Dios est¨¢ mosqueado
Si circunstancias sinuosas no lo impiden (lo est¨¢n intentando), a partir del d¨ªa 26 los autobuses urbanos de las l¨ªneas 3 y 14, que se mueven por el centro de la capital, circular¨¢n con esta publicidad en sus lomos: Posiblemente Dios no existe. Deja de preocuparte y disfruta la vida. Es una iniciativa de la Asociaci¨®n Madrile?a de Ateos y Librepensadores, que copian las campa?as de Londres y Barcelona. La Alianza Evang¨¦lica Espa?ola, adelant¨¢ndose a la previsible reacci¨®n de la Iglesia cat¨®lica, ha comenzado el contraataque con este mensaje que exhiben ya los autobuses de la l¨ªnea Fuenlabrada-Legan¨¦s-Aluche: Dios existe. Disfruta de la vida en Cristo.
Dios, seguramente a su pesar, est¨¢ de moda. Los ateos consiguen as¨ª un milagro que nunca hab¨ªa logrado la Conferencia Episcopal: que la gente hable del Alt¨ªsimo en todas partes; que los mercados, los bares, las tertulias y los taxis parezcan, a ciertas horas, aulas de teolog¨ªa asilvestrada. El arzobispado deber¨ªa otorgar una medalla de agradecimiento a los ateos madrile?os y cantarles el Tedeum bajo palio, si se dejan, que algunos son muy suspicaces.
En Gaza, los hijos de Jehov¨¢ masacran a los de Al¨¢
La pol¨¦mica que est¨¢ provocando en ciertos ¨¢mbitos el eslogan de los librepensadores carece de todo fundamento. Da la impresi¨®n de que algunos se ponen nerviosos por el simple hecho de que salga el tema a relucir. El mensaje es elegante, respetuoso y vitalista. "Posiblemente" s¨®lo puede herir sensibilidades fan¨¢ticas o descarriadas. En todo caso, conviene dejar a Dios tranquilo porque ya est¨¢ bastante mosqueado. Cuando los dioses se cabrean tiembla el misterio, como se comprueba en la Biblia y como se est¨¢ demostrando tr¨¢gicamente ahora mismo en Gaza, donde los hijos de Jehov¨¢ masacran a los de Al¨¢ y se perpetra una de las matanzas de inocentes m¨¢s vergonzosas de nuestro tiempo. Dios tiene que hablar con Jehov¨¢ y Al¨¢. Que acaben con esto ya. ?No son todopoderosos, seg¨²n dicen? Posiblemente no nos hacen ni caso, los humanos les parecemos est¨²pidos. Sus razones tendr¨¢n.
Al fondo de la barra hay un tipo que no habla. Al fin abre la boca: "Yo soy buena gente. Lo mismo me da que haya o no haya Dios. Lo mismo me da lo que ponga en los autobuses".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.