A su manera
Francisco de la Torre, a la chita callando, se est¨¢ encontrando con una bicoca de legislatura. No tiene casi oposici¨®n en el Ayuntamiento de M¨¢laga y est¨¢ a punto de quedarse tambi¨¦n sin ella en su propio partido. Gobierna con mayor¨ªa absoluta y frente a ¨¦l no hay casi nada. Un grupo socialista integrado por doce concejales y al borde del desahucio y un grupo de IU formado por s¨®lo dos, pero que tan siquiera se hablan entre ellos. En el PSOE se fueron cinco de los siete primeros miembros de la lista, incluida la candidata y su n¨²mero dos. Y lo que queda del naufragio electoral est¨¢ para que no se les moleste. El grupo es una bomba de relojer¨ªa, donde est¨¢n representadas todas las familias enemistadas en el seno de esta organizaci¨®n. Las decisiones adoptadas por la nueva direcci¨®n de Miguel ?ngel Heredia para controlar las agrupaciones cr¨ªticas no han servido m¨¢s que para agrandar el problema interno del grupo municipal.
Hace unos d¨ªas el presidente de la Diputaci¨®n y uno de los dirigentes con mayor peso en el PSOE de M¨¢laga, Salvador Pend¨®n, habl¨® de sus preferencias para liderar el asalto a la alcald¨ªa en las pr¨®ximas municipales. Se refiri¨® a cuatro nombres: Magdalena ?lvarez, Jos¨¦ Mar¨ªa Mart¨ªn Delgado, Trinidad Jim¨¦nez y Bernardino Le¨®n. Entre los posibles candidatos no se incluy¨® a edil alguno del PSOE con acta de concejal en el ayuntamiento. Ni al periodista se le ocurri¨® preguntarle por alguno ni a Pend¨®n incluirlo. Era obvio, todos asumen que tendr¨¢n que buscar a un candidato fuera del consistorio.
Por si fuera poco, De la Torre logr¨® este pasado fin de semana la cuadratura del c¨ªrculo de la comodidad pol¨ªtica. Ha dejado su cargo uno de sus principales enemigos ¨ªntimos, Joaqu¨ªn Ram¨ªrez, el que fuera presidente del PP en M¨¢laga. El sustituto de Ram¨ªrez es un joven dirigente que se ha criado pol¨ªticamente bajo el mandato de De la Torre: El¨ªas Bendodo. De la cuerda de Ram¨ªrez, en el grupo municipal del PP, apenas le quedan ya varios ediles colocados en delegaciones de escasa proyecci¨®n. Tan aburridos en sus cargos, que ya no se preocupan ni de incomodar.
Si el coronel de Garc¨ªa M¨¢rquez no ten¨ªa qui¨¦n le escribiera, De la Torre lleva m¨¢s de un a?o y medio gobernando sin tener quien le critique. A pesar de protagonizar unos de los inicios de legislatura m¨¢s planos de su mandato, sigue c¨®modamente instalado en el sill¨®n municipal liderando una gesti¨®n tan correcta como siempre aunque un poco m¨¢s gris que nunca. Un d¨ªa si y el otro tambi¨¦n, De la Torre contin¨²a demostrando que tiene m¨¢s confianza en sus cargos de confianza que en sus concejales. Por eso no para de incrementar la n¨®mina.
El ¨²ltimo fichaje es Salom¨®n Castiel, que apenas un mes despu¨¦s de abandonar la direcci¨®n del Teatro Cervantes y del Festival de Cine, vuelve a casa por Navidad, como el famoso turr¨®n. Ahora como asesor para grandes eventos, a pesar de que ya hab¨ªa otro asesor de grandes eventos que ha habido que reubicarlo. Y sobre todo a pesar de que el patio econ¨®mico no est¨¢ para muchos eventos. Ni grandes ni peque?os. En M¨¢laga los asesores del alcalde son como la materia, nunca se destruyen s¨®lo se transforman.
Con todo, De la Torre sigue mostrando mucho m¨¢s acierto para nombrar cargos de confianza que para elegir concejales. Es un secreto a voces que las incorporaciones que hizo a su equipo de gobierno y que le permit¨ªa la nueva ley de Grandes Ciudades -personas que no iban en la lista electoral- han sido de un perfil tan bajo que no gust¨® ni a sus propios compa?eros. El tiempo parece que les est¨¢ dando la raz¨®n a los incr¨¦dulos. El problema que tiene la actual legislatura en el Ayuntamiento de M¨¢laga es que adem¨¢s de que apenas existe oposici¨®n cualquier d¨ªa falta tambi¨¦n el equipo de gobierno. El PSOE ni est¨¢ ni se le espera. De la Torre s¨ª, pero a su manera.
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