Lleg¨® la hora

Me he resistido hasta el ¨²ltimo momento pero ha llegado la hora de reunir mis ideas para este art¨ªculo. Digo que me he resistido ya que, lo reconozco, no se me ha ocurrido nada genial para este momento. Se dir¨ªa que este comienzo de Liga me ha llegado con sordina, amortiguado por un comienzo en dos partes, con selecci¨®n por medio, para hacer m¨¢s dif¨ªcil la tarea de explicar cu¨¢ndo despega la Liga, un comienzo que se ve ensombrecido por la llegada de la Champions y su himno que todo lo tapa. Vamos que la Liga me ha pillado desprevenido como aquellos disparos de media distancia a los que reaccionaba una d¨¦cima de segundo tarde sintiendo que mi estirada iba a ser tard¨ªa y s¨®lo quedaba soplar para que la pelota se fuera lejos de los tres palos. Claro que me puedo consolar viendo el arranque de los llamados grandes de nuestra Liga a los que parecer¨ªa que el pitido inicial les hubiera sorprendido en medio de la pretemporada, en medio de otros fregados, unos, los cul¨¦s, referidos a los ruidos en los despachos (tambi¨¦n en San Carles de la R¨¢pita hubo una buena raci¨®n de exabruptos), otros, los blancos, todav¨ªa pasando revista a los efectivos con los que afrontar la temporada, teniendo la sensaci¨®n de que falta alguno, algunos, sensaci¨®n tan apreciable que ya parece m¨¢s importante enero y sus regalos de Reyes en forma de refuerzos, que lo que hay por disputar hasta Navidades.

Me quedo con los partidos del Sporting y el Numancia, llenos de pasi¨®n, goles y f¨²tbol

Ya les dec¨ªa al comenzar la temporada que los aromas de los equipos grandes ten¨ªan el defecto de tapar todo lo que de diferente se pueda dar en otros campos, en otros vestuarios. Y para muestra me quedo con los partidos que nos han ofrecido este fin de semana dos reci¨¦n llegados a Primera. Sporting y Numancia nos han regalado 180 minutos de pasi¨®n, goles y f¨²tbol para todos aquellos que suelen pensar que el juego espectacular est¨¢ s¨®lo en las grandes n¨®minas. Preciado y Kresic nos han mostrado a sus equipos sin complejos, buscando la porter¨ªa contraria, record¨¢ndonos que a la tendencia de que en casa de los grandes s¨®lo vale defender bien y con orden, se le empiezan a sumar otras respuestas diferentes. Ya s¨¦ que habr¨¢ quien piense, entre ellos los porteros y, puede que hasta los mismos entrenadores de los dos equipos, que mejor menos goles pero m¨¢s rentables en puntos, casi como el Racing en el Camp Nou, que se llev¨® un punto con dos ocasiones.

Y aqu¨ª entrar¨ªamos en un debate interesante que se dividir¨ªa en dos posturas y una pregunta: ?Qu¨¦ es m¨¢s interesante para un equipo reci¨¦n ascendido, sumar puntos aunque sean pocos, de forma que se vayan descontando de esos 43 que se consideran necesarios para mantenerse o reforzar la l¨ªnea de la autoestima jugando de t¨² a t¨² a los principales actores de la competici¨®n de manera que desaparezcan los complejos en una competici¨®n de tanto relumbr¨®n?

Admitiendo mi adhesi¨®n al grupo de los que creen que sumar es siempre importante, les dir¨¦ que me admiran los que se resisten a pasar desapercibidos, me emocionan los que no se resignan a ser secundarios y defienden su protagonismo en los campos m¨¢s dif¨ªciles, me refuerzan en la creencia de que el f¨²tbol debe ser terreno para los intr¨¦pidos, aunque, a veces, la mayor parte de las veces, no tengan premio. Real como la vida misma.