R¨¦cord de 'ni?os-cayuco' en Canarias

Los 229 pasajeros que llegaron a Tenerife el pasado mi¨¦rcoles en el mayor cayuco de la historia no son el ¨²nico r¨¦cord de esta semana en la inmigraci¨®n de j¨®venes africanos hacia Canarias. Hay uno mayor y m¨¢s importante. Hasta anoche (porque la llegada de un nuevo cayuco deja antigua cualquier cifra), dorm¨ªan en centros tutelados por la Administraci¨®n canaria unos 1.200 menores extranjeros no acompa?ados; entre ellos, una treintena en comisar¨ªas, pendientes de que el resultado de la prueba ¨®sea de su mu?eca determine su edad. El n¨²mero de chavales acogidos duplica la capacidad de los centros.

Cada d¨ªa llegan menos adultos y m¨¢s menores en las embarcaciones

El fen¨®meno de los menores no acompa?ados comenz¨® en las islas en 1994. Los pocos ni?os y adolescentes que llegaban sin familiares ingresaban entonces directamente en los hogares que gestionan los cabildos insulares. Entre los a?os 2000 y 2006 llegaban al archipi¨¦lago una media de 250 a 315 chicos al a?o, que absorb¨ªa perfectamente esta red de hogares. Ahora arriban m¨¢s de 700.

La tendencia cambi¨® hace dos a?os. A principios de 2006 comenzaron a llegar cayucos llenos de menores no acompa?ados, algunos de ellos de no m¨¢s de nueve a?os. En un mes llegaron m¨¢s de 80 peque?os y adolescentes y no hab¨ªa plazas p¨²blicas para acogerlos. Tras una dura pol¨¦mica entre cabildos y Gobierno de Canarias, ¨¦ste entendi¨® que el fen¨®meno de los cayucos hab¨ªa cobrado otra dimensi¨®n. Y no se equivoc¨®.

Tras solventar dificultades de todo tipo (ni ayuntamientos ni asociaciones de vecinos son especialmente proclives a tener un centro de menores al lado), el Ejecutivo aut¨®nomo cre¨® el primer dispositivo de emergencia con 80 plazas. Hoy tiene seis, donde duermen 868 peque?os. A ellos se suma la red de 23 hogares de los siete cabildos, en los que viven otros 294 muchachos, entre 30 y 40 que se hallan en comisar¨ªa y los 172 que tutela y costea el Gobierno de Canarias pero que viven en hogares de ONG distribuidos en la Pen¨ªnsula.

El Gobierno de Canarias considera que no puede hacerse cargo de m¨¢s de 500 menores. Es decir, que ahora mismo habr¨ªa que reubicar a unos 700 en el resto del pa¨ªs. Fuentes del Ejecutivo aut¨®nomo matizan que "el problema que hay en Canarias no es de capacidad", porque nada impide que se construya un edificio de ocho plantas o una ciudad de los ni?os. Estos menores de los cayucos tienen un techo, comen bien a diario, se instruyen en espa?ol e inform¨¢tica y asisten a clases de carpinter¨ªa, cerrajer¨ªa o jardiner¨ªa. "El problema es que no hay capacidad para darles la educaci¨®n de cualquier ni?o de este pa¨ªs y que, en unos d¨ªas, llegar¨¢ un nuevo cayuco con otros 20 o 30 chicos y, al d¨ªa siguiente, otro m¨¢s con otros tantos".

Mientras se ha reducido notablemente el n¨²mero de adultos que llega en barcas, el de menores es similar al del a?o pasado, de tal suerte que ahora llegan m¨¢s ni?os en cada embarcaci¨®n. Los adultos s¨®lo permanecen 40 d¨ªas en un centro de retenci¨®n, pero un chico de 9 o 10 a?os pasar¨¢ sus pr¨®ximos ocho a?os de vida en uno de estos dispositivos de emergencia.

El Gobierno de Canarias espera con m¨¢ximo inter¨¦s el resultado de la reuni¨®n de hoy entre los responsables de distintos ministerios y la vicepresidenta Mar¨ªa Teresa Fern¨¢ndez de la Vega en la Comisi¨®n Delegada de Inmigraci¨®n, que se celebra todos los viernes. El ministro de Trabajo e Inmigraci¨®n, Celestino Corbacho, se comprometi¨® hace d¨ªas con la consejera canaria de Bienestar Social, In¨¦s Rojas, a presentar un convenio para desatascar la situaci¨®n. Rojas ha entregado al ministro una propuesta que contempla la derivaci¨®n a la Pen¨ªnsula de todos los menores que superen esa capacidad de 500 plazas que asume Canarias, cediendo su tutela al Estado o a la comunidad aut¨®noma acogedora. Tambi¨¦n propone que familias y particulares puedan cuidar y educar en sus hogares a alguno de estos chicos.