second words, en 1982, fue una de las primeras obras feministas publicadas en Canad¨¢), no hay cuesti¨®n pol¨ªtica, social, ¨¦tnica, econ¨®mica que suponga sometimiento de las clases m¨¢s desfavorecidas al poder que no lata en el fondo de su obra. Con todo, y eso es quiz¨¢ la caracter¨ªstica literaria m¨¢s sobresaliente de esta autora, la escritura es siempre la verdadera protagonista de su obra. Y esto es as¨ª, hasta el punto de que la escritura de la Margaret Atwood novelista o cuentista no tiene nada que ver con las construcciones verbales de la Atwood poeta, ni la prosa y versos de las Atwood narradora y poeta guardan relaci¨®n, desde el punto de vista esencialmente escritural, con la At-wood ensayista. Ella misma, en una entrevista realizada por la tambi¨¦n novelista y poeta Joy Carol Oates, publicada en The New York Times, insist¨ªa en la radical diferencia entre sus libros de poemas y sus novelas, y desafiaba a cr¨ªticos y lectores, empe?ados en establecer relaciones entre ambas, a identificarla como autora de sus poemas en caso de haberlos publicado con seud¨®nimo.
El Premio Pr¨ªncipe de Asturias recae, en esta ocasi¨®n, en una escritora cuyas novelas est¨¢n ya editadas en Espa?a, donde goza de un notable prestigio y de un n¨²mero de lectores adictos. Sus libros no alcanzan ventas espectaculares, pero el lector aprecia en sus p¨¢ginas la calidad de su prosa, su exquisita sensibilidad, su implacable iron¨ªa, su enorme talento para poner en pie personajes de carne y hueso, y su excelente capacidad para crear unas estructuras narrativas de perfecci¨®n casi matem¨¢tica.
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