Pedalear r¨¢pido para no caerse

Los Juegos Ol¨ªmpicos se han terminado y, con ellos, un r¨¦cord que China preferir¨ªa olvidar: una tasa de inflaci¨®n anual que en febrero alcanzaba el 8,7%. La inflaci¨®n ca¨ªa en agosto a un m¨¢s tolerable 4,9%, frente al 6,3% de julio. Las subidas del precio de los alimentos, dr¨¢sticas a comienzos de este a?o, parecen haberse moderado. Eso abre una posibilidad para que el Gobierno chino aumente el precio de los combustibles mediante una reducci¨®n de las subvenciones.

Los precios de los combustibles en China los establece el Gobierno y, en la actualidad, est¨¢n subvencionados. Esto provoca tensiones en las finanzas de las empresas y las refiner¨ªas petrol¨ªferas. Sinopec, la mayor refiner¨ªa, perd¨ªa en el primer semestre del a?o casi 5.000 millones de euros, porque pagaba precios exorbitantes por el crudo y vend¨ªa el combustible por debajo del precio de coste. El Gobierno empez¨® a solucionar el problema permitiendo un aumento de los precios en julio. Ahora que los Juegos Ol¨ªmpicos han terminado y la inflaci¨®n es m¨¢s baja, podr¨ªan subirse m¨¢s.

Eso ser¨ªa bueno para los planes de expansi¨®n de las empresas petroleras nacionales. Pero ser¨ªa tambi¨¦n inflacionario, y otro elemento negativo para el crecimiento chino. La producci¨®n fabril del pa¨ªs se contrajo en julio y agosto. La reducci¨®n refleja tanto factores internos como internacionales: la inflaci¨®n se redujo en parte mediante la restricci¨®n del cr¨¦dito y las exportaciones no van tan bien.

En agosto, dichas exportaciones aumentaban un 21% respecto al a?o anterior, muy por debajo de la tasa media de crecimiento anual del 30% alcanzada los ¨²ltimos cinco a?os. La revalorizaci¨®n de la moneda es un obst¨¢culo. Hasta julio de este a?o se permiti¨® que el renminbi, que antes se manten¨ªa barato, se apreciase respecto al d¨®lar. El enorme excedente comercial de China y las reservas todav¨ªa en aumento indican que la moneda deber¨ªa apreciarse a¨²n m¨¢s, pero el Gobierno tal vez se resista a permitirlo. -