La UE denuncia a Espa?a por no aplicar el visado para cient¨ªficos

La Comisi¨®n Europea ha llevado a Espa?a al Tribunal Europeo de Justicia porque es el ¨²nico pa¨ªs, junto a Chipre, que a¨²n no ha aplicado una directiva de 2005 para establecer un visado cient¨ªfico. Se trata de crear un permiso de residencia espec¨ªfico para los investigadores de fuera de la UE que acelere y facilite los tr¨¢mites. Tambi¨¦n para sus familias.

La atracci¨®n de los mejores cerebros de cualquier parte del mundo o el intercambio de ideas a trav¨¦s de la movilidad son algunos de los retos que se ha fijado el Gobierno en su estrategia para mejorar la Universidad y la investigaci¨®n en Espa?a. Pero aparte de intentar ofrecer unas condiciones atractivas, tanto laborales como de calidad y medios, parece que tambi¨¦n quedan trabas administrativas que salvar, que pueden prolongar el papeleo durante meses y acabar, seg¨²n la Fundaci¨®n Espa?ola para la Ciencia y la Tecnolog¨ªa, en la denegaci¨®n de los permisos.

La Comisi¨®n inici¨® el procedimiento en el Tribunal Europeo el mes pasado

Chipre es el otro pa¨ªs que tampoco ha incorporado a¨²n la normativa

Los tr¨¢mites dejan fuera a muchos solicitantes porque no cobran suficiente

Con el permiso se consigue la plena movilidad dentro de los Veintisiete

"Casi todos los Estados miembro han completado ya la transposici¨®n y han notificado a la Comisi¨®n las medidas concretas que han aplicado. Espa?a es uno de los dos pa¨ªses obligados por la directiva que a¨²n no han notificado esa transposici¨®n. El pasado 16 de octubre la Comisi¨®n inici¨® un procedimiento contra Espa?a ante el Tribunal Europeo de Justicia por esta raz¨®n", explica Michele Cercone, uno de los portavoces de la Comisi¨®n. Por su parte, una portavoz del Ministerio de Trabajo explic¨® que el desarrollo de esa directiva est¨¢ a la espera de la reforma pendiente de la ley de extranjer¨ªa, que el Gobierno pretende abordar antes del verano pr¨®ximo (unos cuatro a?os despu¨¦s de su aprobaci¨®n). Mientras, a?adi¨® la misma portavoz, hay una v¨ªa de entrada para estos investigadores a trav¨¦s de su unidad de grandes empresas.

Creada en 2007, esta unidad tramita los visados de extranjeros altamente cualificados, entre ellos, los investigadores. La media de tiempo de tramitaci¨®n en 2007 fue de 17 d¨ªas. Sin embargo, s¨®lo 45 de los m¨¢s 3.000 permisos pedidos por esta v¨ªa entre abril de 2007 y junio de 2008 correspond¨ªan a investigadores. Una escasez que el ministerio achaca al "desconocimiento" de esta opci¨®n y a la "posible desorientaci¨®n" sobre los organismos y administraciones a los que hay que solicitar alg¨²n papel.

Sin embargo, el problema es, seg¨²n Esther Ancina, de la Red Catalana de Apoyo a la Movilidad de los Investigadores, que para acceder a esta v¨ªa los cient¨ªficos tienen que acreditar unos ingresos que muchas veces no alcanzan, sobre todo, si aspiran a desplazarse con su familia.

Por ejemplo, un investigador del programa Ram¨®n y Cajal (creado para recuperar cient¨ªficos espa?oles emigrados, pero al que tambi¨¦n acceden extranjeros) gana unos 33.250 euros al a?o, el m¨ªnimo que marca el Estado y que las universidades no suelen elevar, seg¨²n la Federaci¨®n de J¨®venes Investigadores Precarios. Si ese cajal viaja solo o con su pareja, s¨ª le conceder¨ªan el visado en la unidad de grandes empresas (los m¨ªnimos que exige Trabajo son 21.600 y 32.400, respectivamente, relata Ancina). Pero si tuviera un hijo, le ser¨ªa imposible, ya que para el permiso de los tres tendr¨ªa que alcanzar un sueldo de 43.200 euros. El salario medio de los investigadores en Espa?a es de 34.908 euros al a?o, seg¨²n un estudio de 2007 de la Comisi¨®n Europea, por lo que buena parte de los investigadores no conseguir¨ªa el permiso.

El visado cient¨ªfico que aprob¨® la Comisi¨®n Europea supone crear un permiso de residencia para los investigadores de fuera de UE, independientemente del tipo de contrato que tengan. Ser¨ªan las propias universidades y centros de investigaci¨®n que se acrediten, a trav¨¦s de una autorizaci¨®n del Gobierno, los encargados de certificar la condici¨®n de investigador que va a trabajar en un proyecto, sus competencias profesionales y su salario.

El proceso acabar¨ªa en un convenio de acogida del investigador que las autoridades de inmigraci¨®n dar¨ªan por bueno tras una breve comprobaci¨®n del proceso. Cuando un Estado miembro conceda uno de estos permisos, el cient¨ªfico podr¨¢ moverse con ¨¦l por toda la UE durante el periodo de autorizaci¨®n (si el pa¨ªs aplica ya la directiva de 2005, claro).