"No deje que el infarto sea su maestro"
Las consultas m¨¦dicas reciben cada a?o m¨¢s visitas de los llamados "adictos al trabajo". Lo cierto es que al tomarse tan en serio su actividad laboral, terminan por creer que su profesi¨®n es el principio y el final de sus vidas. A pesar de que suelen convertirse en altos directivos, "este estilo de vida inconsciente acaba pas¨¢ndoles factura", afirma Valent¨ªn Valls (Sant Feliu de Gu¨ªxols, 1944), m¨¦dico adjunto y consultor de cardiolog¨ªa del hospital Cl¨ªnico de Barcelona.
Pregunta. ?Cu¨¢l es el perfil de los directivos que acaban siendo sus pacientes?
Respuesta. Suelen ser varones de unos 45 a?os cuya vida profesional est¨¢ marcada por la hiperactividad, el estr¨¦s y la ansiedad. Si bien es cierto que ocupan puestos de mucha exigencia y responsabilidad, no saben, o no les interesa, llevar una vida m¨¢s sana y equilibrada, una negligencia que les llena de h¨¢bitos nocivos para su salud.
P. ?Como por ejemplo?
R. Trabajan m¨¢s de 10 horas al d¨ªa -cuando lo recomendable es un m¨¢ximo de ocho-, lo que atenta contra su salud a medio plazo. Adem¨¢s, se pasan muchas horas sentados delante de un ordenador, hablando por tel¨¦fono o asistiendo a reuniones, gener¨¢ndoles con el tiempo serios problemas de columna. Entre otros vicios, suelen fumar, beber y alimentarse r¨¢pido y mal.
P. De ah¨ª que la barriga sea un rasgo bastante com¨²n...
R. S¨ª, pero tambi¨¦n porque en general no suelen hacer ning¨²n tipo de ejercicio f¨ªsico -cuando lo sano es practicar deporte al menos tres veces por semana-, con lo que van acumulando grasa en la zona del abdomen, la mal llamada "curva de la felicidad". Este michel¨ªn no s¨®lo es una consecuencia clara de insatisfacci¨®n, sino que sube la tensi¨®n y el colesterol.
P. ?Alguna caracter¨ªstica nociva m¨¢s?
R. S¨ª. Malvivir de esta forma suele desgastarles r¨¢pidamente su energ¨ªa vital, esclaviz¨¢ndoles a la hiperreactividad emocional y, en consecuencia, al mal humor cr¨®nico. Y al no buscar momentos para descansar, desconectar y relajarse, nunca consiguen recuperar la fuerza necesaria para seguir en la brecha. De ah¨ª que suelan consumir diferentes ansiol¨ªticos y antidepresivos, que, de paso, tambi¨¦n les ayudan a combatir las noches de insomnio. Al ser incapaces de conciliar, muchos de ellos est¨¢n separados y apenas dedican tiempo a estar con sus hijos.
P. ?Y qu¨¦ consecuencias tienen todos estos h¨¢bitos?
R. Por un lado, afectan al coraz¨®n en forma de anginas de pecho, arritmias e infartos. Se dan casos de profesionales que han muerto en su propio despacho. Tambi¨¦n pueden da?ar al cerebro, desarrollando trombosis o hemorragias cerebrales, que suele paralizar medio cuerpo de por vida.
P. ?Y por qu¨¦ no cambian este estilo de vida?
R. Por vivir inconscientemente, lo que les convierte en aut¨®matas que trabajan de forma mec¨¢nica, sin tener en cuenta las consecuencias que tienen sus acciones sobre su salud. Con el tiempo van encerr¨¢ndose en un c¨ªrculo vicioso, que casi les obliga a enga?arse a s¨ª mismos para evitar enfrentarse al vac¨ªo, la angustia y la tristeza que sienten cuando se encuentran cara a cara con su desequilibrio interno, sobre todo cuando est¨¢n solos sin hacer nada.
P. ?Alg¨²n consejo m¨¢s?
R. Tan s¨®lo les dir¨ªa que no dejen que el infarto se convierta en su maestro. Lo digo porque la gran mayor¨ªa de estos profesionales no cambian de actitud ni de conducta hasta que toman conciencia de las consecuencias de no hacerlo a trav¨¦s de la enfermedad. Pero llegar hasta este punto puede ser irreversible. De ah¨ª que sea muy recomendable reflexionar acerca de la sostenibilidad que tienen tus acciones, pregunt¨¢ndose de tanto en tanto: "?De qu¨¦ sirve ganar el mundo si pierdes tu alma?". Es decir, qu¨¦ importa lograr el ¨¦xito profesional si no te sientes feliz, en paz y con capacidad de servir y de amar a los dem¨¢s. -
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