Dos tipos "terribles"
Sus t¨¦cnicos subrayan la enorme fortaleza mental de Del Potro y Nalbandian
Unos calzones blancos de tama?o monumental decoran en carteles las paredes de Mar del Plata mientras los sostienen unas manos burlonas. Son los calzones del lesionado Rafa Nadal, al que Juan Mart¨ªn del Potro prometi¨® liberar de tama?o peso. Delpo puede hacer eso y m¨¢s, mucho m¨¢s, dice Guillermo Coria, ex n¨²mero tres mundial. "Del Potro y [David] Nalbandian son dos jugadores con mucha fortaleza", cuenta El Guille, un talentoso perdido para el tenis en un laberinto de lesiones y dobles faltas. "Pueden ganar a cualquiera y en cualquier superficie. Son dos tenistas muy completos que hacen la diferencia en superficie r¨¢pida cubierta. Argentina tiene dos individuales terribles. No encuentro muchas debilidades en el equipo".
La pista beneficia a Nalbandian, peor clasificado, pero l¨ªder del equipo
"Sin ser arrogante o pedante", corrobora Franco Dav¨ªn, t¨¦cnico de Del Potro, "Argentina es muy favorita. Para m¨ª, Nalbandian es de los mejores jugadores que hay. En la Copa Davis, en esa superficie, no s¨¦ si hay hoy otro como ¨¦l", a?ade bajo su melena plateada; "Ferrer es incre¨ªble..., pero Argentina no tendr¨ªa por qu¨¦ no ganar".
La pista de Mar del Plata, remodelada cuatro veces, fue primero un proyecto de superficie ultrarr¨¢pida y luego un deseo de cancha m¨¢s lenta porque Nadal no iba a estar. Las reformas fueron dirigidas por Nalbandian, que buscaba el terreno ideal para su tenis de dicto y mando desde el centro de la pista. En el sutil juego diplom¨¢tico que equilibra a su equipo. El l¨ªder concedi¨® que se bajara un punto la velocidad. "A Juan Mart¨ªn le va a parecer r¨¢pida", dijo en privado.
El mejor argentino por ranking, sin embargo, es Del Potro, n¨²mero ocho, que el martes tuvo que salir corriendo porque un foco provoc¨® un peque?o incendio en la pista y ayer se lastim¨® la lengua. "Tiene gran fortaleza f¨ªsica y mental", dice Dar¨ªn, "pero est¨¢ a un 60% de lo que puede ser. En esta superficie es donde m¨¢s exprime el saque, pero me gustar¨ªa que fuera al polvo de ladrillo y se dijera: 'Ac¨¢ puedo desarrollar un juego que otros no'. Puede mejorar mucho la movilidad, el medio juego en adelante, la volea... Tiene que tirar mucho m¨¢s el rev¨¦s paralelo. Cuando ¨¦l juega bien, se ve que es mejor que los otros".
"Creo que la mejor superficie para David es ¨¦sta", a?ade Mart¨ªn Jaite, entrenador de Nalbandian y sufridor de sus altibajos. "Me gusta mucho verle jugar cuando est¨¢ bien y cierra las jugadas", dice. "Cuando se siente mal, me angustio un poco. Es el l¨ªder del equipo, naturalmente, porque en la Davis rinde muy bien", contin¨²a antes de revelar la estrategia con la que motiv¨® a Nalbandian, un tenista m¨¢s bien panzudo, en el final del curso: "Creo que en la historia de un jugador es muy importante poder jugar una final. Va m¨¢s all¨¢... Es historia de la vida".
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