La peor semana del 'nuevo' Rajoy

"Estoy a su disposici¨®n para las preguntas. Pero de este tema, por favor". El martes a ¨²ltima hora de la tarde, con aspecto agotado y reci¨¦n llegado de La Moncloa, Mariano Rajoy ped¨ªa clemencia a los periodistas con este gui?o. Quer¨ªa hablar de econom¨ªa, y evitar que le preguntaran sobre la en¨¦sima mala noticia interna, la que acababa de producirse en el Congreso: la fuga de votos de dos diputados murcianos, que se opusieron a la toma en consideraci¨®n del Estatuto de Castilla-La Mancha.

Era la puntilla que faltaba a una semana dur¨ªsima, que empez¨® el jueves con el fracaso total de su comida con su hasta ahora socio, el navarro Miguel Sanz (UPN), continu¨® el viernes con el desliz del "co?azo de desfile" y continu¨® el lunes con el cambio de posici¨®n sobre el plan econ¨®mico -presionado por los bancos, pas¨® de la cr¨ªtica cerrada al apoyo con reservas-.

Algunos preguntan si la crisis navarra no se podr¨ªa gestionar con m¨¢s mano izquierda

Un diputado pr¨®ximo a Aznar no vot¨® el Estatuto de Castilla-La Mancha

En los pasillos del Congreso y entre los dirigentes regionales consultados por tel¨¦fono era patente la preocupaci¨®n por la sensaci¨®n de descontrol. Rajoy, muy molesto por las dimensiones que alcanz¨® su desliz sobre el desfile, que le ha supuesto un baj¨®n an¨ªmico -pocos espa?oles han dejado de escuchar su confidencia con Javier Arenas- protagoniz¨® adem¨¢s el lunes la rueda de prensa m¨¢s tensa desde que gan¨® con claridad el congreso de Valencia y super¨®, al menos de momento, la crisis interna.

El asunto de la fuga murciana es especialmente sangrante porque los socialistas no sufrieron ni una fuga, a pesar de que ten¨ªan el mismo problema del agua.

"Esto pasa por la falta de autoridad interna. Madrid ya se sabe que va por libre. Luego son los navarros, ahora los murcianos, Rajoy tiene que demostrar ya su poder¨ªo o vendr¨¢n m¨¢s cosas", sentencia muy preocupado un diputado af¨ªn al l¨ªder.

La direcci¨®n del grupo, en manos de Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, trat¨® de hacer ese gesto de autoridad r¨¢pidamente y mult¨® con 300 euros a los dos diputados murcianos. Pero ya han saltado todas las alarmas. Para los que ven conspiraciones en todas partes -algo frecuente por la dur¨ªsima crisis poselectoral- no ha pasado desapercibida la ausencia en la votaci¨®n, sin justificaci¨®n oficial, del tambi¨¦n murciano Jaime Garc¨ªa Legaz. Se trata del secretario general de FAES y mano derecha de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, presidente de esa fundaci¨®n, a quien casi todos los marianistas ven siempre detr¨¢s de cualquier operaci¨®n de desgaste del l¨ªder.

La ausencia de Garc¨ªa Legaz, que ayer se?al¨® a EL PA?S que "ha dado las explicaciones internas a quien ten¨ªa que darlas", fue muy mal recibida por algunos diputados, que le acusan en privado de cobard¨ªa, aunque probablemente no ser¨¢ sancionada. Tampoco lo fue Luisa Fernanda Rudi, recuerdan amigos de Garc¨ªa Legaz, cuando rompi¨® la disciplina en el voto del minitrasvase a Barcelona. Otros parlamentarios narran que el movimiento anti-estatuto lleg¨® a ser muy poderoso el martes entre diputados del sector cr¨ªtico, pero la direcci¨®n logr¨® impedir una fuga masiva.

Otros dirigentes cr¨ªticos se?alan que el debate del estatuto ha dejado en evidencia la dificultad de Dolores de Cospedal para compatibilizar el cargo de secretaria general, y por tanto representante de los intereses de todo el partido, con el de l¨ªder de la oposici¨®n en Castilla-La Mancha.

El problema de fondo, el que de verdad cuestiona la autoridad de Rajoy, es Navarra, se?alan varios dirigentes. Todo camina hacia el renacimiento del PP navarro, una operaci¨®n muy compleja y costosa. Aunque creen evidente que Sanz es el culpable, algunos diputados preguntan en voz baja si no se podr¨ªa haber gestionado la crisis con m¨¢s mano izquierda para evitar llegar a una ruptura que no interesa a nadie. Rajoy vuelve a tener as¨ª ruido de pasillos despu¨¦s de unas semanas de tranquilidad, aunque, como siempre, sigue sin haber un gran grupo organizado ni mucho menos un candidato alternativo.