Las indemnizaciones a las v¨ªctimas del Ulster provocan indignaci¨®n
Los unionistas exigen que los pagos discriminen entre inocentes y terroristas
"El proceso de paz, como bien sabemos, tiene a¨²n un largo camino que recorrer", afirm¨® ayer en Belfast el mediador surafricano Brian Currin. No se refer¨ªa a la reconciliaci¨®n en Sur¨¢frica tras el largo periodo de racismo que padeci¨® la poblaci¨®n negra, sino a la reconciliaci¨®n en Irlanda del Norte tras 40 a?os de disturbios que dejaron 3.700 muertos. Instantes antes, cientos de personas reunidas para la presentaci¨®n formal de las propuestas sobre la reconciliaci¨®n en el Ulster hab¨ªan presenciado o protagonizado una escena de agria tensi¨®n, con un tenso intercambio de insultos y reproches que por un momento pareci¨® que pod¨ªa llegar a mayores.
Una de las propuestas est¨¢ en el origen de este rebrote de un odio que nunca ha estado muy enterrado a pesar de que se ha acabado la violencia pol¨ªtica: la de compensar con 12.000 libras (casi 13.000 euros) al familiar m¨¢s pr¨®ximo de cada una de las v¨ªctimas mortales de los disturbios, sin distinguir el bando al que pertenec¨ªan ni las circunstancias de su muerte. Es decir, sin entrar a valorar si fueron s¨®lo v¨ªctimas o v¨ªctimas y verdugos a la vez.
La propuesta prev¨¦ compensaciones de 13.000 euros para los familiares
El escenario de esta en¨¦sima prueba de que el odio es m¨¢s dif¨ªcil de enterrar que las armas fue uno de los centros neur¨¢lgicos de los disturbios: el sal¨®n de baile del hotel Europa, en el centro de Belfast, que los expertos en el conflicto de Irlanda del Norte consideran el hotel m¨¢s bombardeado del continente. All¨ª estaban ayer los que siempre se opondr¨¢n al entendimiento del unionismo con el Sinn F¨¦in, como el eurodiputado Jim Allister, l¨ªder de la extremista Voz Unionista Tradicional, que mostraba pancartas contrarias a las indemnizaciones. Allister opina que con esa medida "se pone a los terroristas heridos por sus propias bombas al mismo nivel que a las v¨ªctimas inocentes". O Cedric Wilson, antiguo miembro de la Asamblea del Ulster, y Willie Frazer, de Fair (siglas en ingl¨¦s de Familias Actuando por Parientes Inocentes), un grupo de familiares de v¨ªctimas que siempre se ha opuesto al proceso de paz. Los dos especialmente activos ayer en ese sal¨®n de baile.
El plan ha sido elaborado por una comisi¨®n independiente formada en junio de 2007 por el Gobierno brit¨¢nico. El denominado Grupo Consultivo sobre el Pasado est¨¢ presidido por el ex primado de la Iglesia de Irlanda (protestante), lord Eames, y por Danis Bradley, primer vicepresidente del Consejo de Gobierno del Servicio de Polic¨ªa de Irlanda del Norte.
La comisi¨®n ha presentado un informe de 190 p¨¢ginas que eleva al Gobierno brit¨¢nico una treintena de recomendaciones. Adem¨¢s de las indemnizaciones, propone crear una Comisi¨®n del Legado que deber¨¢ estar presidida por una personalidad internacional y otros dos miembros y deber¨¢ tutelar la forma gen¨¦rica en que se aborda el llamado legado de los disturbios. Para afrontar ese pasado, los Gobiernos de Londres y Dubl¨ªn pondr¨¢n sobre la mesa 300 millones de libras (325 millones de euros), incluyendo los 50 millones de euros que pueden costar las pol¨¦micas indemnizaciones.
Una nueva unidad de informaci¨®n recoger¨¢ de forma privada informaci¨®n de los paramilitares y los servicios de seguridad para establecer c¨®mo y por qu¨¦ murieron las v¨ªctimas del conflicto. Pero la comisi¨®n ha propuesto que no se abra ninguna nueva investigaci¨®n p¨²blica sobre las matanzas. ?sa es tambi¨¦n una propuesta pol¨¦mica porque hay dos casos en los que se sigue reclamando esa investigaci¨®n: la bomba de Omagh, con la que disidentes del IRA mataron a 29 personas en agosto de 1998, cuando ya se hab¨ªan firmado los Acuerdos de Viernes Santo; y el asesinato del abogado cat¨®lico Pat Finucane en febrero de 1989. Oficialmente asesinado por lealistas, los republicanos siempre han cre¨ªdo que en el atentado participaron tambi¨¦n los servicios secretos brit¨¢nicos.
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