Silencio judicial en una querella por 'mobbing' en la calle de Robadors
Suspendido el desalojo del ¨²nico vecino que queda en la finca del n¨²mero 29
Manel Gonz¨¢lez es el ¨²nico inquilino que queda en la finca del n¨²mero 29 de la calle de Robadors de Barcelona. Su piso es f¨¢cil de reconocer porque no est¨¢ tapiado. El resto, m¨¢s de una quincena, est¨¢n sellados a cal y canto. ?l sigue malviviendo con goteras intencionadas -para echarle no han dudado en cortarle el suministro de luz y producir escapes- en una escalera en condiciones deplorables y con un sinf¨ªn de problemas. Lleva a?os denunciando ser v¨ªctima de mobbing. En octubre de 2007 present¨® una querella criminal contra las sociedades que en ese momento eran propietarias de la finca y en noviembre present¨® denuncia en el distrito de Ciutat Vella por id¨¦ntico motivo. Las dos se acumularon en el juzgado de instrucci¨®n n¨²mero 12, que todav¨ªa no ha realizado ni una diligencia. Ni sobre las pedidas por el propio afectado ni por las interesadas por el fiscal antes del verano. "Ni han llamado a declarar a nadie, ni nada de nada", explica el abogado Jaume Asens, que representa al inquilino.
La demanda por 'mobbing' est¨¢ parada desde que se present¨®, en 2007
"Si van a este paso, para cuando quieran resolver lo que sea ya se habr¨¢ ejecutado el desahucio", apuntaba un portavoz del Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad de Barcelona (DESC). De hecho, hace un a?o se suspendi¨® el desalojo y ayer se volvi¨® a paralizar por el estado de salud del afectado y por la presi¨®n que hicieron un grupo de personas y entidades que le apoyan, entre ellas la FAVB y el Observatorio. El desalojo fue instado por las dos sociedades actualmente propietarias del edificio -Taravaus 8086 y Mancia 2003- que demandaron al inquilino porque el contrato de alquiler hab¨ªa finiquitado.
Pero la historia es mucho m¨¢s larga y compleja. Arranca a principios de este milenio, cuando una vez abierta la Rambla del Raval se puso sobre el tapete urban¨ªstico otra intervenci¨®n de calado: la de Illa de Robadors. Hoy est¨¢ pr¨¢cticamente concluida con el hotel Raval ya en marcha, las viviendas sociales construidas y entregadas y el edificio de oficinas casi terminado. Falta la Filmoteca de la Generalitat, que se construir¨¢ al lado, con frente a la plaza de Salvador Segu¨ª. Fue entonces cuando muchas de las fincas de la calle de Robadors empezaron a despertar el inter¨¦s de sus propietarios y el de muchos promotores inmobiliarios. Las compraban con inquilinos, muchos de ellos con contratos indefinidos. La finca del n¨²mero 29, en la que vive el afectado, fue vendida en cuatro ocasiones entre julio de 2001 y julio de 2003 y en el registro aparecen hasta siete sociedades distintas. Antes de que empezara el baile de compraventas, el inmueble ten¨ªa 20 viviendas ocupadas y tres locales. Hoy s¨®lo queda Manel Gonz¨¢lez y el Bar La Alegr¨ªa, que, de momento, resiste a la presi¨®n de la propiedad para que acepte una indemnizaci¨®n y se vaya. La mayor parte de los inquilinos de esa finca, como sus vecinas, son gente mayor. Muchos por encima de los 65 a?os y con m¨¢s cosas en com¨²n: alquileres bajos y unas rentas que a duras penas llegaban a los 400 euros. Tres inquilinos de esa finca, adem¨¢s de Manel Gonz¨¢lez, firmaron la querella presentada el a?o pasado. "Pero se han retirado despu¨¦s de llegar a acuerdos con la propiedad", explicaba ayer el letrado Asens.
El caso del ¨²nico inquilino y tambi¨¦n querellante es m¨¢s complejo porque su contrato era temporal. Un juzgado le reconoci¨® el derecho de compra preferente cuando la finca fue vendida, algo que la propiedad le ocult¨® pero un tribunal superior se lo deniega. As¨ª las cosas, ahora quieren echarle a toda costa.
La actuaci¨®n del Ayuntamiento se ha limitado a requerir a la propiedad que rehabilitara la finca en cinco ocasiones, requerimientos que no fueron atendidos, como tampoco fue pagada la sanci¨®n econ¨®mica impuesta por eso mismo. Ahora, el distrito ha ofrecido una vivienda social al afectado por el mobbing. "Bueno, eso dicen. Porque, por ahora, no han concretado ni d¨®nde, ni cu¨¢ndo", subrayaba un representante del observatorio DESC.
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