"Los notarios somos como confesores"
La crisis del ladrillo llega a los rincones m¨¢s incre¨ªbles. "S¨ª, ya hay despidos en las notar¨ªas. A finales del pasado a?o se empez¨® a notar; ahora se firma la obra comprometida anteriormente; 2009 va a ser mucho peor". Almudena Castro-Girona se convirti¨® en 2003 en la notaria m¨¢s joven de Espa?a, con 25 a?os de edad. Es tan joven que la anterior crisis econ¨®mica le pill¨® en minor¨ªa de edad. Ahora hace cursos de inmersi¨®n. "De mi despacho dependen 12 familias. El notario es un funcionario peculiar, pagamos la n¨®mina de los empleados, las facturas de los servicios, el alquiler de la oficina, el sistema inform¨¢tico... y si meto la pata, yo respondo con mi patrimonio, no el Estado".
La que fue notaria m¨¢s joven de Espa?a ve su despacho, a veces, como una ONG
Al despacho Castro-Girona Mart¨ªnez nunca llegaba mucha hipoteca. "Hemos sido un despacho muy artesanal, muy de consulta familiar". El problema para el sector es que la hipoteca dejaba mucho dinero. Los precios del resto est¨¢n por los suelos. "El testamento, 36,61 euros, IVA incluido; la copia simple se va a rebajar a un euro, ni en el todo a cien".
El pisito sigue siendo el gran objeto de deseo del n¨²cleo familiar. "El notario es un observador, en primera fila, del desarraigo familiar, del abuso a los emigrantes, del desamparo de los mayores... Y mi funci¨®n es resolver las situaciones extremas de los clientes". Llegan los que firmaron la se?al del piso y ahora no pueden comprarlo porque no les dan el pr¨¦stamo. "Lo intentamos solucionar con un contrato de arrendamiento y aplazando la compra unos a?os por la cantidad fijada. Nuestra funci¨®n es dar soluciones jur¨ªdicas a los problemas sociales".
El anciano que llega con la directora de la residencia, con el hijo o el sobrino para darles el piso en herencia. "Me llevo aparte al anciano y le pregunto si de verdad quiere hacer eso. Me dice que si no les da el piso lo echan de la residencia o lo abandonan. La soluci¨®n es hacer dos testamentos, uno para satisfacer a quienes lo acompa?an, y otro privado y posterior, sin copia y por supuesto sin cobrar, donde deja el piso a quien desea. No somos meros testigos, mi obligaci¨®n es conocer la aut¨¦ntica voluntad del testador".
La v¨ªspera de firmar el pr¨¦stamo del piso, se cae del andamio y se queda en coma. El banco no admite la firma de la esposa. "La figura del 'guardador de hecho' se puede aplicar a la esposa y el banco lo tiene que aceptar obligatoriamente". Otro ramalazo de la crisis del ladrillo, el avalista. "Avalamos con mucha alegr¨ªa, pensando que nunca pasa nada, y ahora est¨¢ pasando. Sobre todo a inmigrantes".
La joven notaria disfruta con su trabajo. Habla como una ONG y en parte lo es. Dirige Aequitas, fundaci¨®n creada en 1999 por Juan Bol¨¢s, presidente del notariado europeo, para difundir los derechos de las personas vulnerables. Si la ley tiene un agujero, Castro-Girona intenta taparlo. "Somos creadores jur¨ªdicos, tambi¨¦n". Una mujer se queda en estado vegetativo de un d¨ªa para otro, el marido la abandona, y se hace cargo de ella su hermana. A los ocho a?os, la enferma muere y, como hab¨ªa testado antes de su enfermedad, todo lo hereda el marido que la abandon¨®. "Un caso clamoroso de injusticia, que se le present¨® a mi hermano Ignacio. Gracias a su iniciativa, el C¨®digo Civil se reform¨® para declarar 'persona indigna a suceder a quien no haya prestado los cuidados debidos al discapacitado". Van a resultar unos santos los notarios, "confesores, s¨ª que somos".
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