Por qu¨¦ la nieve colapsa Espa?a

Unos por echarse a la carretera y los otros por no poner las medidas para evitar el caos sobre el asfalto. Conductores y gestores de las v¨ªas se culpan mutuamente cada vez que la nieve las convierte en un peligro, como ocurre casi todos los a?os y como ha vuelto a suceder el pasado fin de semana en buena parte del noreste de la Pen¨ªnsula o como, de forma m¨¢s grave a¨²n, sucedi¨® hace un par de semanas en la autopista de peaje que conecta Asturias con la Meseta. Las alertas no lograron disuadir a los automovilistas, que emprendieron viaje, pero tampoco evitaron el corte de la AP-66 (Le¨®n) durante 20 horas o de la AP-7 (Girona) durante 11 el pasado s¨¢bado. Lo mismo ocurri¨® en Madrid el d¨ªa 13, cuando quedaron atrapados unos 3.000 coches en la sierra porque la mayor¨ªa de los conductores no llevaba cadenas. Una vez m¨¢s, a pesar de que la Agencia Estatal de Meteorolog¨ªa (Aemet) hab¨ªa decretado la alerta naranja, qued¨® demostrado que quedan conductores y carreteras en Espa?a que no est¨¢n preparados para afrontar los rigores invernales.

Los medios se han multiplicado desde los grandes temporales de 2004

Los pa¨ªses del norte son un modelo, pero tambi¨¦n sufren problemas

Nadie suspende un viaje: todos creen que el suyo es imprescindible

La responsabilidad de los caos est¨¢ repartida entre usuarios y gestores

Hasta un 72% de los espa?oles reconoce no sentirse capacitado para conducir sobre una carretera nevada. Lo mismo que no es f¨¢cil encontrar a automovilistas que conozcan c¨®mo reaccionar en caso de que el veh¨ªculo derrape en una placa de hielo, que sepan poner unas cadenas o cambiar un simple neum¨¢tico. Los avisos de las Administraciones han tenido que evolucionar para adaptarse a la idiosincrasia de los conductores espa?oles. La Direcci¨®n General de Tr¨¢fico, cuenta su subdirector Federico Fern¨¢ndez, ha pasado de recomendar que "no se viaje a menos que sea imprescindible" a pedir directamente que no se utilice el coche en situaciones climatol¨®gicas adversas. "Nos dimos cuenta de que todo el mundo considera que sus desplazamientos son imprescindibles, incluso ir a una reuni¨®n de amigos, y por eso hemos ido variando el mensaje", explica.

La lluvia, la niebla, el hielo, pero sobre todo la nieve, son excelentes examinadores de la previsi¨®n, coordinaci¨®n y cantidad de recursos de los responsables de las carreteras, de los organismos implicados en gesti¨®n de las v¨ªas y de las crisis que en ellas se puedan producir.

El caso de las autopistas de pago deber¨ªa causar sonrojo ya que, a cambio de la concesi¨®n, las empresas se hacen responsables del mantenimiento de la v¨ªa. La AP-66 estuvo cortada hace dos semanas con cientos de usuarios inmovilizados durante horas, mientras el puerto de alta monta?a de Pajares, una carretera convencional, permaneci¨® abierto casi ininterrumpidamente. Un informe de las delegaciones del Gobierno en Le¨®n y Asturias conocido la semana pasada culp¨® del incidente a la empresa concesionaria, Aucalsa, que cometi¨® "una actuaci¨®n indebida". Ya fue condenada en 2006 por la Audiencia de Burgos a pagar a m¨¢s de 4.000 usuarios 600.000 euros en da?os morales. El tribunal consider¨® que a cambio del peaje, ten¨ªa la obligaci¨®n de garantizar "una circulaci¨®n fluida, r¨¢pida y sin riesgos". En el caso m¨¢s reciente, el de la AP-7, no quedaron conductores atrapados. Tanto en una como en otra ha hecho falta la intervenci¨®n del Ej¨¦rcito para repartir mantas o v¨ªveres y rescatar automovilistas.

Los problemas por la nieve no son ¨²nicos en Espa?a. Los pa¨ªses n¨®rdicos est¨¢n preparados con ej¨¦rcitos de quitanieves y medios para que sus ciudades no se queden aisladas, pero cuando las nevadas se adelantan es frecuente que se produzcan importantes desbarajustes en carreteras de pa¨ªses tan acostumbrados al fr¨ªo como Finlandia, informa Adri¨¢n Soto. En Alemania, por ejemplo, una enorme nevada en 1978 que aisl¨® a la parte norte del pa¨ªs hizo que los medios mejorasen, pero a¨²n as¨ª con cada nevada excepcional se producen cortes de carreras y accidentes que son noticia, informa Juan G¨®mez.

De vuelta a Espa?a, el Ministerio de Fomento asegura que est¨¢ "perfectamente preparado para nevadas incluso m¨¢s fuertes" que las que se han producido en las ¨²ltimas semanas. Tras dos grandes tormentas en 2004, el Gobierno elabor¨® un plan de vialidad para las carreteras y puso en marcha un sistema de coordinaci¨®n de Protecci¨®n Civil para evitar nuevos caos. La secretaria de Estado de Infraestructuras, Josefina Cruz, lo explica poniendo sobre la mesa el aumento de medios en los ¨²ltimos cuatro a?os, cuando se ha duplicado el n¨²mero de quitanieves hasta alcanzar los 1.033, y se ha multiplicado por tres la capacidad de almacenamiento de fundentes. Casi 700 almacenes y silos distribuidos por todas las v¨ªas almacenan cerca de 180.000 toneladas de sustancias capaces de fundir la nieve, cuando el consumo medio anual se sit¨²a en 160.000.

Otra cosa es la coordinaci¨®n. Existe un protocolo de prevenci¨®n y actuaci¨®n en caso de situaciones que afectan a la movilidad por carretera que implica a ministerios, Guardia Civil, delegaciones del Gobierno, Protecci¨®n Civil, Aemet, direcciones generales de Tr¨¢fico y Carreteras y los gestores de autopistas de peaje. Explica c¨®mo se deben dar las alarmas, qu¨¦ informaci¨®n deben compartir las instituciones, cu¨¢les son las pautas a seguir para cortar una carretera. Pero basta un ejemplo para poner en duda la buena aplicaci¨®n del protocolo. Una simple pregunta -?qui¨¦n debe cortar una autopista de pago si se produce un bloqueo de veh¨ªculos por la nieve?- da las siguientes respuestas: Tr¨¢fico dice "que la concesionaria"; la Guardia Civil coincide. Pero la asociaci¨®n de concesionarias asegura que es la DGT o la empresa que la gestiona; la empresa Aucalsa (que se encarga de la AP-66) se?ala que no tiene potestad para cerrar las barreras y detener la circulaci¨®n, sino que es la Guardia Civil quien debe ocuparse.

Para Luis Montoro, presidente de la Fundaci¨®n Espa?ola para la Seguridad Vial, "el protocolo de responsabilidades no est¨¢ en absoluto bien definido. No, no est¨¢ claro lo que tiene que hacer cada uno". En su opini¨®n, existe una responsabilidad compartida en los caos provocados por situaciones climatol¨®gicas extraordinarias. "Es preocupante que los conductores repitan reiteradamente algunos errores: no llevar cadenas, no saber qu¨¦ es lo que se tiene que hacer en este tipo de situaciones, pararse donde no deben, no estar informados".

En cuanto a los fallos que normalmente cometen las empresas o la Administraci¨®n a la hora de afrontar estas situaciones, este catedr¨¢tico destaca la falta de an¨¢lisis de experiencias anteriores, incluso de experiencias de otros pa¨ªses, que, se?ala, "aprovechan m¨¢s los recursos, tienen m¨¢s coordinaci¨®n". Y concluye: "Si no hay an¨¢lisis, no hay forma de poner remedio, y un d¨ªa pasar¨¢ algo grave, habr¨¢ alg¨²n muerto".

Tom¨¢s Santa Cecilia, responsable de Seguridad Vial del Real Autom¨®vil Club de Espa?a (RACE) asegura que "la nieve y el hielo se pueden predecir y, si se puede predecir, se puede prevenir". Lo que ocurre, en su opini¨®n, es que la cultura, tanto la de los ciudadanos como la de la Administraci¨®n, es la de "la emergencia: actuamos despu¨¦s de que ha ocurrido el accidente". Santa Cecilia dice que hay que mirarse en el resto de los pa¨ªses de la UE, como Alemania o Suecia. "Tenemos que prevenir para evitar emergencias. En Espa?a tenemos un buen programa de intervenci¨®n, pero nos dormimos en los laureles en prevenci¨®n. Echamos la culpa al conductor o cuando ha ca¨ªdo la nevada avisamos al Ej¨¦rcito", afirma.

Precisamente por esa idea se cre¨® la Unidad Militar de Emergencias en 2006. Hasta este a?o no hab¨ªa tenido que actuar por nevadas. Y una vez m¨¢s se suscit¨® la pol¨¦mica de la coordinaci¨®n. No fue necesario que rescatasen a conductores el pasado fin de semana en Catalu?a, pero s¨ª a mediados de mes en la AP-66. El permiso para actuar no lleg¨® hasta tres horas y media despu¨¦s del corte de la autopista. Decenas de personas esperaron durante horas el rescate y se quejaron de no haber tenido suficiente informaci¨®n. "Yo mir¨¦ la p¨¢gina web de Tr¨¢fico y no pon¨ªa ning¨²n problema de circulaci¨®n", se quejaba una conductora. El subdirector de la DGT lo explica: "No somos adivinos, informamos de las incidencias que nos comunica la Guardia Civil de Tr¨¢fico. Lo que difundimos es lo que est¨¢ pasando en ese momento, nunca una previsi¨®n de lo que puede ocurrir en el futuro". De eso se encarga la Agencia Estatal de Meteorolog¨ªa a trav¨¦s de sus alertas, que difunde a todos los organismos implicados y medios de comunicaci¨®n. Aunque tambi¨¦n Tr¨¢fico tiene estaciones meteorol¨®gicas en las carreteras.

Federico Fern¨¢ndez recuerda que el fin de semana negro de la AP-66 se avis¨® a trav¨¦s de todos los medios disponibles de que hab¨ªa riesgo de nevadas "y a¨²n as¨ª muchos conductores salieron a la carretera". Estos mismos avisos los conoc¨ªan todas las Administraciones y gestores de autopistas, que no pudieron evitar, una vez m¨¢s, que cientos de personas quedasen atrapadas en la nieve.