Guido Antonini, de implicado a testigo clave contra Caracas

El nombre de Guido Alejandro Antonini Wilson no significaba nada para los venezolanos antes de que en agosto de 2007 fuera sorprendido en un aeropuerto de Buenos Aires intentando introducir ilegalmente casi 800.000 d¨®lares en efectivo en un malet¨ªn. En Venezuela rige un estricto control de cambio que impide a sus ciudadanos adquirir divisas libremente y gastar en viajes m¨¢s de 5.000 d¨®lares anuales. En Argentina, el pasajero debe declarar si lleva m¨¢s de 10.000 d¨®lares en efectivo.

El esc¨¢ndalo, bautizado valijagate, ocup¨® las primeras p¨¢ginas de los diarios argentinos y venezolanos y Antonini se hizo famoso. Poco acostumbrado a los flases, Antonini se refugi¨® en su casa de Miami a esperar que amainara el esc¨¢ndalo. Pero, poco a poco, los detalles de su vida comenzaron a revelarse: viajaba por negocios por toda Latinoam¨¦rica, es hijo de un pr¨®spero comerciante asentado en La Victoria, en el centro de Venezuela, y ha corrido varias carreras de coches exclusivas de la jet-set.

Antonini representa a la 'boliburgues¨ªa' que se enriqueci¨® con el chavismo

No era un multimillonario, pero viv¨ªa muy bien. Su casa, valorada en un mill¨®n de d¨®lares, est¨¢ en una de las ¨¢reas m¨¢s ricas de Florida. Pod¨ªa vivir as¨ª porque en los ¨²ltimos a?os hab¨ªa ganado mucho dinero. Fue, por ejemplo, intermediario en la compra por parte del Gobierno de Ch¨¢vez de la empresa uruguaya Umissa Kits de viviendas prefabricadas para paliar el d¨¦ficit habitacional de Venezuela.

Antonini supo aprovechar las oportunidades que otros escrupulosos empresarios dejaron pasar y jam¨¢s se le escuch¨® opinar sobre la gesti¨®n chavista. Su discreci¨®n le abri¨® muchas puertas y su fortuna se hizo m¨¢s abultada.

Antonini ha representado como nadie a los boliburgueses, un t¨¦rmino con el que los antichavistas califican a todos los hombres de negocios que se han hecho millonarios durante el decenio de Hugo Ch¨¢vez en el poder. A este grupo pertenecen los venezolanos que hoy est¨¢n en el banquillo en Miami, en el juicio relacionado con la maleta incautada en Argentina. Son Mois¨¦s Maionica, Carlos Kauffmann y Franklin Dur¨¢n.

Maionica, un abogado de empresas de 36 a?os, y Kauffmann, due?o de la petrolera Venoco, se declararon culpables de actuar como agentes de Venezuela en Estados Unidos. Dur¨¢n es el ¨²nico que decidi¨® enfrentar las consecuencias del juicio. Los tres, seg¨²n sostiene la fiscal¨ªa estadounidense, fueron enviados a Florida por el Gobierno venezolano para callar a Antonini. La operaci¨®n, seg¨²n se desprende de los documentos expuestos en el juicio, contaba con la venia del Gobierno del ex presidente N¨¦stor Kirchner (esposo de la actual presidenta Cristina Fern¨¢ndez), quien prometi¨® enterrar el caso siempre que Antonini, de tener que enfrentar un proceso, lo hiciera en Argentina. La petrolera estatal venezolana, PDVSA, pag¨® los gastos relacionados con la operaci¨®n.

Todos esos intr¨ªngulis quedaron al descubierto porque Antonini, temeroso de las consecuencias que el valijagate tuviera en Estados Unidos, decidi¨® colaborar con el FBI en la investigaci¨®n y grab¨® todas las reuniones que mantuvo con los enviados de Ch¨¢vez. Son 220 cintas. En una de ellas, por ejemplo, el funcionario del Estado venezolano Franklin Dur¨¢n cuenta c¨®mo hizo su fortuna: "Especul¨¦ con papeles [bonos de deuda p¨²blica]. Compramos papeles al 43% de su valor, a 700 bol¨ªvares por d¨®lar. Un banco, BanCoro, nos prest¨® 9,5 millones de d¨®lares para adquirirlos. Y los vendimos a 3.300 bol¨ªvares el d¨®lar, al 110% de su valor. Estaba Tob¨ªas N¨®brega de ministro de Finanzas. (...) Nosotros pusimos s¨®lo 500.000 d¨®lares y nos ganamos 100 millones. As¨ª nos hicimos ricos".

Maionica, en cambio, vendi¨® al Consejo Nacional Electoral en 2004 un sistema de identificaci¨®n biom¨¦trica por casi 54 millones de d¨®lares. Obtuvo una jugosa comisi¨®n, pero tambi¨¦n la amistad del entonces presidente de la Junta Nacional Electoral, Jorge Rodr¨ªguez, quien era el vicepresidente de Venezuela cuando estall¨® el esc¨¢ndalo del malet¨ªn. Hoy Maionica aspira a permanecer en Estados Unidos una vez que sea sentenciado. Ha puesto al descubierto demasiados desaguisados como para regresar a Venezuela.