Catamar¨¢n en el pantano
Negueira de Mu?iz proyecta rutas en barco entre Galicia y Asturias
"La Ribeira Sacra ser¨¢ maravillosa, pero yo no la conozco y he pasado por all¨ª. A los ca?ones del Sil no les tenemos nada que envidiar, seguro". El alcalde de Negueira de Mu?iz, Jos¨¦ Manuel Bra?a, no se corta. Presume de gobernar un lugar bello como nada y ajeno a todo. Ajeno incluso a la crisis, porque "es el m¨¢s despoblado de Galicia", "doscientos y pico" habitantes censados y algunos menos reales. "La mayor¨ªa de ellos jubilados, otros que tienen ganado" y unos cuantos bohemios extranjeros, herederos de la colonia hippy que se mont¨® en el municipio, al otro lado del embalse de Salime, hace 35 a?os. "La principal empresa de Negueira es el ayuntamiento", resume el socialista.
En este para¨ªso natural, el director general de la mayor factor¨ªa de Negueira planea construir un embarcadero en el ¨¢rea recreativa Virxe da Veiga y traer un catamar¨¢n "como el del Sil" para promover rutas tur¨ªsticas en el pantano que separa Galicia de Asturias. Tambi¨¦n en la comunidad vecina, a la altura de la presa del embalse, el consistorio de Grandas de Salime ha prometido a sus gobernados que har¨¢ un muelle. Bra?a Pereda sue?a ya con unir los dos municipios con el barco. Y la Diputaci¨®n de Lugo parece estar dispuesta a financiar sus planes. De momento, los responsables de Medio Ambiente del organismo provincial ya fueron a visitar el posible escenario de las instalaciones.
"En un sitio como este, la gente s¨®lo se puede entretener viendo la tele"
"No tenemos energ¨ªa nuclear ni cosas raras... Aunque yo no reniego de eso"
En Negueira apenas hay carreteras. Todav¨ªa hace cinco a?os, los ni?os de la comuna ten¨ªan que cruzar en barca a diario, en medio de la niebla, para acudir a clase. Ahora les han hecho una pista que bordea el r¨ªo Navia hasta el puente. El asfalto ha acercado mucho a nativos y forasteros, y este verano los negueirenses de las dos orillas del embalse, construido hace seis d¨¦cadas, incluso compartieron mesa y paella en las fiestas.
"Esto es tranquil¨ªsimo. Si alg¨²n d¨ªa llega aqu¨ª una banda de rumanos es porque les falla el GPS", dice entre risas el alcalde. "Ni uno de cada cien" gallegos conoce esta esquina del mapa, separada una hora y media de Lugo capital y mucho m¨¢s de cualquier otra ciudad gallega o asturiana. "De nosotros, la prensa s¨®lo se acuerda cuando hay elecciones", protesta Bra?a. "A la gente le hace mucha gracia eso de que seamos el ¨²nico pueblo de Galicia con listas abiertas. Yo, en la cartera, llevo una papeleta para ense?arla cuando salgo por ah¨ª, porque siempre me preguntan".
"Hoy vine de Santiago y la naturaleza que veo en Negueira es mejor que la que vi por el camino", vuelve a presumir el regidor. "Por algo nos han declarado Reserva de la Biosfera [Oscos-Eo-Tierras de Bur¨®n] junto a otros seis ayuntamientos gallegos y siete asturianos". "Nos lo concedieron por cuidar el entorno", repite una y otra vez durante la charla, sin tener demasiado en cuenta que es m¨¢s dif¨ªcil machacar el planeta all¨ª donde s¨®lo viven mayores de 80 a?os, y belgas, y brasile?os, y holandeses, y alemanes y checos que han huido del mundanal ruido. "En los tiempos que corren", sigue reflexionando, "no tenemos ni energ¨ªa nuclear ni cosas raras... Aunque yo tampoco reniego de todo eso", concluye, inquietante, el alcalde.
Bra?a todav¨ªa no ha "hablado de n¨²meros" con la Diputaci¨®n y se niega a dar fechas: "Soy una persona que no se marca plazos, pero que cumple todas sus promesas". Cuando est¨¦ el embarcadero, lo siguiente ser¨¢ promover la hosteler¨ªa en un municipio donde s¨®lo hay dos mesones y una casa de turismo rural. Si el catamar¨¢n logra aumentar el n¨²mero de visitantes, Bra?a Pereda sentir¨¢ que ha ganado la batalla al pantano que parti¨® en dos Negueira. El pantano que durante muchos a?os hizo que los vecinos, muchas veces familiares, s¨®lo hablaran en los entierros y las votaciones.
Claro que en Negueira de Mu?iz, antes que unas rutas tur¨ªsticas, urgen otras cosas. Los vecinos "se resignan" a que todo vaya llegando cuando cuadra, pero primero preferir¨ªan una residencia de la tercera edad y una buena instalaci¨®n de Televisi¨®n Digital Terrestre que unas excursiones en barco. "Aqu¨ª todos est¨¢n pidiendo que pongan la TDT, ?pero que la pongan y que funcione porque estamos aislados!", denuncia Bra?a: "En cuesti¨®n de m¨®viles, estamos condenados a ser de Movistar, y la Radio Galega s¨®lo la o¨ªmos en los altos. En un sitio como ¨¦ste, la gente, en invierno, s¨®lo se puede entretener viendo la tele".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.