"Si no consigo vender algo para pagar el piso me meten en la c¨¢rcel"
Las tiendas de segunda mano se saturan de vendedores y faltan compradores
Marcos, que no quiere decir ni su nombre propio, est¨¢ sentado en una caja de embalaje. La mano derecha sujeta un cigarrillo, aunque est¨¢ prohibido fumar. La izquierda reposa en una cadena de m¨²sica de pl¨¢stico, algo antigua, y un ordenador descascarillado. Hace cola para vender esas cosas, incluido el contenido del opaco envase rectangular, en una de las tiendas Cash Converters. Una cadena franquiciada que multiplica sus clientes, aunque no precisa cifras. Sobre todo, incrementan los que llegan con mercanc¨ªa. "Han aumentado mucho y est¨¢n desequilibrando las ventas", explica uno de los gerentes de las ocho tiendas que la cadena tiene en Madrid. Las casas de empe?o, como el Monte de Piedad, otra opci¨®n de trocar objetos por dinero, han aumentado su volumen de negocio un 11,7% en los ¨²ltimos meses.
Un comercio de remiendos da cita para coser vaqueros a tres semanas vista
"El negocio va bien por muchas cosas, pero s¨ª es cierto que algo del incremento se debe a las hipotecas y a la crisis", concede ?lex Perreguero, director de mercadotecnia de la cadena Cash Converters, con 45 tiendas en Espa?a. Perreguero, racional, se?ala, sin embargo, que cree que hay otros factores m¨¢s importantes: "El cambio social en los ¨²ltimos a?os". Las cuentas de Cash Converters se han disparado en los ¨²ltimos tres a?os.
En la casa de empe?o hay muchas personas. M¨¢s de una centena. Bastantes con aspecto de ser inmigrantes. "Si no vendo algo me voy a la c¨¢rcel", explica Manuel, que asegura que fue estafado por un primo suyo en Ecuador. Est¨¢ en paro, "claro". Era obrero, "claro". "Tuve que vender hasta la furgoneta y las herramientas", se lamenta.
Las colas en las tiendas de compraventa llegan hasta la calle, pero aqu¨ª la gente no es tan locuaz con su econom¨ªa ¨ªntima. La gente coge n¨²mero y aguarda un proceso no demasiado r¨¢pido. Los vendedores deben dar su DNI y su nombre. Despu¨¦s proponer un pacto, regatear si viene al caso y despu¨¦s cerrar un contrato de venta. Aqu¨ª no hay posibilidad de recuperar la mercanc¨ªa, que pasa al otro lado del pasillo, a la zona de venta.
"Dan poco, una mierda, pero no est¨¢ la cosa para ir exigiendo, ?no?", es una de las pocas frases que Marcos se permite. Tiene 23 a?os. Dice que trabaja "en lo que sale" y que vende las cosas por necesidad, pero que son objetos que "sobran en casa". Una mujer de unos cincuenta a?os niega, sin embargo, que su presencia en la tienda de Alcal¨¢ tenga que ver con una necesidad: "Es un aparato de cine casero que antes que tirarlo prefiero ver lo que me dan por ¨¦l", dice asegurando que es la primera vez que visita el establecimiento. Despu¨¦s se contradice discutiendo con una amiga que la acompa?a si la cola ha crecido en los ¨²ltimos tiempos o no. Casi todos los que aguardan son espa?oles. Y poco comunicativos.
En la zona de Atocha la cola es m¨¢s o menos igual. Pero sus componentes son m¨¢s j¨®venes. No hablan de crisis coyuntural. "Nosotros siempre estamos en crisis", se r¨ªe Pablo, un estudiante que comparte piso con otros compa?eros de clase. Lleva en la mano una bolsa con pel¨ªculas. "Ya no las voy a volver a ver", zanja.
La m¨²sica y las pel¨ªculas tienen su p¨²blico, pero la verdadera parte del le¨®n del negocio se la llevan los tel¨¦fonos m¨®viles y la joyer¨ªa. La zona dedicada a los relojes, por ejemplo, ocupa una vitrina cerrada, como es habitual en los comercios del ramo. Y hay varias personas merodeando. Pero a ninguna le apetece hablar. Uno de ellos compra un reloj despu¨¦s de mucho observarlo al trasluz. No parece un afectado por la crisis. "A nosotros tambi¨¦n nos afecta la mala situaci¨®n econ¨®mica", explica el responsable de la tienda de Alcal¨¢, "porque viene menos gente a llevarse cosas y m¨¢s a dejarlas". "En ¨¦poca de vacas flacas no te compras una televisi¨®n porque sea m¨¢s barata. Sencillamente, no te la compras", apuntilla Perreguero.
En tiempos de crisis otro segmento de negocio que ha aumentado muy significativamente es el de los remiendos. De ropa o de objetos de piel o pl¨¢stico. "Octubre est¨¢ siendo una locura", confirma el dependiente de una de estas peque?as tiendas en el barrio de Ventas. Tanto, que uno de estos establecimientos, en San Sebasti¨¢n de los Reyes, est¨¢ dando plazos de espera de tres semanas para coser y parchear unos vaqueros... Y es que en Cash Converters no venden ropa.
M¨¢s pr¨¦stamos, menos consumo
- En 2008 las operaciones en el Monte de Piedad acumulan un importe en pr¨¦stamos en el tercer trimestre que supera en un 11,7% al del a?o pasado en el mismo periodo.
- De enero a junio, el Monte de Piedad empe?¨® por valor de 77,28 millones en 153.426 operaciones. En el mismo periodo de 2007 fueron 69,5 millones y 143.472 operaciones.
- El consumo al por menor de equipos para el hogar a agosto de 2008 hab¨ªa disminuido un 13,7% con respecto al mismo mes de 2007. En lo que va de a?o este consumo ha descendido un 9,1%.
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LA CADENA CASH CONVERTERS HA ABIERTO YA EN ESPA?A 45 ESTABLECIMIENTOS DE COMPRAVENTA DE PRODUCTOS. OCHO EN MADRID, INCLUYENDO ALCOBENDAS Y ALCORC?N
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