El PSOE desaloja al PP de la alcald¨ªa de Pinto entre insultos y amenazas

Pinto tardar¨¢ en olvidar lo ocurrido ayer en su Ayuntamiento. Y no tanto por el fondo como por las formas. El socialista Juan Jos¨¦ Mart¨ªn se convirti¨® a ¨²ltima hora de la ma?ana en alcalde del municipio (41.000 habitantes) al prosperar la moci¨®n de censura apoyada por PSOE, IU y el concejal de Juntos por Pinto (JpP), Reyes Maestre. Este tripartito desbanc¨® al PP de un Ayuntamiento que hab¨ªa alcanzado por primera vez, y s¨®lo gracias al apoyo de JpP, en mayo de 2007.

Ocurri¨® en un pleno en el que los gritos, los insultos y las amenazas ganaron la partida a la palabra, que apenas pudo escucharse. Al final de la sesi¨®n, el secretario general del PSM, Tom¨¢s G¨®mez, tuvo que salir de la Casa Consistorial escoltado por una veintena de agentes de la Polic¨ªa Municipal y la Guardia Civil. La imagen deja bien a las claras la divisi¨®n.

Bastaba con asomarse a las puertas del Ayuntamiento desde primera hora de la ma?ana para comprender que la votaci¨®n de la moci¨®n de censura no ser¨ªa un tr¨¢mite f¨¢cil. Dos agentes municipales registraban con un detector de metales port¨¢til a todo aquel que acced¨ªa al edificio.

Dentro, decenas de personas se agolpaban a las puertas del sal¨®n de plenos, abarrotado desde una hora antes del inicio de la sesi¨®n, al mediod¨ªa. Cerca de 300 ciudadanos llenaban la sala. A un lado, el derecho, los seguidores del PP, capitaneados en primera fila por el secretario general de los populares, Francisco Granados. En el otro, el izquierdo, los socialistas: todos detr¨¢s de Tom¨¢s G¨®mez y alcaldes y concejales de municipios cercanos.

M¨¢s que un sal¨®n de plenos parec¨ªa una caja de resonancia. O un campo de f¨²tbol. La mitad de los asistentes abucheaba la presencia de dirigentes y alcaldes socialistas, al tiempo que lanzaba gritos del tipo "Esto no es Marbella", "Socialistas corrupci¨®n" o "Miriam, s¨ª; Juanjo, no". La otra mitad respond¨ªa a coro con la letra de la canci¨®n Cielito lindo: "Adi¨®s con el coraz¨®n".

El m¨¢s increpado, por decibelios y por agresividad, fue el concejal Reyes Maestre (Juntos por Pinto), que pact¨® con el PP tras las elecciones y se ha convertido un a?o y medio despu¨¦s en clave para la moci¨®n de censura. Durante una hora y media no par¨® de recibir insultos y amenazas como "vamos a ir a por ti".

Las intervenciones fueron pr¨¢cticamente inaudibles. Con la voz ahogada por la algarab¨ªa de silbidos, gritos y algunos aplausos, el candidato a la alcald¨ªa, Juan Jos¨¦ Mart¨ªn (PSOE), critic¨® "la tensi¨®n a la que el PP ha sometido en las ¨²ltimas semanas a Pinto". Justific¨® la moci¨®n por "el desgobierno y la par¨¢lisis" del Ayuntamiento. Se defendi¨® de las acusaciones de corrupci¨®n e hizo autocr¨ªtica por los 12 a?os de gobierno socialista en la localidad. Anunci¨® un gobierno "dialogante", "que buscar¨¢ el consenso".

La r¨¦plica de la que durante los ¨²ltimos 18 meses ha sido la alcaldesa del municipio, Miriam Rabaneda (PP), fue el ¨²nico momento con tensi¨®n rebajada. Pero tuvo que alzar la voz para acusar a los firmantes de la moci¨®n de querer convertir el municipio "en un Monopoly gigante" y de cometer "un atentado contra la voluntad de los ciudadanos".

Defendi¨® su labor y arremeti¨® con dureza contra Reyes Maestre, del que dijo que su "¨²nica aritm¨¦tica es la del inter¨¦s de unos pocos", y contra el edil de IU, Carlos P¨¦nit, quien, record¨®, "fue condenado por el Tribunal Supremo por prevaricaci¨®n". "Gracias por su autodestrucci¨®n. Me est¨¢n haciendo la mejor campa?a que un pol¨ªtico puede tener", se?al¨® Rabaneda.

La votaci¨®n de la moci¨®n de censura no depar¨® sorpresas: 11 votos a favor (PSOE, IU y uno de Juntos por Pinto) y 10 en contra. El socialista Juan Jos¨¦ Mart¨ªn recibi¨® el bast¨®n de mando y, tras saludar a los concejales del PP, se fundi¨® en un abrazo con G¨®mez y con sus socios de gobierno. Su discurso se limit¨® a un ir¨®nico "gracias por asistir al pleno de esta forma tan pac¨ªfica".

Decenas de personas increparon a la salida del Ayuntamiento a la comitiva socialista encabezada por G¨®mez, que tuvo que ser escoltada por agentes de Polic¨ªa Local y Guardia Civil. Varias personas llegaron incluso a golpear y zarandear su veh¨ªculo. "Si ha habido agresi¨®n, lo condeno absolutamente", dijo horas despu¨¦s la presidenta Aguirre. Unos 40 vecinos persiguieron a los ediles del nuevo equipo de gobierno durante algunos minutos por las calles aleda?as al Consistorio. En la refriega, un agente de la Benem¨¦rita result¨® lesionado al golpearse con una valla y requiri¨® atenci¨®n sanitaria.