Las fatigas de Ricardo, el fontanero
M¨¢s de 48.800 empleos de aut¨®nomos se han perdido en lo que va de a?o
Ricardo Fuentes sabe de o¨ªdas que en la campa?a electoral de Estados Unidos irrumpi¨® en un mitin un tal fontanero Joe que inquiri¨® a Barack Obama sobre su pol¨ªtica fiscal, y que luego sirvi¨® de s¨ªmbolo dial¨¦ctico sobre las inquietudes de la clase trabajadora americana. Al final, Joe Wurzelbacher result¨® no tener licencia para ejercer la profesi¨®n ni paga impuestos. Ricardo, en cambio, s¨ª. Lleva m¨¢s de 18 a?os de aut¨®nomo de este gremio en Barcelona y cree que s¨ª podr¨ªa hablarle a los pol¨ªticos sobre c¨®mo afecta la crisis a los aut¨®nomos: sufren en primera l¨ªnea el cierre del grifo crediticio y no cobrar¨¢ paro.
Dice Ricardo, a quien hace meses que no le salen las cuentas, que suda la gota gorda y que mantiene el negocio por "amor propio". "Han desaparecido los clientes de siempre, s¨®lo peque?as urgencias. Ni grandes reformas ni obra nueva. Ha ca¨ªdo m¨¢s de la mitad del trabajo", explica este especialista en instalaciones de agua y electricidad. Hace un tiempo lleg¨® a dar trabajo a tres empleados; desde hace algo m¨¢s de un a?o trabaja solo. Fede Roca, otro fontanero barcelon¨¦s, opina que "la gente est¨¢ haciendo m¨¢s bricolaje casero que nunca".
El fiasco del ladrillo ha arrastrado buena parte del trabajo aut¨®nomo en Espa?a -fontaneros, electricistas, arquitectos-. Pero la crisis se ha cebado tambi¨¦n con comerciantes y otros profesionales: desde enero se han destruido 48.831 empleos aut¨®nomos, seg¨²n la Seguridad Social. Y la cadencia se ha acentuado en los ¨²ltimos seis meses. De abril a octubre, caen m¨¢s de 400 al d¨ªa en Espa?a, excepto Baleares.
Para esta tormenta, adem¨¢s, los aut¨®nomos no tienen paraguas. El Estatuto del Trabajo Aut¨®nomo, que se aprob¨® en julio de 2007, no se ha desarrollado. Por primera vez, establec¨ªa medidas de protecci¨®n social para el colectivo: derecho a la prestaci¨®n por desempleo o fijaci¨®n de un contrato con condiciones para el aut¨®nomo dependiente, ¨¦se cuyos ingresos proceden de una ¨²nica empresa.
Esta semana el Ministerio de Trabajo ha enviado al Consejo de Estado un proyecto de real decreto que desarrolla el apartado del estatuto que habla de los contratos de los aut¨®nomos y su registro. Para finales de a?o, Trabajo conf¨ªa en su aprobaci¨®n. El desarrollo de la protecci¨®n social depende del informe que est¨¢ elaborando una comisi¨®n de expertos. Sus trabajos tienen que concluir el 15 de noviembre, explica Lorenzo Amor, presidente de la Federaci¨®n Nacional de Trabajadores Aut¨®nomos (ATA).
"Las bajas en la Seguridad Social son una forma de ver el impacto de la crisis, pero no toda, porque s¨®lo cierran el negocio los que no tienen otro remedio", explican en la Uni¨®n de Profesionales y Trabajadores Aut¨®nomos (UPTA), vinculada a UGT.
Jos¨¦ Fernando Rodr¨ªguez, peque?o constructor de Fuenlabrada (Madrid), es de los que a¨²n aguanta, pero no descarta tirar la toalla. Su plantilla ha pasado de ocho a cuatro trabajadores. Adem¨¢s de la ca¨ªda de trabajo, Jos¨¦ se queja de la falta de cr¨¦dito: "Las p¨®lizas de cr¨¦dito est¨¢n pr¨¢cticamente anuladas". Su remanente de tesorer¨ªa ha bajado de unos 60.000 euros a 5.000.
Los aut¨®nomos catalanes de UGT-CTAC advierten adem¨¢s de que el cierre del grifo crediticio pone contra las cuerdas a un colectivo que vive a golpe de letras y pagar¨¦s. "Si no se abren los cr¨¦ditos, la asfixia va a llegar", explica Amor, de ATA, quien teme que las medidas financieras del Gobierno "no lleguen a las familias y los aut¨®nomos". As¨ª que demanda a las administraciones l¨ªneas de financiaci¨®n para los aut¨®nomos y medidas fiscales.
La situaci¨®n afecta, obviamente, a la familia, como recuerda Jos¨¦, el alba?il, casado y con dos hijas: "En mi familia se est¨¢ notando la falta de ingresos. Hay para ir tirando, pero bajando bastante el nivel de vida".
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