Tindaya, la obra maldita
El Defensor del Pueblo cuestiona el proyecto de Chillida en Fuerteventura
La obra de Chillida en Tindaya (Fuerteventura) va camino de convertirse en un proyecto imposible. El c¨²mulo de contratiempos que se han generado en torno a la idea que una noche tuvo el escultor Eduardo Chillida de crear un espacio interior en una monta?a "para los hombres de todas las razas y colores, una gran escultura para la tolerancia", han hecho imposible que a?os despu¨¦s Tindaya sea El monumento a la tolerancia que so?¨® el artista vasco.
Un reciente informe del Defensor del Pueblo cuestiona el valor del proyecto y advierte del peligro de "da?ar los valores naturales y culturales -217 grabados rupestres podomorfos declarados Bien de Inter¨¦s Cultural por la Ley de Patrimonio Hist¨®rico Espa?ol-". En el mismo documento se pone en entredicho el procedimiento de evaluaci¨®n ambiental del proyecto: considera que la Consejer¨ªa de Medio Ambiente canaria no puede ser juez y parte a la hora de elaborar un estudio de impacto y que se requiere imparcialidad para hacer ese tipo de valoraciones. Meses antes de que el Defensor del Pueblo realizase este informe, el Gobierno de Canarias hab¨ªa tomado la decisi¨®n de llevar adelante el proyecto con un presupuesto de 76 millones de euros.
La empresa encargada por el Ejecutivo para realizar el informe ambiental fue Estudios Guadiana, la misma firma de ingenier¨ªa que se iba a responsabilizar de la ejecuci¨®n de la obra. Esta decisi¨®n fue adoptada antes de conocerse la sentencia judicial que conden¨® al Gobierno de Canarias a pagar al propietario de Canteras Cabo Verde, SA, Rafael Bittini, 93,2 millones de euros por los derechos de explotaci¨®n mineros de la monta?a de Tebeto, contigua a Tindaya.
El proyecto de Tindaya se inici¨® a petici¨®n del Gobierno canario y para ello se cre¨® la sociedad Proyecto Monumental Monta?a de Tindaya (PMMT), una empresa participada al 50% por Saturno (empresa p¨²blica) y Canteras Cabo Verde (propiedad de Rafael Bittini), adjudicataria de la explotaci¨®n minera de Tindaya y Tebeto. Se destinaron inicialmente 12 millones de euros.
Pasaron los a?os, pero en Tindaya no se realiz¨® ninguna intervenci¨®n y del dinero nunca se supo nada. El Ejecutivo auton¨®mico recurri¨® a los tribunales para tratar de localizar el montante econ¨®mico, pero la causa fue archivada por la falta de indicios de delito. Los ecologistas, contrarios desde el principio al vaciado de la monta?a, sostienen que el da?o que generar¨ªa esta obra, m¨¢s pr¨®xima a la ingenier¨ªa que a la escultura, ser¨ªa demasiado alto, sobre todo para un lugar como Fuerteventura, considerado un ecosistema semides¨¦rtico muy fr¨¢gil, donde la subida del mar est¨¢ provocando ya la desaparici¨®n de algunas playas.
En el largo proceso que ha convertido en enrevesado el proyecto de Chillida, inspirado en el poema Lo profundo es el aire, de Jorge Guill¨¦n, se han entrecruzado la contestaci¨®n de los verdes, las sentencias judiciales y el dinero desaparecido entre empresarios presuntamente corruptos.
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