Historia sobre cuatro ruedas
Los Jove promueven un museo para mostrar su colecci¨®n de coches antiguos
En agosto de 1999, al a?o de fallecer repentinamente el hijo menor de ?ngel Jove Capell¨¢n, presidente de Anjoca, su familia se enter¨® por la publicaci¨®n C¨ªrculo de Dirigentes de que el empresario inmobiliario iba a crear un museo del coche antiguo y una fundaci¨®n en memoria de su progenitor. Diez a?os despu¨¦s de que se parase el motor de Jorge, se present¨® la referida fundaci¨®n. "Transcurri¨® tanto tiempo porque mi padre dijo desde el primer momento que cuando saliera a la luz quer¨ªa estar orgulloso de ella. Y ahora consideramos que estamos en condiciones de ofrecer algo digno". ?ngel Jove Gonz¨¢lez preside el patronato. "Inicialmente era un proyecto de mi padre. Nos cost¨® entender qu¨¦ pretend¨ªa, pero ahora es una prioridad para toda la familia".
La familia, que posee 287 veh¨ªculos, pide apoyo a la Administraci¨®n
Nueve mec¨¢nicos se dedican a cuidar un Renault AX de 1910 y un Cl¨¦ment de 1898
En el pol¨ªgono de Sab¨®n, en Arteixo, ?ngel Jove observa con atenci¨®n en el taller un Citro?n C-2 que parece irrecuperable. "Y ¨¦ste no es el que ha llegado en peor estado". Antes de pasar a una nave contigua en la que se custodian unos dos centenares de los 287 veh¨ªculos con los que cuenta la colecci¨®n -el resto est¨¢ en talleres o expuestos, como el Triciclo de Benz de 1886 que han prestado al Hotel Palace de Madrid-, quiere ense?ar la trastienda para que se entienda el esp¨ªritu de la iniciativa. "?Sabes que es un carburero? Eran los que se ocupaban de las luces de carburo, un oficio que ha desaparecido y tambi¨¦n hemos recuperado. No queremos hacer un museo y ponerle una ficha a cada coche porque no ser¨ªa m¨¢s que un garaje de lujo. Queremos que los coches sean el hilo conductor de un proyecto muse¨ªstico y cultural".
La iniciativa es ingente y carbura. "No vamos a parar. Mis dos hijos me han proporcionado la idea de crear unos circuitos con coches de juguete para aprender seguridad vial divirti¨¦ndose, habr¨¢ un centro de documentaci¨®n especializado y se recuperara este patrimonio hist¨®rico".
El proyecto, que ha asumido toda la familia, lo inici¨® hace tres d¨¦cadas el patr¨®n, ?ngel Jove Capell¨¢n. "Era un gran aficionado a las motos, fue probador y compiti¨® con el equipo Bultaco. ?l presume de que le ganaba a ?ngel Nieto, aunque l¨®gicamente ¨¦ste estaba empezando". La actividad empresarial lo apart¨® de las carreras, pero comenz¨® a coleccionar coches. "Para nosotros su afici¨®n era algo incre¨ªble. Pod¨ªas ver coches que ten¨ªas en la habitaci¨®n en un p¨®ster. Y a Jorge le encantaba restaurar todo tipo de cachivaches". En los estantes se archivan muchas de las piezas restauradas por el hermano fallecido y que acompa?ar¨¢n a los coches en el museo.
La afici¨®n del padre atrap¨® a los hijos. Ahora, ?ngel se pasa los s¨¢bados arreglando motores, con las manos manchadas de grasa. "Si te aburro, me lo dices, pero puedo pasarme horas hablando de esto". ?ngel es una enciclopedia de la automoci¨®n. Cada coche esconde una historia incre¨ªble que quiere transmitir a la sociedad. "A veces encontrar la documentaci¨®n y los materiales originales es una tarea ¨ªmproba. Tenemos que encargar muchos estudios a universidades extranjeras", afirma. "Los asientos de cuero eran para los conductores y para los veh¨ªculos de trabajo", comenta para ilustrar los cambios de la sociedad. Los ojos del ne¨®fito se van al Ford T; al Hispano Suiza, "la mejor marca que hab¨ªa en el mundo y a la que no se le ha hecho justicia en Espa?a"; pero ?ngel Jove se detiene delante de un 600: "Si me das a elegir, prefiero los coches que han influido en el desarrollo de la sociedad".
Se sienta en un Renault AX de 1910 y en un Cl¨¦ment de 1898, coches que arrancan y pasean cada cierto tiempo por la carretera un equipo de nueve mec¨¢nicos. "Hay una persona dedicada a encenderlos todos casi a diario", precisa. La fundaci¨®n tambi¨¦n ha arrancado. Ahora busca "un espacio de 30.000 metros cuadrados" para desarrollar el proyecto y el apoyo de las administraciones. "Con tal de que aporten la mitad de ilusi¨®n que mi familia, har¨ªamos un proyecto de referencia mundial".
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