Tarde redonda para Ra¨²l

Ra¨²l celebr¨® su partido 500 en la Liga por todo lo alto: marc¨® un gol de los que dejan huella y colabor¨® decisivamente en el contragolpe con el que el Madrid abri¨® el marcador. El 7 recibi¨® el bal¨®n de Casillas y, sin soluci¨®n de continuidad, se lo cedi¨® a Higua¨ªn, que dio el pase para que Robben certificara su condici¨®n de jugador m¨¢s en forma del plantel blanco.

Pese a que el extremo holand¨¦s acaparaba todas las miradas, el capit¨¢n no renunci¨® a darse un homenaje en su quinto centenario liguero. En el minuto 16 se hizo un hueco entre los tres centrales del Mallorca para rematar, de tac¨®n, un env¨ªo de Higua¨ªn. No falt¨® el beso al dedo coraz¨®n, marca de la casa, y la dedicatoria a los aficionados madridistas desplazados a la isla, parapetados tras una pancarta de los Ultras Sur. Una imagen que no es nueva en Palma.

Ra¨²l es el quinto futbolista que alcanza 500 partidos en la Liga. Andoni Zubizarreta jug¨® 622; Eusebio Sacrist¨¢n, 543; Paco Buyo, 542; Manolo Sanch¨ªs, 523, y Nano Soler, 504. M¨¢ximo goleador de la Copa de Europa con 64 tantos, Ra¨²l ha anotado 305 goles oficiales con el Madrid y est¨¢ a s¨®lo dos de igualar al l¨ªder, Alfredo Di St¨¦fano. Sus tantos se reparten as¨ª: 212 en la Liga, 64 en la Liga de Campeones, 18 en la Copa del Rey, siete en la Supercopa de Espa?a, uno en la Supercopa de Europa, uno en la Intercontinental y dos en el Mundial de clubes.

De los 212 goles que suma Ra¨²l en Primera, ocho se los ha endosado al Mallorca. El p¨²blico balear recuerda especialmente el que marc¨® en la inauguraci¨®n del Ono Estadi, por entonces llamado simplemente Son Moix, all¨¢ en la primera jornada de la temporada 2002-03.

Casi 14 a?os despu¨¦s de su debut, Ra¨²l exhibi¨® ayer su absoluta jerarqu¨ªa en el vestuario blanco. Tuvo libertad total para moverse por la zona de ataque, fue el primero en presionar la salida del bal¨®n rival, recrimin¨® las decisiones arbitrales que consider¨® incorrectas, apremi¨® a sus compa?eros en el saque de las faltas e incluso ejerci¨® de organizador de los defensas en las jugadas a bal¨®n parado. Cuando fue sustituido, en el minuto 72, la grada local reaccion¨® con pitos y aplausos a partes iguales.