Tierras de migraciones
Los mexicanos dicen "pobre M¨¦xico, tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos". Ahora, por una parte, la gran mayor¨ªa de los latinoamericanos, como en el resto del mundo y seg¨²n las encuestas, prefieren que gane las elecciones Obama. Pero temen que precisamente porque demuestra mayor inter¨¦s hacia Am¨¦rica Latina y por los malos recuerdos de otros gobiernos dem¨®cratas (con la excepci¨®n de Carter), no sea peor el remedio que la enfermedad. Por ahora no es as¨ª. Obama se ha mostrado duro con el Gobierno colombiano, el m¨¢s amigo del Gobierno de Bush, al que acusa de complicidad activa o pasiva, con el asesinato sistem¨¢tico de sindicalistas por parte de los paramilitares. El candidato dem¨®crata se muestra m¨¢s cooperador con los gobiernos populares emergentes en Am¨¦rica Latina que su oponente republicano y no digamos de Bush. Su interpretaci¨®n del libre comercio tiene en cuenta, por ahora por lo menos, los intereses de los pa¨ªses del Sur y el respeto de los derechos de los ciudadanos. Paralelamente, Europa, Espa?a e incluso Barcelona (no olvidemos las siniestras ordenanzas del civismo que criminalizan entre otros absurdos a los inmigrantes).
Deber¨ªamos ser m¨¢s comprensivos con los inmigrantes y menos pretenciosos cuando vamos a Am¨¦rica Latina
Los espa?oles me parece que despertamos actitudes m¨¢s ambivalentes o negativas que hace unos a?os. De pronto se sienten maltratados por un pa¨ªs amigo que les era pr¨®ximo y que ahora les ofrece la cara de las grandes empresas con frecuencia arrogantes y con af¨¢n de beneficios r¨¢pidos y de los gobiernos represivos ante la inmigraci¨®n.
Les escribo desde Quito, ¨²ltima etapa de un viaje profesional que me ha llevado por Argentina, Colombia y ahora Ecuador. Como me he movido en territorios locales, es decir, las grandes ciudades, sus alcald¨ªas y los sectores profesionales y universitarios que se ocupan de lo urbano me referir¨¦ a estos mundos y a c¨®mo percibo su relaci¨®n con nuestro pa¨ªs y con Barcelona.
En Buenos Aires formalizamos un posgrado en urbanismo compartido entre la UOC y el Consejo Profesional de Arquitectos y Urbanistas. Comprob¨¦ que la referencia a Barcelona sigue siendo positiva, pero no siempre donde lo esperas. El gobierno de la ciudad expl¨ªcitamente de derechas se ofreci¨® a enviar t¨¦cnicos al curso, mientras que entre destacados profesionales progresistas las reticencias hacia el urbanismo de la ¨²ltima d¨¦cada eran frecuentes, sin que esto supusiera una cr¨ªtica negativa del conjunto. La Fundaci¨®n Madres de Mayo bajo la direcci¨®n de la ex ministra de Econom¨ªa Felisa Micceli organiz¨® unas jornadas sobre derechos humanos con la participaci¨®n de centenares de dirigentes sociales y profesionales.
Me pidieron que en vez de hablar de la producci¨®n de vivienda social (la fundaci¨®n est¨¢ realizando un interesante programa de viviendas integrando zonas marginales), explicara las pol¨ªticas migratorias. La famosa directiva europea que establece hasta 180 d¨ªas de detenci¨®n para los inmigrantes sin documentos en regla apoyada por el Gobierno espa?ol, la pol¨ªtica restrictiva del reagrupamiento familiar y la irreprimible vocaci¨®n del ministro del ramo de reducir las posibilidades de empleo de los inmigrantes y su pulsi¨®n expulsadora de los que siendo legales pierden su empleo ha generado un fuerte sentimiento de rechazo. Atenuado en el caso de los que son descendientes de espa?oles y esperan ahora poder ejercer el derecho prometido de obtener la nacionalidad.
Tambi¨¦n fui invitado como ponente en otras jornadas sobre Pol¨ªticas de Memoria organizadas por la Secretar¨ªa de Derechos Humanos del Gobierno de la Naci¨®n. No entienden la timidez del Gobierno espa?ol, que, a pesar de un contexto mucho m¨¢s favorable que el suyo, se resiste, por ejemplo, a declarar nulos los juicios celebrados durante la guerra y en la larga posguerra que condenaron a muerte o a muchos a?os de prisi¨®n o de exilio a centenares de miles de republicanos y de opositores a la dictadura. Es una cobard¨ªa dif¨ªcil de entender obviamente y que no nos da prestigio democr¨¢tico.
En Ecuador, ejerc¨ª de jurado en un concurso internacional sobre un gran proyecto de espacio p¨²blico que debiera convertirse en una nueva centralidad metropolitana y de asesor del Estatuto de la ciudad en proceso de elaboraci¨®n. En este caso justo es reconocer que Barcelona mantiene su prestigio pol¨ªtico e intelectual... siempre que no se entre en temas como la impotencia de crear gobernabilidad metropolitana, los excesos del urbanismo for export o de las arquitecturas ostentosas, o la citada ordenanza de civismo que se ha hecho tristemente famosa. A pesar de ello, la prestigiosa instituci¨®n latinoamericana de ciencias sociales FLACSO propone a la UOC dos posgrados, uno de gesti¨®n de la ciudad y otro de seguridad ciudadana. Algo similar ocurre en Colombia. Tanto la alcald¨ªa de Bogot¨¢ como la Universidad expresan el inter¨¦s de una cooperaci¨®n en lo que se refiere a la formaci¨®n y asesor¨ªa en gesti¨®n de la ciudad, y el PNUD (Naciones Unidas), un programa formativo sobre seguridad ciudadana dirigido a responsables locales y l¨ªderes sociales. Pero los interlocutores prefieren asegurarse de que los partners barceloneses no les van a vender sus modelos y que mantienen una m¨ªnima distancia cr¨ªtica.
Una conclusi¨®n a punto de regresar. Somos tambi¨¦n una tierra de migraciones. Fuimos emigrantes durante d¨¦cadas; ahora recibimos inmigrantes y viajamos por el mundo ofreciendo productos y servicios, unas veces por negocios y otras por ideas. A uno le parece que deber¨ªamos ser m¨¢s comprensivos con los inmigrantes y menos pretenciosos cuando vamos a Am¨¦rica Latina. Les aseguro que podemos aprender bastante de estos pa¨ªses que, en su mayor¨ªa, viven hoy procesos pol¨ªticos democr¨¢ticos innovadores.
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