¡®El dia de la marmota¡¯, cuento navide?o con roedor meteor¨®logo

Las fechas navide?as son repetitivas por definici¨®n: familia, comilonas, regalos. Nostromo Live acaba de estrenar El dia de la marmota, su primer gran musical en catal¨¢n, y estos d¨ªas de excesos le sientan de maravilla. Hace un tiempo se anunci¨® que ?ngel Ll¨¤cer abandonaba la direcci¨®n del montaje por motivos de salud, y ha sido sustituido por Enric Cambray con mucho garbo y oficio. Despu¨¦s de las producciones en Londres, Nueva York y Melbourne, es la primera vez que el musical se estrena en una lengua que no sea el ingl¨¦s. Y lo hace en Barcelona y en catal¨¢n. Ch¨²pate esa, Madrid.

Los que ya tenemos una edad recordamos vivamente la pel¨ªcula Atrapado en el tiempo, que es como se tradujo aqu¨ª Groundhoy Day (Harold Ramis, 1993): comedia rom¨¢ntica protagonizada por Bill Murray y Andie MacDowell sobre un meteor¨®logo condenado a vivir el mismo d¨ªa infinitas veces. La popularidad del filme ha calado incluso en nuestro lenguaje: cuando decimos que algo parece ¡°el d¨ªa de la marmota¡± es porque es tremendamente repetitivo. El musical se estren¨® en Londres en 2016 y cuenta con m¨²sica y letra de Tim Minchin y libreto de Danny Rubin. Ojo al dato: el mism¨ªsimo Stephen Sondheim hab¨ªa declarado su intenci¨®n de adaptar la pel¨ªcula, idea que acab¨® desestimando al ser imposible ¡°superar una obra perfecta¡±.

Enric Cambray dirige con alegr¨ªa un reparto muy compacto de catorce actores que no paran de currar durante dos horas y media. Las casas blancas dise?adas por Enric Planas son muy resolutivas, y el vestuario de Marc Udina recrea un 1993 con aire de cuento, pero al mismo tiempo muy realista. Roc Bernad¨ª en el papel del protagonista Phil Connors se erige en el pilar del espect¨¢culo: sobre sus espaldas (estupenda gabardina con hombreras) reposa todo el montaje, un en¨¦rgico y entregado elenco donde todos brillan. Diana Roig es Rita Hanson, una productora televisiva que nos hace olvidar a Andie MacDowell, y en papeles m¨¢s peque?os destacan Claudia Bravo como Nancy (su canci¨®n del segundo acto es preciosa) o J¨²lia Bonjoch y Oriol Bur¨¦s en distintos personajes. David Pint¨® ha traducido y adaptado las letras con gracia: la lengua afilada de Phil no tiene piedad, y se agradece un musical para p¨²blico adulto que no edulcora los tacos o el machismo de su protagonista. Manu Guix dirige una banda de seis m¨²sicos a la que se saca mucho provecho, y las coreograf¨ªas de Miryam Benedited mueven los habitantes de este pueblo perdido con ritmo y frenes¨ª.

Que un musical llamado El dia de la marmota tenga un primer acto un poco repetitivo al que le cuesta arrancar es casi una paradoja, pero estamos ante un espect¨¢culo que acaba convenciendo gracias a la entrega absoluta de sus int¨¦rpretes. Entre el d¨¦j¨¤ vu y la reformulaci¨®n posmoderna de El ¨¢ngel exterminador (Luis Bu?uel, 1962), El dia de la marmota coloca un espejo ante nuestros ojos y nos pregunta si realmente nos gusta la vida que vivimos. Que cada uno medite su respuesta.