Cartel de museo para Monforte

Los carteles de las fiestas patronales no suelen pasar a la historia del dise?o gr¨¢fico. Todav¨ªa no han recuperado aquel nivel del grafismo promocional y tur¨ªstico anterior a la Guerra Civil, y en general, no suelen ni superar el list¨®n del mero p¨®ster. Un caso aparte ha sido el de los festejos de este agosto en Monforte de Lemos.

Vecinos, transe¨²ntes y turistas se han visto convocados a disfrutar de las actuaciones de Los Tigres del Norte o de Los Secretos, de los fuegos de artificio y de las verbenas, de las dianas y de las alboradas, mediante una obra de Roberto Gonz¨¢lez, similar a las que atesoran fondos como los de Caixanova, la Fundaci¨®n Argentaria o la Forbes de Nueva York; el Museo de Belas Artes de A Coru?a, el Edinburgh City Art Center o el Museo Victoria & Albert de Londres.

Gonz¨¢lez incluye en su creaci¨®n el cartel que hizo su padre hace 50 a?os

"Me dijeron que no ten¨ªan mucho dinero y yo contest¨¦ que no iba a cobrar"

Al igual que esas instituciones, las puertas de los bares y los escaparates monfortinos lucieron -reproducida en imprenta, eso s¨ª-, una creaci¨®n de Gonz¨¢lez. Un pintor nacido en esa ciudad de Lugo en 1948, que desde sus estudios de Edimburgo o Madrid, en m¨¢s de cien exposiciones individuales y con un estilo marcado, mezcla de realismo formal y concepto po¨¦tico, se ha ido forjando un prestigio internacional.

Gonz¨¢lez ya hab¨ªa colaborado con el Ayuntamiento de Monforte, gobernado por el BNG, formando parte del jurado de una bienal de fotograf¨ªa. "All¨ª conoc¨ª a Alicia. Cuando me llamaron para el cartel y me empezaron a decir eso de que no ten¨ªan mucho dinero, yo contest¨¦ que no iba a cobrar algo que era para Monforte, para unas fiestas que son para todo el mundo", cuenta por tel¨¦fono desde Edimburgo Roberto Gonz¨¢lez, que tambi¨¦n ha realizad sin cobrar un mural de 10 metros que se instalar¨¢ en el Museo do Vi?o que tienen en marcha el Ayuntamiento.

El cartel de Roberto Gonz¨¢lez es un collage digital, en la l¨ªnea de sus ¨²ltimas creaciones, caracterizadas por el uso intensivo de las nuevas tecnolog¨ªas. Adem¨¢s de su autorretrato, marca de identidad desde hace tiempo, el cartel incluye elementos de otras obras. "Es un encargo, pero es una obra m¨ªa, igual que cuando haces un retrato", explica. "Los fuegos artificiales son en realidad las doce estrellas de la bandera de Europa, uno de los elementos con los que trabajo actualmente. De un cuadro en memoria de un amigo muerto, Enrique Bruno, tom¨¦ la silueta del convento de los Escolapios en el que ambos estudiamos", describe el autor una obra que, por cierto, todav¨ªa no ha visto impresa porque est¨¢ en Escocia desde junio. La podr¨¢ ver en diciembre -si disminuye el ritmo de peticiones de ejemplares que sufre la concejal¨ªa- en una exposici¨®n que realizar¨¢ en su ciudad natal titulada Mensaje en una botella.

De todas formas, el motivo central de la composici¨®n es un peque?o cartel, con un dise?o muy a?os 50. En efecto, fue el cartel anunciador de las fiestas de 1958, y lo hizo Rafael Gonz¨¢lez, padre de Roberto, y que a diferencia de su hijo, era industrial, y a semejanza suya, ten¨ªa especial sensibilidad para lo pl¨¢stico. "Dise?¨® un stand, el cat¨¢logo de sus productos... Yo recuerdo verle pintar ese cartel porque era lo primero que le ve¨ªa hacer con aguada, una t¨¦cnica que yo desconoc¨ªa, en lugar de con ¨®leo", recuerda el artista. El problema era que no ten¨ªa ninguna copia, hasta que una prima encontr¨® el programa de fiestas de aquel a?o que, "adem¨¢s del cartel como portada, ten¨ªa unos poemas en gallego de mi t¨ªa. Fue un amigo m¨ªo el que repar¨® en el hecho de que al cartel de mi padre y al m¨ªo los separaban 50 a?os justos", dice Gonz¨¢lez. "Por esas cosas que permite la tecnolog¨ªa", al pie del de 2008 figuran las firmas de los dos Gonz¨¢lez.

En realidad, Roberto Gonz¨¢lez no es el primer artista que realiza el cartel de las fiestas de Monforte. El del a?o pasado corri¨® a cargo de otro autor consagrado, Ant¨®n Pati?o, tambi¨¦n monfortino, que tampoco quiso cobrar un duro. Los dos originales son el germen de una colecci¨®n municipal. Quiz¨¢s el problema est¨¦ ahora en c¨®mo continuar la colecci¨®n, al menos con esos precios.