Las nuevas y viejas ingenier¨ªas

M¨¢s de un a?o y medio despu¨¦s de que se desatara la guerra entre las ingenier¨ªas de cinco a?os, y las ingenier¨ªas t¨¦cnicas, de tres, a cuenta de c¨®mo quedar¨ªan estos t¨ªtulos con la reforma europea de las universidades, la normativa est¨¢, por fin, a punto de ver la luz. El tiempo se agota (la reforma tiene que estar completamente cerrada dentro de dos cursos y s¨®lo resta culminar el cambio de las ingenier¨ªas) y el Ministerio de Ciencia e Innovaci¨®n ya ha remitido a las universidades los borradores de la nueva regulaci¨®n que estar¨¢ en el Consejo de Ministros, presumiblemente, en noviembre.

La cosa quedar¨ªa as¨ª: seguir¨¢n existiendo dos niveles de ingenier¨ªas con atribuciones profesionales distintas (los trabajos que, por ley, s¨®lo pueden realizar personas con una determinada titulaci¨®n). Para hacer el trabajo que hoy hace un ingeniero t¨¦cnico, los alumnos estudiar¨¢n un grado (de cuatro a?os, t¨ªtulo que sustituye a licenciaturas, diplomaturas e ingenier¨ªas) y para hacer los de ingeniero superior, adem¨¢s, tendr¨¢n que hacer un master de uno o dos a?os. Para estos ¨²ltimos habr¨¢ dos posibilidades: estudiar un programa integrado de grado y master que no tendr¨¢ atribuciones profesionales hasta llegar al final, o estudiar primero un grado de alguna de las antiguas especialidades de ingenier¨ªa t¨¦cnica y luego estudiar un master, eso s¨ª, m¨¢s largo que los otros.

Variedad de soluciones

?Qu¨¦ queda abierto a¨²n? Por ejemplo, si ser¨¢n las antiguas escuelas de ingenier¨ªa t¨¦cnica las que ofrezcan los grados con atribuciones profesionales, y las antiguas escuelas superiores, los programas integrados y los masters para los que vengan de la otra opci¨®n, como preparan en la Universidad Polit¨¦cnica de Valencia, explica el ex director de la Escuela de Industriales, Juan Jaime Cano. O que las escuelas se integren y ofrezcan todas las posibilidades, como prepara la Universidad de Las Palmas, seg¨²n Jos¨¦ Mar¨ªa de la Portilla, el director de su Escuela Universitaria Polit¨¦cnica y presidente de la Conferencia Estatal de Directores de Escuelas de Ingenier¨ªa T¨¦cnica Industrial. O si es la comunidad aut¨®noma la que regula todas las posibilidades para unificarlas, como se quiere hacer en Andaluc¨ªa, dice el director de la Escuela Superior de Ingenieros Inform¨¢ticos y de Telecomunicaci¨®n de Granada, Buenaventura Clar¨¦s.

"Creo que se van a ver todas las opciones posibles, y que ¨¦stas depender¨¢n de la plantilla que se tenga, de cada universidad, de cada tipo de escuela y de cada titulaci¨®n", a?ade Clar¨¦s. Por ejemplo, la Universidad Polit¨¦cnica de Catalu?a est¨¢ planteando posibles fusiones de escuelas, pero s¨®lo en algunas ramas, dice una portavoz.

La gran pelea hasta ahora no ha estado en la Universidad, sino m¨¢s bien en los colegios profesionales, y siempre ha sido si se unificaban en uno solo los dos niveles actuales de ingenier¨ªa, como quer¨ªan los t¨¦cnicos, o si se manten¨ªan separados, como quer¨ªan los de ciclo largo, en cuanto a su ejercicio profesional regulado (esto afecta a los ingenieros e ingenieros t¨¦cnicos aeron¨¢uticos, industriales, navales, de minas, de telecomunicaci¨®n, a los t¨¦cnicos agr¨ªcolas, forestales, de obras p¨²blicas y topograf¨ªa, y a los ingenieros agr¨®nomos, de caminos, y de montes).

Pero una vez que el esquema ya est¨¢ m¨¢s o menos decidido (aunque a¨²n pueden quedar algunos), unos y otros parecen estar cerrando el asunto con la cabeza puesta en la pr¨®xima pelea: la ley de atribuciones profesionales, que el Gobierno se ha comprometido a revisar en un futuro (la regulaci¨®n de algunas ingenier¨ªas superiores es anterior a 1930).

Mientras los ingenieros de ciclo largo ven el resultado actual de la reforma de las titulaciones como algo justo -"Es normal que quien quiera estudiar, tenga m¨¢s derechos", dice el presidente del Instituto de la Ingenier¨ªa de Espa?a, Manuel Acero-, los t¨¦cnicos insisten en que se trata de un sistema "transitorio" mientras se ordenan de una vez las atribuciones profesionales, dice Jos¨¦ Mar¨ªa de la Portilla.

Pero al final, por el momento, las cosas seguir¨¢n m¨¢s o menos como hasta ahora. Un ingeniero que estudia menos tiempo se especializa en un ¨¢rea de su campo (por ejemplo graduado en Ingenier¨ªa de Minas, especialidad Explotaci¨®n de Minas, o Naval, especialidad estructuras marinas) y recibe atribuciones s¨®lo en esa especialidad, y otro estudia m¨¢s y recibe una formaci¨®n m¨¢s generalista y m¨¢s cient¨ªfica (master en Ingenier¨ªa de Telecomunicaci¨®n, por ejemplo), con atribuciones en todo su campo.

Asimismo, los borradores de la normativa tambi¨¦n establecen los m¨ªnimos a cumplir. En los grados se establecen los contenidos de la formaci¨®n b¨¢sica, la com¨²n a la rama de ingenier¨ªa (aeron¨¢utica, naval, etc¨¦tera), la de tecnolog¨ªa espec¨ªfica (aeronaves, aeromotores...) y el trabajo de fin de carrera. Esto equivale al 75% de la carrera, el otro cuarto queda al libre albedr¨ªo de las universidades. Con el master, del mismo modo, se establecen los planes de un a?o de un programa que puede prolongarse un m¨¢ximo de dos.