Ashley Judd ataca a Palin por permitir cacer¨ªas salvajes

Es la guerra. Toman parte en ella estrellas de Hollywood, lobos de las remotas tierras de Alaska y la incombustible gobernadora Sarah Palin. La primera en disparar ha sido Ashley Judd, famosa por sus papeles en ¨¦xitos como Doble traici¨®n o Heat. "Ya es hora de detener a Sarah Palin y su absurda salvajada", dice la actriz en un v¨ªdeo difundido en YouTube esta semana, en el que pide que se proh¨ªba la caza de lobos desde avionetas. "La gobernadora quiere que siga y se ampl¨ªe este horrendo deporte", denuncia.

Hace cinco a?os que Alaska permiti¨® a los cazadores disparar desde avionetas. Desde entonces han sido abatidos m¨¢s de 800 animales con este m¨¦todo, seg¨²n denuncia Defenders of Wildlife, el grupo con el que colabora Judd en esta campa?a. Su objetivo es recaudar fondos y presionar al Congreso de Estados Unidos para que impida este m¨¦todo de caza mediante una ley federal.

La gobernadora de alaska consiente matar animales desde avionetas

Lo que para los ecologistas es una pr¨¢ctica brutal, en Alaska se puede interpretar como un simple m¨¦todo para el control de los depredadores. En 2007, Palin intent¨® implantar una recompensa de 150 d¨®lares por cada animal abatido desde avionetas. La gobernadora quer¨ªa limitar de este modo la poblaci¨®n de animales que, seg¨²n los bi¨®logos consultados por su Gobierno, estaba creciendo m¨¢s all¨¢ de lo recomendable.

A todos los cazadores que presentaran la pata izquierda de un lobo muerto se les habr¨ªa pagado. La medida nunca fue aprobada, ya que las recompensas a cazadores quedaron ilegalizadas en Alaska en 1984. Pero para los ecologistas, Palin qued¨® marcada como la gobernadora que quiso cazar m¨¢s lobos desde el aire que nadie.

"Este anuncio de un grupo radical y extremista manipula la realidad sobre los programas de control de la fauna en Alaska, y es algo que mis conciudadanos saben desde hace tiempo", se?ala Palin en un comunicado. "La alimentaci¨®n y la vida cultural de la gente de Alaska depende de nuestra fauna y no podemos permitirnos que los depredadores diezmen la poblaci¨®n de alces y carib¨²es". En su respuesta a Ashley Judd, Palin no niega que sea partidaria de esta pr¨¢ctica. Como ya hizo en la campa?a electoral que perdi¨® junto a John McCain, ha optado por criticar al mensajero, pero no se ha pronunciado sobre el mensaje.