M¨¢s 'Obamas'

Escuch¨¦ ¨ªntegro y en directo el discurso de Obama en su toma de posesi¨®n. Puede que a la larga resulte una decepci¨®n, imposible negar esa posibilidad, pero ahora me ha regalado uno de los mejores momentos de esperanza y confianza en el ser humano. Me ha hecho creer en ¨¦l y no sentirme tan sola cuando ha hablado de felicidad, de diversidad, de respeto y responsabilidad. Porque ha utilizado ese idioma universal que cualquiera puede entender. Ha fomentado el deseo instant¨¢neo de tener cerca un Obama trabajando codo con codo para cambiar la sociedad. Ojal¨¢ hubiera m¨¢s Obamas en los partidos, en las asociaciones, capaces de vencer en la aritm¨¦tica de los votos, pero tambi¨¦n de convencer a voluntades tan dispersas y unificar lealtades tan trabajadas. Obamas que no le tuvieran miedo al talento, a la diversidad, a la inteligencia y se rodearan de ellas sin complejos. Obamas en los que una pueda permitirse creer no porque sean divinos sino porque muy al contrario, son especialmente humanos.